Movilizaciones en diferentes lugares de Chile a 9 meses sin Julia Chuñil Catricura
Se cumplieron nueve meses de la desaparición forzada de Julia Chuñil Catricura (72 años), presidenta de la comunidad mapuche Petreguel en Máfil (Los Ríos). Líder ambientalista reconocida por su defensa del bosque nativo, su caso evidencia la vulnerabilidad de defensores indígenas en Chile, país signatario del Acuerdo de Escazú, que obliga a proteger activistas ambientales.
Miles de personas ocuparon la explanada del Estadio Nacional en Santiago el viernes, convocados por la Asamblea por Julia Chuñil y la Unidad de las Luchas. Exigieron verdad, justicia, fin a la militarización mapuche y castigo a responsables. Simultáneamente, en Antofagasta, Temuco, Valdivia y Concepción, entre otras localidades, organizaciones sindicales, feministas y ambientales, articularon actos bajo la consigna: «Justicia por Julia Chuñil, No al extractivismo; Unamos todas las causas».
Algunos registros compartidos en redes sociales:
Concepción
Explanada Estadio Nacional (Santiago) / HispanTV
Santiago (Piensa Prensa)
Temuco (Radio Kurruf)
Comunicado de la familia: “Merecías quedarte con tus nietos pequeños, verlos graduarse y cumplir sus sueños”
La familia de Julia emitió un emotivo comunicado: «Un día como hoy, hace 9 meses, perdimos tu rastro, dejamos de escuchar tu voz. El destino cambió nuestros planes (…) Han sido meses de tristeza. El sobrepensar que habrá pasado contigo Julia, qué sucedió en ese bosque que tanto amabas y cuidabas. Esas tierras que con tanto amor trabajabas”.
Agregan: “Solo nos quedan los lindos recuerdos y fotografías: una mujer muy trabajadora, sobre todo humilde. Nos duele haber perdido nuestra madre y abuela de esta forma. Merecías quedarte con tus nietos pequeños, verlos graduarse y cumplir sus sueños; tus hijos tenían que verte envejecer y descansar tus últimos días en una cama (…) Julia, eres una mujer que sufrió muchísimo en la vida pero siempre mantuviste tu frente en alto, luchando por tu derechos, como una madre, abuela, una líder y mujer muy importante. ¡No sabes como nos duele tu desaparición forzada! Las personas que están detrás de esto no saben el dolor que nos dejaron en el alma, en nuestros corazones”.
Indican asimismo: “No hay perdón después de ver a los niños más pequeños llorar por extrañar a su abuela que tanto amaban y anhelaban. Extrañamos tu risa , tus consejos, aquellas largas historias y, sobre todo, tus regaños -que quizás eran exagerados- pero eso nos hizo las personas que somos hoy en día (…) Muchos de tus hijos y nietos seguiremos tus pasos; lucharemos por nuestros derechos y no callaremos. Seguiremos firmes y con la cabeza en alto, orgullosos de llevar tu sangre y la de nuestros ancestros”.
“Como familia teníamos un vacío enorme en el corazón, pero en nuestra lucha por la verdad, durante nuestro camino, se nos fue sumando el apoyo de muchas personas solidarias y de nuestra nación Mapuche que a pesar de las diferencias, todos se unieron y compartieron nuestro dolor; personas que todos los meses se levantan junto a nosotros, nos toman de las manos y gritamos ¿DÓNDE ESTÁ JULIA CHUÑIL? Exigimos la pronta aparición de nuestra madre, abuela y defensora de su Mapu (…) Desaparecida por luchar por sus derechos como mujer mapuche y el cuidado de tierras ancestrales y protección del bosque Nativo con una hermosa flora y Fauna (…) Que los verdaderos responsables y principales sospechosos sean investigados, no más intentos y montajes a su familia. Chaltumay»
Informe de derechos humanos:
Coincidiendo con las movilizaciones, cinco organizaciones del Espacio Día a Día por Julia Chuñil presentaron ante el Comité de DESC de la ONU un informe de 15 páginas. Denunciaron «un preocupante retroceso en derechos humanos, sociales y ambientales» en Chile, señalando la profundización del extractivismo bajo la excusa de la «transición energética» y políticas que «promueven impunidad y criminalizan la protesta».
El documento vincula la desaparición de Chuñil con la inacción estatal: «Las medidas cautelares de la CIDH no bastaron para activar una búsqueda real». Subraya la «desprotección estructural hacia defensoras ambientales, en especial mujeres indígenas», calificando su caso como síntoma de prácticas represivas y omisión del Acuerdo de Escazú.
El informe critica la Estrategia Nacional del Litio, que declara «explotable» el 70% de salares sin consulta indígena. También señala leyes regresivas como «Ley Naín-Retamal y Antiterrorista, que facilitan uso excesivo de la fuerza», zonas de sacrificio como Quintero, y la crisis en salmonicultura: *»81 trabajadores muertos entre 2013-2025″* y contaminación de ecosistemas patagónicos.
Lucía Sepúlveda (MAT) vinculó el caso Julia con la regresión de derechos: «Lo ocurrido está en el marco de leyes que permiten impunidad». Juana Aguilera (CECTT) apuntó a la «omisión estatal ante daños ambientales». Juan Carlos Cárdenas (Ecocéanos) alertó sobre «proyectos de ley que buscan criminalizar a defensores y periodistas críticos».
Las organizaciones demandan al Estado medidas urgentes de reparación, protección territorial y cumplimiento de estándares internacionales. Mientras las movilizaciónes mantienen viva la pregunta: «¿Dónde está Julia Chuñil?», su caso simboliza la lucha contra un modelo que sacrifica derechos humanos y ambientales en nombre del progreso.