Elecciones en Francia: Nuevo Frente Popular frena a la ultraderecha de Le Pen

La segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia ha dejado claro el rechazo a la ultraderecha y ha abierto una nueva etapa política con el Nuevo Frente Popular a la cabeza, siendo las próximas semanas cruciales para definir cómo se configurará el nuevo gobierno y cómo se implementarán las prometidas transformaciones sociales y económicas.

Seguel Alfredo

07/07/2024 6:18pm

El Nuevo Frente Popular frena el avance de la ultraderecha en Francia

La segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia ha sorprendido a muchos con la coalición de izquierdas, el Nuevo Frente Popular (NFP), emergiendo como la fuerza más votada. Los sondeos han revelado que el NFP podría obtener entre 180 y 215 escaños, consolidándose como la principal fuerza en la Asamblea Nacional y desplazando al partido de extrema derecha, Agrupación Nacional (RN), a la tercera posición con entre 120 y 150 escaños.

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La derrota de la ultraderecha, liderada por Marine Le Pen y Jordan Bardella, ha sido un duro golpe para sus aspiraciones de alcanzar la mayoría absoluta. Bardella, quien había mostrado gran confianza en sus intervenciones públicas, afirmaba estar «listo para asumir las responsabilidades del gobierno». Sin embargo, la realidad electoral no ha favorecido a la RN, y Bardella ha visto cómo sus expectativas se desploman.

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El NFP, por su parte, ha destacado por su propuesta de un «programa político de ruptura» con medidas concretas para los primeros 100 días de gobierno. Manuel Bompard, dirigente insumiso del bloque, ha defendido el aumento del salario mínimo a 1.600 euros netos, destacando que «los franceses han sufrido la mayor caída del poder adquisitivo en 40 años». Además, la coalición propone la derogación de la última reforma de las pensiones y el regreso a la jubilación a los 60 años tras 40 años cotizados.

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El presidente Emmanuel Macron y su alianza centrista han quedado en segundo lugar, con entre 150 y 180 escaños. A pesar de este resultado, la gobernabilidad en la Asamblea Nacional no está asegurada y podría derivar en un bloqueo o en la necesidad de formar una gran coalición entre la izquierda, el partido de Macron y otros grupos.

La reacción de los líderes políticos no se ha hecho esperar. Ione Belarra, secretaria general de Podemos de España, celebró los resultados diciendo que «la democracia ha derrotado al fascismo en Francia» y añadió que «una gran noticia que debe venir acompañada de las transformaciones sociales y económicas que la gente está esperando».

Los futbolistas de la selección francesa también se han pronunciado al respecto. Jules Kounde expresó en redes sociales su alivio: «El alivio está a la altura de la preocupación de las últimas semanas, es inmenso. Felicidades a todos los franceses que se han movilizado para que este hermoso país que es Francia no sea gobernado por la extrema derecha».

El resultado de estas elecciones ha sido un reflejo del rechazo de muchos franceses hacia la extrema derecha. «La Agrupación Nacional sigue siendo un partido extremo, que genera más miedo que confianza y que no logra deshacerse de su imagen nacionalista, racista y poco apto al ejercicio del gobierno y del Estado», comentan analistas políticos.

El NFP ha trabajado arduamente para construir una coalición sólida que incluye partidos, asociaciones, sindicatos y personalidades con el objetivo de frenar el auge de la extrema derecha. «A partir de hoy, trabajaremos en toda Francia para ampliar este encuentro», declararon los partidos firmantes tras conocerse los resultados.

Finalmente, es importante destacar que este resultado supone un cambio significativo en el panorama político francés, alejando la posibilidad de un gobierno de extrema derecha por primera vez en más de ochenta años. El escenario ahora plantea nuevos desafíos y la necesidad de alianzas estratégicas para asegurar una gobernabilidad efectiva en la Asamblea Nacional.