Kate Arrepol, hija de mártir de Carabineros: “Indirectamente la institución mató a estos tres mártires”

Por Felipe Nesbet

En una zona depreciada económicamente, como es la región carbonífera, entrar a Carabineros, o “meterse a paco” como se popularmente, es una importante salida laboral. Ese fue el camino que tomó Egar Arrepol, que a los 17 años ingresó a la institución. Luego le siguió su hermana y otro hermano entró a la Armada.

Destinado a Concepción, una noche de septiembre de 2007, partió rumbo a un procedimiento por un robo, en el trayecto colisionaron con una micro, lo que le causó la muerte, tras largas horas de agonía. El episodio tuvo ribetes aún más trágicos, dado que la hermana del sargento tuvo que recibir el cuerpo de Arrepol. “La pobre se quería morir”, narran las noticias de la época. 

Ese fue el inicio del calvario para la familia Arrepol, que dejó una viuda y un niño de 9 y una de 7. “Los trámites para lograr la pensión fueron super engorrosos. Mi mamá se demoró un año, lo que debió haber sido seis meses. Sobrevivimos con la ayuda de mi abuelo y familiares de mi mamá. Una vez los carabineros, amigos de mi papá, nos llevaron una caja con víveres, porque no teníamos un sustento económico,” recuerda Kate Arrepol, la hija menor del policía fallecido. 

“Todo lo que paso con la muerte de mi papá fue muy turbio. Escondieron evidencias, ocultaron que el auto estaba malo, hicieron mal el sumario y los peritajes lo hicieron los mismos carabineros”.

–¿A qué crees que respondía toda esa manipulación?

Ellos eran los culpables, porque el carro estaba en malas condiciones. Uno de sus compañeros le hizo una revisión técnica por su cuenta, donde aparecían todos los problemas que tenía el vehículo. Uno de los accidentados le contó a mi mamá que las balizas no funcionaban. Taparon todo. Fue una mafia en contra de sus propios carabineros.

Mi mamá tuvo que pagar los gastos fiscales por el accidente. Hasta el ataúd lo tuvo que comprar ella. Le habían dicho que había un convenio, pero no existía: fue un puro negocio. Para mí ellos se aprovecharon del dolor de una viuda. 

Ahora mi mamá está enferma y le están descontando bastante dinero por la Dirección de previsión (Dipreca). Incluso, les pedí que le donarán sangre. pero nadie fue. Lo que si me pidieron que no hiciera nada público.

–¿Ella se ha tratado de reunir con el alto mando?

Cuando murió mi papá estaba el general (Alejandro) Bernales, que fue una persona excelente, quien ofreció ayuda. Mi mamá ha querido hablar con todos los directores que lo siguieron, pidiendo la audiencia por conducto regular, y ninguno le ha dado una cita. La única vez que hablé con alguien del alto mando, fue cuando fui al edificio de Carabineros en Santiago, donde conversé con una capitana y nos dijeron que le pidiéramos cualquier cosa, pero nunca respondieron. 

–Hace poco tuviste una reunión con el general Ricardo Yáñez, director de Carabineros.

Fui a un funeral de uno de los mártires caídos hace poco, para acompañar a la familia, porque sé lo que se sufre. Me acerque a él de forma muy respetuosa, especialmente por la familia. Le dije que era hija de un mártir de Carabineros y le pedí hablar en otro momento, y me derivó con un teniente, que me llevó de la mano, sin dejarme de hablar mucho. Le di mi contactó, me envío un WhatsApp, pero después no tuve otra interacción con ellos. 

-¿Cómo ves la situación actual con tres carabineros muertos en un mes?

Una de las cosas que más me impacto fue la hipocresía del alto mando, sobre todo del general director de llorar en televisión. Para mí eso es una total mentira. Pienso que esas familias van a quedar igual que nosotros. No quiero que esos niños se sientan abandonados y sufran lo que yo sufrí y lo que vivió mi hermano, que hasta el día de hoy tiene secuelas al hablar de mi papá. 

–Eso te llevó a hacer pública tu crítica en las redes sociales.

Mi vídeo ha tenido 60 mil reproducciones. Estoy segura que lo han visto, porque están pendientes de mis redes sociales. Cuando tenía mi Instagram abierto la cuenta de Carabineros de Chile veía mis historias. Obviamente, le interesaba mucho lo que habláramos, porque no quería que dejáramos más mal a la institución de lo que está. 

-Con las muertes del último tiempo, ¿crees que el alto mando tiene responsabilidad en no proteger debidamente a su personal?. 

Obviamente, siento que indirectamente a estos mártires los mató la institución. Hay que darles las facilidades y los resguardos a los carabineros para que hagan su trabajo. También educarlos para que puedan protegerse a si mismos.

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