Chile y la conmemoración del Día de la Dignidad Nacional: a 54 años de la nacionalización del cobre
Chile conmemoró este 11 de julio los 54 años de la nacionalización del cobre, un hito que transformó la historia económica y política del país. En 1971, el Congreso aprobó por unanimidad la Ley N° 17.450, impulsada por el presidente Salvador Allende, declarando el mineral «propiedad absoluta, exclusiva, inalienable e imprescriptible del Estado».
Ver también / Nacionalización del Cobre durante la unidad popular según la UTE (video subido por AtilaSede)
Como destacó Allende en Rancagua ante miles de trabajadores: «Chile va a nacionalizar el cobre en virtud de un acto soberano». La escena, con cascos y puños en alto, quedó grabada como símbolo de esperanza colectiva.
La Coordinadora de Trabajadores de la Minería (CTMIN) resaltó este viernes el legado y significado de esta fecha: «Día de la Dignidad Nacional». En un comunicado, recordaron que la medida fue fruto de «décadas de lucha social» contra el control extranjero, principalmente estadounidense, que relegaba a Chile a un rol dependiente. «Este acto soberano marcó un antes y un después en la historia de la clase trabajadora», subrayó la CTMIN, citando las palabras de Allende y respaldando el derecho reconocido por la ONU sobre los recursos naturales.
Pese a su trascendencia, la CTMIN denunció que la voluntad soberana fue «vulnerada y ultrajada» tras la dictadura y gobiernos posteriores. La ley de 1971, única en Latinoamérica por su carácter irrevocable, fue desmantelada con políticas que privatizaron parcialmente la industria. Sin embargo, la coordinadora —que agrupa a siete federaciones mineras— reafirmó su compromiso con el legado de 1971: «Cada tonelada de cobre producida honra a quienes lucharon por una minería al servicio del desarrollo social».
El contexto actual revitaliza el debate. Frente a la explotación de recursos como el litio, la CTMIN insistió en que «el espíritu de la nacionalización sigue vigente». Para la organización, defender la soberanía minera es garantizar «trabajo digno, desarrollo sustentable y capacidad de decidir nuestro futuro». El llamado coincide con el creciente cuestionamiento al modelo extractivista y la demanda por mayor participación estatal.
La conmemoración no solo evoca el pasado, sino que proyecta desafíos. Como señaló la CTMIN, el cobre fue la «viga maestra» de la economía chilena en el siglo XX, y su control soberano permitió financiar reformas sociales. Hoy, la coordinadora señala: “Hoy, cuando se abren nuevos debates sobre el rol del litio, el agua, y otros recursos estratégicos, reafirmamos desde CTMIN que el espíritu de la nacionalización sigue vigente. Defender la soberanía sobre nuestras riquezas es defender el trabajo digno, el desarrollo sustentable y la capacidad de Chile para decidir su futuro”.
A 54 años de aquel 11 de julio, la nacionalización del cobre sigue siendo un faro para las luchas contemporáneas. La CTMIN cerró su mensaje con un llamado a «honrar la historia» y construir un futuro donde los recursos naturales sean «motor de dignidad» para el pueblo chileno.