Partido Republicano se baja de la mesa negociadora para un nuevo proceso constituyente

El Partido Republicano informó su salida de la mesa de diálogo para el inicio de un nuevo proceso constituyente, la cual es encabezada por el presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Soto (PPD), y por el presidente del Senado, Álvaro Elizalde (PS)

La colectividad de ultra derecha apuntó a que las negociaciones avanzarían hacia la elección de una nueva Convención Constitucional que redacte una propuesta de nueva Constitución, con lo cual no están de acuerdo.

Ruth Hurtado, vicepresidenta del partido, señaló que “todas las fuerzas políticas apuntan a que se conforme una nueva Convención, mecanismo fracasado que no dio resultado“.

Según Hurtado, el debate debe ser desarrollado en el Congreso, por ser un órgano que tiene las facultades para hacerlo.

«Creemos que el Congreso no debe entregar la responsabilidad que les cabe respecto a hacer los cambios necesarios por las personas que tanto lo necesitan”, aseveró.

Del mismo modo, añadió que “llegamos a la convicción de que el Partido Republicano no siga participando, porque no hay espacio para abrirse a que esta discusión se radique en el Congreso y sea éste el órgano para resolver este momento constitucional.
Además, sentimos que una nueva Convención lo único que hace es seguir
dilatando las urgencias”.

La ex constituyente de extrema derecha planteó además que no tienen complicaciones con que la decisión tomada implique un posible aislamiento político de los republicanos.

La jornada de conversaciones de este jueves estuvo marcada por la creación de
una “mesa coordinadora paralela” por el tema constitucional, la que estuvo conformada por el Partido Republicano, el Partido de la Gente (PDG), Amarillos e independientes, además de los senadores de la DC Ximena Rincón y Matías Walker.