Chile, potencia salmonera con altos estándares de muerte: 83 trabajadores fallecidos en 12 Años, revela Ecoceanos
Un reciente accidente en Hualaihué, donde el buzo Jaime Ampuero Díaz resultó gravemente herido al ser arrastrado por la hélice de una embarcación salmonera, ha vuelto a encender las alarmas sobre las precarias condiciones laborales en la industria, según denuncia el Centro Ecoceanos en una columna publicada en el medio Interferencia.
De acuerdo con el reporte de Ecoceanos, la industria salmonera chilena posee la mayor tasa de mortalidad laboral del sector a nivel global. Su director, Juan Carlos Cárdenas, revela que “entre marzo de 2013 y julio de 2025 han muerto 83 trabajadores y trabajadoras” en diversos incidentes, una cifra que califica como “impresentable” para la segunda actividad económica más importante del país.
La columna, parte del informe “Salmones de Sangre”, expone la cruda paradoja de un gigante exportador. Aunque Chile es el segundo productor mundial, con envíos por US$6.371 millones en 2024, Cárdenas sostiene que “detrás de estas cifras récord se esconde una cruda realidad laboral”, con un 40% de trabajadores subcontratados, jornadas extensas y salarios bajos, muy lejos de los estándares de países competidores.
Solo este año, la expansión productiva en la Patagonia viene acompañada de la muerte de tres buzos, cuyos casos son detallados en el reporte. Ecoceanos alerta que esta situación persiste debido a la “permisividad institucional” y a la utilización de buzos artesanales, cuya licencia solo permite operar hasta 12 metros, para trabajos a mayor profundidad sin la seguridad adecuada.
El médico veterinario Juan Carlos Cárdenas concluye que, mientras las empresas multiplican ganancias, se sigue negando “lo más básico: el derecho a la vida”. Frente a la débil fiscalización estatal denunciada, Ecoceanos invita a leer la columna completa en Interferencia para comprender la magnitud de esta crisis humanitaria.


