Desde los años 90, la artista visual chilena Consuelo Lewin ha venido desarrollando diferentes propuestas basadas en el lenguaje abstracto tras licenciarse con mención en Pintura en la Universidad Católica.
Su trabajo ha puesto el foco en la paleta de colores y otras diversas aproximaciones no figurativas, pero cuya distancia de una intención mimética no ha implicado alejarse de los referentes contextuales, de la realidad en sí.

Para su próxima muestra “Penumbra azul”, la creadora se dedicó – de hecho – a estudiar acuciosamente el curso de algunos ríos y sus afluentes, desde su nacimiento hasta su desembocadura.
Lewin centró su atención en etapas del curso natural del río Baker, en la Región de Aysén. Diseñó estos recorridos para reproducirlos a menor escala en óleo sobre papel, conformando un fragmento específico que representa poéticamente el comportamiento líquido en su avance hacia el Océano Pacífico.

A través de este acercamiento hidrológico, y tal como confluyen los pequeños arroyos en los grandes ríos, la artista hace confluir la condición de estas corrientes con los materiales y la ejecución pictórica. El papel, en su natural delicadeza simboliza la fragilidad del dominio fluvial en Chile y el mundo, producto de la crisis ambiental.
Con la curaduría de la historiadora del arte Daniela Berger, la exposición abre posibles cuestionamientos en torno a las nociones de paisaje y territorio. Examina las huellas producidas por las variaciones de dirección en algunos cauces, las disminuciones del caudal, surcos y grietas que exponen la mutabilidad y la constante probabilidad de desaparición. Así, se establece una sublimación de lo cambiante, proponiendo estéticamente hacer tangible lo intangible.

“Penumbra azul” es una continuidad y profundización de la participación en “Otros verdes”, muestra colectiva en el Centro de Promoción de la Salud y la Cultura de Quillota, donde Lewin rescató un fragmento de la mitología del río Aconcagua en torno a tesoros perdidos, recreando un torrente de color dorado como metáfora de un bien natural, que tan a menudo nos olvidamos de cuidar y atesorar.
La exposición será inaugurada el 14 de junio en la Galería Calimaco – dirigida por el gestor y coleccionista Carlos Núñez – ubicada en el Barrio Yungay de Santiago (Cueto 370). La muestra estará abierta hasta el 19 de julio.
Por Elisa Cárdenas.