Chile: Mientras avanza el negacionismo en la Derecha, jueces continúan diligencias en casos de asesinados y desaparecidos por la Dictadura
Mientras en Chile han ido adquiriendo cada vez más protagonismo algunas voces que niegan las terribles violaciones a los Derechos Humanos cometidas por la dictadura de Pinochet, los ministros en visita del Poder Judicial han continuado su incansable tarea de saber qué pasó con los miles de chilenos asesinados y desaparecidos entre 1973 y 1990.
Uno de ellos es Álvaro Mesa Latorre (en la foto), ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los Derechos Humanos de las jurisdicciones Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, y quien esta semana se constituyó en el tribunal de alzada de Valdivia para tomar declaraciones a testigos en dos causas que sustancia por homicidios.
Se trata de ilícitos perpetrados en dicha ciudad, entre septiembre y octubre de 1973.
Primeramente, el ministro Mesa realizó diligencias (causa rol 10-2011) por el homicidio de Francisco Lincopán Calfulaf (41 años), obrero maderero, militante del Partido Comunista que, de acuerdo al informe Rettig, habría sido detenido por militares poco después del 11 de septiembre de 1973 en su domicilio, en la población Teniente Merino de Valdivia, donde se encontraba convaleciente por una enfermedad hepática.
Tras pasar varios días incomunicado en un lugar desconocido fue trasladado a un recinto penal, lugar donde fue continuamente llevado a interrogatorios y sometido a golpes y torturas, y no se le prestó atención médica ni se le suministraron los medicamentos prescritos por su condición.
Al empeorar su estado de salud, los otros detenidos debieron presionar para que lo llevaran de urgencia al Hospital Kennedy de Valdivia, donde falleció el 9 de octubre de 1973.
Seguidamente, el ministro tomó declaraciones a testigos en el proceso (causa rol 22-2011) por el homicidio de Víctor Sebastián Gómez Monsalve, de solo 17 años de edad, detenido en su casa por efectivos militares la madrugada del 19 de octubre de 1973.
Sus restos fueron encontrados por familiares en el Instituto Médico Legal. En este caso, el certificado de defunción consigna que su muerte se registró el 25 de octubre de 1973, debido a una herida de bala torácica transfixiante.
Avanza el negacionismo, avanzan las diligencias
En el caso particular de Chile, llama la atención que el avance y normalización de discursos de odio que niegan o ponen en duda las violaciones a los Derechos Humanos cometidas en Chile entre 1973 y 1990, ocurra al tiempo que van saliendo casi semanalmente los fallos de los distintos ministros del Poder Judicial que investigan los crímenes, y que ante ello, no exista en la prensa el rigor necesario para confrontar el falso relato enarbolado, por ejemplo, por José Kast y su bancada de diputados.
Así, en la víspera de los 50 años del sangriento Golpe de Estado contra el Gobierno de la Unidad Popular, mientras siguen apareciendo todas las semanas notas de prensa del Poder Judicial con sentencias contra militares, carabineros y civiles por torturas, ejecuciones y desapariciones, tenemos en el Congreso a parlamentarios que siguen cuestionando estos hechos, sin ninguna consecuencia.
¿Es realmente democrático un sistema donde algunos representantes de la ciudadanía relativizan o niegan crímenes ratificados por resoluciones judiciales y por dos informes de Estado (Rettig y Valech)?
Y otra: ¿No será peligroso quedarse sin hacer nada frente a personajes que niegan la verdad histórica al tiempo que justifican el terrorismo de Estado contra la población?
Hay que recordar que todas las notas de prensa a las que hacemos mención son publicadas en la página web del Poder Judicial, y cualquier persona puede acceder a ella y a sus correspondientes documentos judiciales (visita la página aquí).
Como muestra, dejamos algunas de las informaciones del portal que fueron consignadas por El Ciudadano, durante este segundo semestre año 2022. Una pequeña muestra del horror que quieren negar:
AOM
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