Comunidad de Tomé en alerta por posible privatización del hospital comunal

Preocupación ha causado en las y los usuarios del hospital comunal de Tomé la posible concesión de dicho establecimiento público de salud. Esto, porque hace aproximadamente tres meses, se realizó una consulta ampliada a la comunidad por parte de representantes del recinto, en la que se les ofreció un hospital completamente nuevo en un periodo de 4 años.

El ofrecimiento causó distintas reticencias debido, principalmente, al tiempo que tardaría en estar operativo este nuevo hospital y a la inclusión de empresas privadas en el proyecto.

El dirigente de la Fenats del Hospital de Tomé, Jonathan Aguilera, explicó a Resumen que esta decisión se habría tomado «entre cuatro paredes», ocultando información y “disfrazando bajo el concepto de asociación público-privado, lo que será la privatización de la salud en Tomé. Ellos le cambiaron el nombre, para hacerlo más atractivo para la gente, pero la ley de concesiones es una”, indicó.

Aguilera enfatiza que este nuevo concepto estaría dirigido netamente a proyectos ligados al área de la salud, es decir, viene a reemplazar el de concesión debido a las paupérrimas experiencias de proyectos concesionados a empresas privadas, como lo son las carreteras, los puentes y las cárceles.

Desde la Fenats del Hospital de Tomé también expresaron su rechazo a la iniciativa debido a las repercusiones que tendría en la comunidad la construcción de un nuevo hospital, bajo las normativas de un contrato privado.

“El hospital lo quieren sacar de acá, ya no será céntrico, va a estar en un cerro, en una comuna donde hay mucho adulto mayor, donde la gente viene del campo y tendrá que pagar doble locomoción”, agrega Aguilera.

A esto se agrega la necesidad de especialistas: “No queremos salir a otras comunas y este supuesto proyecto tampoco asegura esta dotación de médicos. En hospitales como el de Antofagasta, que es concesionado y muy bonito, la gente tiene que pagar por todo, hasta por el estacionamiento” afirma Aguilera.

En ese sentido, el plazo de concesión del hospital sería, según el dirigente de la Fenats, de 15 años, tiempo y dinero con lo que “fácilmente podríamos tener un hospital de alta complejidad si el Estado se hiciera cargo de la salud de nuestra comuna”.

“Nosotros, como comunidad, sí queremos un hospital nuevo, porque lo necesitamos, pero debe seguir siendo público y también con atención oportuna y de calidad. Nosotros sabemos cómo funciona este gobierno de Piñera, con concesiones y el empresariado va a tener un rol muy importante en todo esto”, sostiene el dirigente de los trabajadores de la salud.

Con respecto a las repercusiones en las y los trabajadores del hospital que no son titulares del establecimiento de salud, Jonathan Aguilera comentó que “hay muchos tipos de contratos, a compra de servicios, a contrata, a honorarios y ¿qué va a pasar con ellos? Van a quedar a la deriva, como pasa en los hospitales concesionados. Ellos hacen y deshacen con las y los trabajadores”.

Finalmente, consultado por las respuestas de las autoridades regionales y de salud, Aguilera expresó que “hace poco conversamos brevemente con el ministro de Salud, porque vino a inaugurar un Cesfam en Dichato, y nos recibió brevemente. Nos dijo que el nuevo hospital iba a ser público-privado y que formará parte de un paquete de hospitales, para hacerlo más atractivo a las empresas que busquen la concesión. Con respecto al alcalde, él dice que quiere que sea público, pero lo que le importa es dejar un hospital nuevo en su mandato, para utilizarlo en una posible reelección, pero cómo conseguirlo, no le importa”.

Fuente: Resumen