El recorrido de la Romería comenzó a las 10:00 de la mañana en la estación de Metro Los Héroes, recorriendo la Alameda, para luego avanzar por las calles Morandé y Agustinas, en las inmediaciones del Palacio de La Moneda, continuando por San Antonio y Avenida Recoleta, hasta culminar en el memorial a la víctimas de violaciones a los DD.HH. en el Cementerio General. Durante todo el trayecto, los asistentes mantuvieron un ambiente de respeto y memoria, recordando a las miles de personas que fueron víctimas de la dictadura civil – militar y reafirmando su compromiso con la defensa de los derechos humanos.
Participación del Partido Comunista y ambiente de unidad
El Partido Comunista, que ha estado históricamente vinculado a la defensa de los derechos humanos y a la memoria histórica del país, jugó un papel crucial en la concurrencia de su militancia a la romería. Hicieron un llamado a la paz, a la reflexión y a la necesidad de seguir construyendo un Chile más justo, lo que fue ampliamente respaldado por los asistentes de todas las edades.
La jornada estuvo marcada por la unidad entre las diversas agrupaciones presentes, quienes destacaron la importancia de este evento para mantener viva la memoria de aquellos que sufrieron las trágicas consecuencias de la dictadura. Además, se resaltó el carácter pacífico de la manifestación, en contraste con quienes promueven la violencia o la represión.
Clausura en el Cementerio General
El evento culminó con una emotiva actividad en el memorial del Cementerio General, donde se rindió homenaje a las víctimas de la dictadura. Discursos de los liderazgos de las organizaciones de derechos humanos convocantes, hicieron hincapié en la necesidad de seguir luchando por un país donde prevalezcan los derechos humanos y la justicia social, evitando el negacionismo, la impunidad y asegurando la garantía de no repetición.
La Romería de este domingo no sólo cumplió su propósito de recordar un capítulo doloroso de la historia del país, sino que también se destacó como un ejemplo de participación ciudadana y compromiso con la memoria histórica, destacando el rol del Partido Comunista y de sus Juventudes como uno de los principales defensores de estas causas, junto a decenas de organizaciones y miles de personas de las más diversas expresiones sociales y políticas.