Insultos y apaleo

Denuncian nuevas golpizas homofóbicas y transfóbicas en cárcel del Biobío

Afectada trans habría sido golpeada con un palo y luego lanzada al suelo, recibiendo patadas por parte de al menos un funcionario de Gendarmería, según acusa el Movilh. La organización sostiene que dicha institución "es en extremo peligrosa para los derechos humanos de las personas LGBTI".

Por Daniel Labbé Yáñez

09/01/2018

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Nuevos abusos en razón de la orientación sexual e identidad de género que habrían sido propinados por gendarmes denunciaron personas privadas de libertad, esta vez del Centro de Cumplimiento Penitenciario del Biobío, según informó este martes el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).

De acuerdo a la acusación, los últimos atropellos afectaron a la interna trans Vicky Rosas Mendéz y a Cristofer Fidel Carrasco Gálvez, en represalia por denuncias previas contra abusos homo/transfóbicos que fueron confirmados por tribunales.

“Los hechos ocurrieron en el Centro de Cumplimiento Penitenciario del Biobío, donde  los/as internos/as fueron tratados/as de ‘caballos’, ‘culiaos sidosos’, ‘perras’ y ‘maricones’ (sic). Además, Vicky fue golpeada con un palo y luego lanzada al suelo, recibiendo patadas por parte de al menos un funcionario de Gendarmería, mientras otros eran testigos pasivos de los abusos”, indicó el presidente del Movilh-Biobío, Esteban Guzmán.

Vicky Rosas

Los responsables de estos atropellos serían un sub-oficial identificado como Jorge González Roa y los capitanes de apellidos Mosalve y Valenzuela, quienes al presenciar los abusos nada habrían hecho para detenerlos.

«Gendarmería es en extremo peligrosa para los derechos humanos del LGBTI»

El Movilh destaca que solo en 2017 se conoció de 13 casos de discriminación y torturas contra internos e internas LGBTI en  diversos penales del país, “todos los cuales fueron confirmados por tribunales», añade la organización. «Hubo un total de cinco fallos, dos de la Corte Suprema, que dieron la razón a los internos. Esto se suma a otros tres fallos del 2016”, detalló el Movimiento.

“Contra todo lo deseable, los abusos han continuado, lo cual refleja que Gendarmería es una institución en extremo peligrosa para los derechos humanos de las personas LGBTI”, añadió Esteban Guzmán.

En ese sentido, el Movilh envió este lunes una carta al director nacional de la institución, Jaime Rojas Flores, expresando su repudio por lo ocurrido y exigiendo medidas inmediatas.

En paralelo, se solicitó al director del Instituto Nacional de Derechos (INDH), Branislav Marelic, que encomiende a sus representantes en Biobío la intervención de la entidad para sancionar y prevenir nuevos abusos.

Branislav Marelic

“Recibimos una rápida respuesta del señor Marelic, quien al instante designó a la abogada de la Unidad Jurídica Nacional, Marlenne Velásquez, para hacerse cargo de la denuncia y dar respuestas a las víctimas. Valoramos profundamente ello”, dijo Guzmán.

Algo distinto a lo ocurrido con Gendarmería, entidad que -sostiene el Movilh- «ni siquiera acusa recibo de las denuncias, lo cual incrementa la gravedad de los permanentes daños causados por esta institución”.

El Ciudadano / Fuente: Movilh

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