Hacia una región planificada, integrada y sostenible: Un imperativo ético para la nueva gobernación regional

Por Rodrigo Mundaca, candidato a Gobernador Regional por Valparaíso, y Debora Vega-Valdés, Geógrafa.

Considerando los lamentables y preocupantes eventos de incendios forestales que se vivieron en los sectores interurbanos del área metropolitana del gran Valparaíso desde mediados de Enero, es necesario plantear una reflexión sobre la planificación y gestión territorial. En nuestra concepción de región, la región que queremos construir, no se puede dejar al libre albedrío el ordenamiento territorial, y menos aún la gestión de riesgos. Estos aspectos son parte de la región planificada, integrada y sostenible que en nuestra propuesta apostamos como pilar para el bienestar integral de todos.

El destructivo incendio se inició en la Reserva Nacional del Lago Peñuelas, declarándose alerta roja en las comunas de Valparaíso y Quilpué, sumado a la evacuación de alrededor de 7.000 personas de los sectores Las Rozas, Colinas de Oro, Los Pinos y Teniente Serrano por estar cercanos a los incendios, siniestro que afectó a más de 2000 hectáreas y 7 viviendas. Paralelamente, en la misma fecha fuimos testigos nuevamente de incendios de infraestructura residencial dentro de la ciudad de Valparaíso, específicamente, en el cerro Toro, donde se vieron afectadas alrededor de 6 viviendas.

Ciertamente este fenómeno azota cada cierto tiempo nuestros territorios, recapitulando en nuestra memoria colectiva la cantidad de desastres a partir de múltiples incendios con mayor o menor intensidad, con frecuencia anual, sabemos que estos eventos se repiten año tras año.

La región y particularmente los sectores del interurbano de la zona metropolitana del gran Valparaíso, son susceptibles a la ocurrencia de estos siniestros. Vivimos en una sociedad del riesgo latente, en donde tenemos que comprender que las probabilidades de ocurrencia en su mayoría son causadas por las malas prácticas de nuestra sociedad, por los sospechosos intereses inescrupulosos y/o una omisión e ignorancia en múltiples niveles, cuya consecuencia son, finalmente, los incendios forestales.

Cabe preguntarnos: ¿Qué tanto se ha hecho para conservar y proteger la Reserva de la Biosfera La Campana-Peñuelas RBCP? ¿Contamos con las herramientas suficientes para hacer frente a estos desastres ecológicos, ambientales sociales y económicos? ¿Qué tan preparada está nuestra población frente a los diversos riesgos a los que estamos expuestos? ¿Hemos construido una cultura preventiva y de gestión de riesgo de desastre a la altura de las complejas relaciones entre la sociedad y nuestro entorno?

Por esto pensamos que es imperativo desarrollar múltiples estrategias, desde lo comunitario hasta lo institucional, ampliar la mirada política sobre la necesidad de profundizar las políticas públicas de nuestra región de manera articulada entre diversos territorios, intersectorial y comunitariamente. Queremos apalancar una planificación integral de los territorios, sus necesidades y vocaciones o podemos seguir omitiendo la necesidad de un sistema de gestión de riesgos de desastres multiescalar; promover estudios de paisaje y manejo de cuencas integradas, democrática, participativa y efectiva, desde una perspectiva vinculante a los Instrumentos de Planificación Territorial y Estrategias de Desarrollo Regional y Comunal, que se enmarquen en un política y ley nacional de ordenamiento territorial.

Necesitamos dar pasos agigantados en esta materia o estaremos a la deriva de la secuencia acumulativa de desastres por incendios, inundaciones, derrames de sustancias peligrosas, desprendimiento de infraestructura, desplazamientos de tierra, entre otros muchos eventos que atentan con la seguridad y el buen vivir de las y los habitantes de nuestra región.

Como movimiento social y político, como ciudadanos y como candidatura para las elecciones de Gobernador Regional, esta situación no puede quedar rezagada. Nos urge ir en busca de soluciones y propuestas, así como trabajar por hacer de nuestra región planificada, integrada y sostenible. Esta será, sin duda, una de nuestras principales prioridades.