Grave crisis en el recinto impide garantizar una atención de calidad a sus pacientes

Hospital San Borja en caída libre: Médicos y funcionarios movilizados exigen al Minsal el cumplimiento de su petitorio

Tanto los facultativos como el personal administrativo llaman al Gobierno a solucionar sus demandas en torno a reforzar el área de maternidad del recinto y la falta de recursos e insumos que afecta a todos los departamentos del recinto hospitalario.

Por Absalón Opazo

26/01/2019

Publicado en

Chile / Portada / Salud

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Hasta el Ministerio de Salud llegaron los trabajadores movilizados del Hospital Clínico San Borja Arriarán, para exigir que la mesa de trabajo con las autoridades apruebe su petitorio para así acabar con la crisis que afecta a este recinto hospitalario.

Recordemos que tanto los médicos como el personal administrativo exigen al Gobierno que solucione las demandas en torno a reforzar el área de maternidad del recinto y la falta de recursos e insumos que afecta a todos los departamentos del hospital.

Al respecto, la presidenta del capítulo médico del Hospital, Mónica Campos, explicó que «hicimos un petitorio de años que no ha sido resuelto. Nos da la impresión de que nuestro Hospital va en caída libre, por lo que ahora hicimos un hiper petitorio de lo más urgente, por ejemplo, ir sacando adelante las listas de espera».

Desde el Servicio de Salud Central señalaron que, según lo acordado, este viernes deberían entregar respuesta a los trabajadores. Por su parte, desde el Colegio Médico Regional indicaron que «las respuestas anteriores del Ministerio (de Salud) han sido insuficientes y piensan implementarlas recién en 2021».

Graves y urgentes problemas

Hace algunas semanas que el equipo médico y los funcionarios del Hospital Clínico San Borja Arriarán (HCSBA), en la comuna de Santiago, vienen denunciando que la grave crisis que afecta al recinto impide garantizar una atención de calidad a sus pacientes.

La movilización tiene lugar luego de que un grupo de mujeres se querellara en contra del recinto por cuasidelito de homicidio y lesiones graves, hechos ocurridos a inicios de este año, cuando tres pacientes de nacionalidad venezolana denunciaron ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago varias malas prácticas en los partos de sus hijos, lo que, según acusan, provocó la muerte de uno de ellos y que otros nacieran con problemas neurológicos.

Las mujeres afirman que los bebés fueron afectados por sufrimiento fetal en el trabajo de parto mientras ellas fueron víctimas de violencia física y maltrato con groserías. En uno de los casos, un niño que hoy tiene 10 meses sufrió una asfixia neonatal, una insuficiencia respiratoria y aspiración de meconio.

Su madre, Carolina Delgado, relató que su hijo «estaba listo para nacer, pero como aún no había bajado ellos me dejaron igual con el niño con meconio y él se asfixió a tal punto que lo tuvieron que reanimar cuando salió».

Tras este hecho, el lactante «estuvo tres semanas en terapia intensiva, dos en terapia intermedia y quedó con esta lesión, que no sabemos qué tanto le va a afectar y por eso tiene indefinidamente controles neurológicos y kinésicos».

«Lamentablemente», dijo la madre, «acá hay un hueco muy grande porque las matronas y los médicos no están haciendo su trabajo el tiempo que deberían, y si ellos no están aptos o no son suficientes para un centro asistencial, deberían pedir apoyo», subrayando que esto «nos tiene sumamente preocupados, no solamente porque nos pasa a los extranjeros, sino porque también le pasa a las chilenas».

La investigación por estos casos quedó en manos de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte. En esa línea, pasada una semana de presentadas las querellas, se realizó una asamblea entre los médicos y los funcionarios del Hospital Clínico San Borja Arriarán para discutir en torno a la falta de insumos, monitores y camas en distintas áreas del recinto.

Los funcionarios denuncian, a modo de ejemplo, que en el Servicio de Urgencia de Maternidad, la insuficiencia de los equipos llega a tal punto que, en vez de contar con los 10 monitores que se requieren como mínimo, sólo hay dos. Asimismo, acusan que las falencias los ha llevado a atender a pacientes, incluso, con insumos que no corresponden o a atrasar procesos.

La presidenta del Consejo Regional Santiago del Colegio Médico, Natalia Henríquez, dijo que como organismo lamentan «profundamente» los hechos ocurridos en la maternidad del San Borja Arriarán, pero que están «aún más preocupados ante la posibilidad de que una situación similar vuelva a ocurrir, dada la carencia de recursos y la falta de personal médico que afecta al hospital y que hace imposible asegurar la atención de calidad».

«La precariedad con que funciona el Hospital San Borja se ha presentando a las autoridades del Ministerio de Salud en múltiples ocasiones sin que haya existido una respuesta favorable, obligando a los colegas a dar una atención dentro de lo que se puede y no lo que se debe», enfatizó la representante del Colegio Médico.

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