En duda los “tiempos mejores”

Las dudas por el arribo del hijo de Longueira como asesor a Desarrollo Social: “Es un señal absolutamente empresarial”

Para Diego Ancalao, la llegada de Juan Pablo Longueira como asesor de Alfredo Moreno constituye “una muy mala señal del próximo gobierno hacia la ciudadanía”. Por Felipe Menares Velásquez

Por Felipe Menares

23/02/2018

Publicado en

Chile / Política / Portada / Pueblos

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“Profesional con capacidad de adaptarse, resolver problemas y trabajar bajo presión en diferentes situaciones, dirigir proyectos, formando y liderando equipos de trabajo multidisciplinarios. Interés en el desarrollo de una buena relación con todos los stakeholders que aportan valor a la empresa desde una visión integral, considerando el desarrollo de colaboradores, la creación y trabajo de redes de contactos, RSE, comunicación estratégica, negociación y gestión de crisis”.

La descripción anterior corresponde al perfil alojado en Linkedin de Juan Pablo Longueira Brinkmann, hijo mayor del emblemático político que militó en la UDI y reciente adquisición de Alfredo Moreno como asesor para el Ministerio de Desarrollo Social, cartera que el ex canciller encabezará a partir del próximo 11 de marzo.

Esta secretaría de Estado es la encargada de la formulación de políticas públicas relacionadas con la discapacidad, vejez, juventud y los pueblos indígenas, entre otras materias. De hecho, el primogénito de Pablo Longueira Montes acompañó a Moreno en un viaje a La Araucanía, instancia en la que pudo participar de reuniones con los gremios de la zona y la Corporación de Profesionales Mapuches, según consigna La Tercera.

Alfredo Moreno junto a Sebastián Piñera

Longueira Brinkmann es abogado de la Universidad de Los Andes y MBA de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Dentro de su currículum destaca su participación, entre 2008 y 2012, como abogado en Antofagasta Minerals, grupo minero controlado por la familia Luksic.

Su participación en Desarrollo Social será su primera incursión formal en el sector público. En 2013 descartó ser candidato para las elecciones parlamentarias, aun cuando el presidente de la UDI de ese entonces, Patricio Melero, le había ofrecido competir por un cupo en la Cámara de Diputados.

Sin duda, el nombre de su padre genera un sinnúmero de especulaciones y reservas sobre su designación, particularmente, por la resistida “Ley Longueira” (sobre pesca) y por las revelaciones relacionadas con el financiamiento que recibió el otrora coronel de la UDI por parte de SQM.

Reacciones desde el mundo mapuche

En conversación con El Ciudadano, Diego Ancalao, presidente de la Fundación Instituto de Desarrollo y Liderazgo Indígena, manifiesta sus reparos sobre la llegada de Longueira Brinkmann al Ministerio de Desarrollo Social. A su juicio, “poner al hijo de Longueira como asesor de Moreno es un señal absolutamente empresarial y que buscaría flexibilizar todos los procesos de consulta en favor de los empresarios”. Esto porque la cartera es la entidad encargada de aplicar los procesos de consulta indígena, siguiendo el Convenio 169 de la OIT.

Diego Ancalao

Para el dirigente, quien además fue candidato a senador en las últimas elecciones parlamentarias, el nombramiento de Longueira hijo es “una muy mala señal del próximo gobierno hacia la ciudadanía”.

“Especialmente, por los cuestionamientos éticos por el caso de la ‘Ley Longueira’. Claramente, se hizo una ley que beneficiaba a grupos de empresarios, perjudicando la extracción marítima de sobrevivencia de los pequeños caleteros, además del bloqueo que esto ha significado para la llamada Ley Lafkenche”, sostiene.

En este sentido, Ancalao argumenta que “la ‘Ley Longueira’ permite la sobreexplotación de los recursos marinos y para aplicar la Ley Lafkenche, se necesita que se aprueben las solicitudes de las comunidades para que se les pueda entregar la concesión a los dueños originarios, que son los lafkenche en la zona mapuche, pero también los pueblos originarios del norte y del extremo sur. En este caso, se contrapone una ley que beneficia a 10 familias y contra de miles de pequeños productores y recolectores”.

Para el encargado de relaciones internacionales del Consejo de Todas las Tierras, Aucan Huilcaman, “hay una buena base para dialogar” con las autoridades entrantes, más allá de los nombres que integrarán Desarrollo Social a contar del 11 de marzo.

Aucan Huilcaman

“El Ministerio de Desarrollo Social tiene mucha competencia con la cuestión que pasa en la Araucanía y creo que el equipo del ministro, entre ellos el hijo de Pablo Longueira, debe tomar en consideración la recomendación que ha hecho la comunidad internacional sobre la situación del pueblo Mapuche y su relación institucional con el Estado. Esa es una buena base y me gustaría que el ministro y su equipo la tomaran”, afirma el dirigente en diálogo con El Ciudadano.

Respecto del perfil empresarial del futuro ministro y de su asesor, además de la señal que aquello podría entregar sobre el carácter de las políticas públicas en territorio mapuche, el dirigente del Consejo de Todas las Tierras es enfático en señalar que “sería inaceptable que se siguiera imponiendo una domesticación y colonialismo con los mapuche”.

En este sentido, Aucan Huilcaman puso en relieve la necesidad de «saber la verdad de lo que sucedió en la Araucanía, en lo posible instalar una comisión de verdad para encaminarnos hacia un entendimiento. De esa comisión se pueden trazar lineas, pero mientras no se sepa la verdad, sin duda cada actor tendrá su propia versión, que en algunos casos, se trata de versiones antojadizas y deliberadas, alejadas de lo que fue la historia que determina el presente”.

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