La ciencia de los hongos mágicos: científicos miden la «experiencia mística»

Desde que el LSD fue sintetizado por primera vez en los años 30, los psicoterapeutas se han interesado en el uso de drogas alucinógenas para tratar una serie de trastornos mentales

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Desde que el LSD fue sintetizado por primera vez en los años 30, los psicoterapeutas se han interesado en el uso de drogas alucinógenas para tratar una serie de trastornos mentales. Sin embargo, estos intentos no han encontrado un apoyo general de la comunidad médica, puesto que los llamados viajes visionarios son muy particulares y difíciles de analizar. Aun así, un grupo de investigadores cree que ha encontrado una forma científica de estudiar las »experiencias místicas» provocadas por los hongos que contienen psilocibina, pudiendo abrir una puerta hacia su uso en terapia psicológica.

En su publicación en el Journal of Psychopharmacology, el equipo define la »experiencia mística» usando cuatro características centrales. Éstas incluyen el »sentido de misticismo», que expresa una sensación de sacralidad o unidad con todas las cosas; el »humor positivo»; la »trascendencia del espacio y el tiempo» y la »inefabilidad» o sentimiento de que la experiencia va más allá de las palabras.

El grupo de psiquiatras y neurocientíficos, de la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins, ha desarrollado un cuestionario de experiencia mística que consta de 30 ítems (MEQ30), que apunta a estos cuatro elementos mencionados y que puede ser usado para tener una medición general en la descripción la intensidad de la experiencia mística. Colectaron y analizaron los datos de 184 participantes que consumieron dosis de psilocibina de moderadas a altas, en cinco laboratorios. Luego se les pidió que describieran sus experiencias. Por ejemplo, para determinar su nivel de »misticismo», les preguntaron qué tan conectados se sintieron de una »realidad mayor».

Los autores del estudio afirman que las mediciones obtenidas del test MEQ30, se pueden usar para predecir acuciosamente los efectos de la psilocibina, puesto que aquellos usuarios que alcanzaron mejores experiencias místicas, también reportaron continuas mejoras en su estado mental sucesivo. Esto se basa en estudios previos que revelan similares resultados.

Mientras los expertos señalan que aún no se logra identificar cuáles son »los mecanismos biológicos subyacentes a las experiencias místicas», el estado de las investigaciones actuales ha conducido al desarrollo de un número de teorías a partir de las mediciones de la actividad cerebral, que en ciertas zonas aumenta (por ejemplo, la del »sentido del sí mismo o ego») y en otras disminuye (la que asemeja la «ensoñación»).

Estos descubrimientos han contribuido con la formación del concepto psicointegrador, que describe a sustancias psicodélicas como la psilocibina, debido a que integran la actividad neuronal, aumentando la conectividad y la comunicación en el cerebro.

La imagen grafica redes cerebrales funcionales en condiciones normales y bajo psilocibina.

psilocibina

Si bien se ha logrado avanzar en el conocimiento de la acción psicodélica en el cerebro, estas sustancias aún son difíciles de predecir, puesto que hay factores que influyen muchísimo en la experiencia, como las condiciones psicológicas de las personas y su entorno. Con el desarrollo del test MEQ30 se espera que este conocimiento se profundice, para una mejor comprensión en el uso de psicodélicos en el tratamiento de desórdenes psicológicos.

Traducción: C. Chacón V.

Fuente: IFLScience

 

 

 

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