OPINION POLITICA

El voto de la familia militar

Con motivo del apoyo otorgado por la Multigremial de las Fuerzas Armadas a la  candidatura presidencial de José Kast, y sus efectos negativos a la posibilidad de que la votación que obtenga pueda perjudicar la opción de Sebastián Piñera a ganar en primera vuelta, ha tomado, entre la opinión pública, relevancia el voto de la […]

Por paulwalder

15/11/2017

Publicado en

Columnas

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Con motivo del apoyo otorgado por la Multigremial de las Fuerzas Armadas a la  candidatura presidencial de José Kast, y sus efectos negativos a la posibilidad de que la votación que obtenga pueda perjudicar la opción de Sebastián Piñera a ganar en primera vuelta, ha tomado, entre la opinión pública, relevancia el voto de la denominada familia militar y los intereses de esta familia.

 

Al respecto, y considerando el desconocimiento que existe en la sociedad política, en general, respecto a las fuerzas armadas es necesario realizar algunas precisiones.

 

1) Los miembros de las fuerzas armadas no deliberan y por ello no es posible conocer por quien votaran, salvo que se pertenezca a sus relaciones personales, donde no existe inconveniente para que en ese seno manifiesten sus preferencias electorales, lo que no es indicativo suficiente para proyectar esa preferencia.

 

2) La denominación familia militar se debe a que en las fuerzas armadas predominan relaciones de parentesco. Así, a modo de ejemplo, Jorge Arancibia y Jorge Martínez, ex comandantes en jefe de la Armada, son hijos de militares. Ricardo y Oscar Izurieta, además de ser primos directos, son ambos hijos de militares. Juan Cheyre y Humberto Oviedo, también comandantes en Jefe, son hijos de militares. Lo mismo ocurre con Kenneth Pugh, actual candidato a senador por Valparaíso, que también es hijo de marino. La lista sería interminable, porque también existen tíos, hermanos, sobrinos, hijos y nietos, y vinculaciones similares entre las diversas ramas de las fuerzas armadas, la que se han hecho más extensivas, con la reciente y creciente aceptación de hijos de suboficiales en las escuelas matrices de oficiales, para suplir el déficit de postulantes.

 

3) Así, existe una estrecha relación entre los militares en retiro, quienes no tienen inconveniente para deliberar, y los militares activos. De esta vinculación es posible determinar que las fuerzas armadas en general votan por los candidatos de derecha, y entre ellos por los candidatos de la UDI, y que ello se debe a razones de afinidad ideológica, y porque los personeros de la UDI, más que los de los otros partidos, manifiestan sintonía con el gobierno de Pinochet, e incluso con las violaciones a los derechos humanos que fueron cometidas durante ese régimen.

 

4) El voto de la familia militar, históricamente, no ha sido relevante, porque la familia militar no es tan grande como se piensa. Los militares activos, sin considerar a Carabineros, son menos de 100.000, y se distribuyen a lo largo del país, razón por la cual no son decisivos a la hora de elegir. No obstante lo anterior, esta familia, donde su voto es relevante, por la mayor concentración de militares activos y en retiro, ha sido muy veleidosa. V.gr. el capitán de navío (r) y ex gobernador de Valparaíso, Hernán Sepúlveda, el año 1992, postuló a concejal por Valparaíso, no resultando electo. Lo mismo le pasó al contralmirante (r) Juan Toledo, quien el año 2008 postuló a concejal por Viña del Mar. Diferente le fue el caso del almirante (r) Jorge Arancibia, quien resultó electo senador, por la circunscripción costa de la Región de Valparaíso, en las elecciones de 2001. No obstante lo anterior, en su condición de candidato único por la derecha, obtuvo una muy exigua votación, porque los candidatos a senador de la Concertación, Nelson Ávila y Aldo Cornejo, estuvieron a punto de doblarlo. Situación original ocurrió en Puerto Williams, cuando el capitán de navío (r) Vicente Caselli, renunció a su cargo de comandante de la base naval para postular a concejal por la UDI, logrando ser electo alcalde de dicha comuna, en las elecciones de 1996, pero que en la elección siguiente, fue derrotado por el suboficial (r) José Soto, que representaba al partido Radical. Otros casos de candidatos provenientes de las fuerzas armadas, son escasos, y en sus territorios electorales, la influencia del voto militar no fue decisiva. Es el caso del coronel (r) Cristian Labbé, quien perdió el apoyo de los electores de Providencia, cuando importó los problemas de los militares condenados por violaciones de los derechos humanos a su comuna.

 

5) No fueron escasos los esfuerzos, de algunos miembros de las fuerzas armadas en retiro, de configurar un referente político autónomo. Sus intentos fracasaron mientras estos movimientos fueron liderados por generales, porque los suboficiales en retiro  no estaban dispuestos a reencarnar en su vida civil la subordinación militar de los cuarteles. Así, la idea de llevar a José Kast como candidato presidencial, representando los intereses militares, constituyó una buena solución, como reacción a las promesas incumplidas de Sebastián Piñera durante la campaña presidencial de 2009. Sin embargo, las propuestas, extremadamente, conservadoras del candidato Kast y su condición social, no están en sintonía con la suboficialidad en retiro.

 

6) La representatividad de la Multigremial de las Fuerzas Armadas, respecto a los militares en retiro, está por verse, porque son muy pocos sus miembros, los que no alcanzan para constituir un partido político. A modo de ejemplo, en su sitio en Facebook tiene menos de 2000 me gusta.

 

7) Los militares en retiro tienen todo el derecho a deliberar y a manifestar sus posiciones políticas, pero no deben hacerlo usando el grado militar que alcanzaron, porque ello, además de constituir una forma de deliberación, configura el delito del artículo 333 del Código de Justicia Militar, que castiga al que use distintivos de las fuerzas armadas.

 

En definitiva, el voto de la familia militar en función de un candidato presidencial, distinto al candidato de los partidos de la derecha, no es más que un buen intento. La votación del candidato Kast, más bien capta el voto UDI más conservador y disidente con Piñera, y entre ese voto, el de los militares en retiro, que solidarizan con los militares condenados por las violaciones a los derechos humanos.

 

Humberto Palamara Iribarne

Capitán de corbeta (r), ingeniero naval, abogado, magíster en ciencia política.

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