Acuerdo Barça-Fiscalía por el ‘caso Neymar’

El FC Barcelona ha convocado una junta extraordinaria para hoy viernes en la que los directivos del club azulgrana deberán someter a votación elpacto al que los abogados del club, por un lado, y la fiscalía y la abogacía del estado, por el otro, han llegado después de mantener unas largas negociaciones respecto al caso Neymar. El paso posterior a esta ratificación de la directiva, en caso de ser aprobada, será la firma para dar conformidad, dentro del plazo de unas dos semanas, al acto de conciliación definitivo y a la no celebración, por tanto, de juicio alguno.

El pacto exonera de cualquier cargo al presidente Josep Maria Bartomeu, para el que el fiscal José Perals llegó a pedir dos años y tres meses medio de prisión, y al expresidente Sandro Rosell, para el que se solicitaban siete años y seis meses, ambos por diferentes delitos fiscales. La fiscalía absuelve a ambos de responsabilidad alguna, quedando demostrada su inocencia y técnicamente sobreseídos sus respectivos procesos antes de juicio.

El Barça, como persona jurídica, será la única de las partes acusadas que recibirá condena después del pacto, aunque la penalización, en forma de multa, será sustancialmente menor a la inicialmente propuesta por la fiscalía y oscilará, a falta de confirmación, entre los cuatro y los seis millones de euros. Según la propuesta original de la fiscalía al Barça le correspondía abonar 63 millones por delito fiscal, sumando las cuotas supuestamente defraudadas y las multas asociadas. El FC Barcelona, por tanto, reconoce como concesión en todo este proceso el error de no haber hecho la retención correspondiente por el traspaso del futbolista.

La conciliación en este caso lleva implícita la consideración de que los 40 millones de euros que pagó el FC Barcelona en su momento a la empresa N&N, propiedad del padre de Neymar, lo fueron en concepto de salario y no de traspaso como siempre defendió el club. Eso podría rebajar considerablemente el precio final del brasileño y podría abrir una nueva vía favorable a los intereses azulgrana en el otro litigio abierto en relación a Neymar, en este caso el que obedece a la demanda interpuesta por la empresa DIS. Este grupo basa parte de su acusación contra el Barça, el Santos, Neymar junior, su padre y Rosell por corrupción en la reclamación de un porcentaje (el 40 por ciento) del montante total de la operación que, sin esos 40 millones, menguaría sustancialmente. La conciliación del primer caso, traspasado por cierto a la Audiencia Provincial, podría tener una posterior repercusión en la resolución del segundo, en vías de resolución en la Audiencia Nacional. Aunque nunca sería de aplicación automática y no vincularía, sí podría tener consecuencias judicialmente hablando.

La decisión del Barça de aceptar el pago de una multa, y con ello la asunción de culpabilidad, responde a que la cantidad a pagar es asumible y no conlleva riesgo patrimonial comparada con los 63 y, más aún, con los 90 millones a los que ascendía el aval a que se hubiera visto obligado el club en caso de abrirse un juicio que podría incluso alargarse cuatro años, afectando obviamente a nuevas directivas. La estabilidad institucional se habría visto torpedeada con carácter inmediato y la directiva actual obligada a dimitir ante la aplicación de los estatutos por el desequlibrio causado entre ingresos y deudas. El club considera, además, que ir a juicio suponía un riesgo porque se partiría de cero (nueva propuesta de penas por parte de la fiscalía) con el consiguiente “daño reputacional” que implicaría ver de nuevo en el banco de los acusados a presidentes y expresidentes de la entidad.