Paraguay «puso de cabeza» y aterrizó a Chile en Asunción: 2 a 1 que lo deja fuera de la zona de clasificación

Apenas un punto separaban a ambas selecciones en la tabla. Dos equipos que llegaban con la opción y la urgencia de ganar para mantenerse en el grupo de avanzada que clasificará por Sudamérica al mundial de Rusia 2018.

Y en honor al análisis impopular, pese al optimismo del medio chileno en general, lo del inició en el Defensores del Chaco era esperable. Con el arribo de Francisco Arce en la banca paraguaya, la selección guaraní iban a apretar la salida de Vidal y Aránguiz. Ya a los cinco minutos, un balón que pierde el volante de Bayern Münich provoca que Romero sacara un remate potente que encontró al reemplazante de Claudio Bravo, Cristopher Toselli con débil oposición. Uno a cero y apenas era el inicio de la tragedia.

Porque apenas tres minutos después, un tiro de esquina sirvió para que la otra fórmula paraguaya de la escuela del «Chiqui» Arce encontrara a una defensa mal parada y Paulo Da Silva cabeceó solo en el área chica para poner el dos a cero. Paraguay aplicaba libreto histórico, golpeaba, apretaba, esperaba y antes de los diez minutos ya tenía a Chile con dos tantos en contra.

Chile comenzó a levantar el balón pese a que Arturo Vidal comenzaba a tomar el control del balón. Recién a los 20 hubo una opción chilena con Enzo Roco desviando tras un córner. La Roja se instalaba en terreno paraguayo pero el local apilaba hombres.

Y en los 24, un nuevo desborde de Fuenzalida por derecha encontró a Eduardo Vargas haciéndose el espacio entre los centrales guaraníes. Su invento de «chilena» encontró a Barreto bien parado que ahogo el gol visitante con un tapadon.

El elenco paraguayo apelaba a la contra y estuvo cerca de alargar las cifras. Chile chocaba contra su propia impotencia y los nieve fatídicos minutos del inicio de la primera etapa.

Pero a los 35′, el libreto se dio vuelta, cuando una falta inexistente cobrada por el argentino Néstor Pitana provocó un tiro libre de Aránguiz y en su propia ley, Arturo Vidal volvió a agigantarse y metió un cabezazo que silencio Asunción. Y con eso, obligaban a los locales a salir, aunque con su dupla ofensiva de Lezcano y Santander se las arreglaban ára complicar.

La segunda etapa marcó eso. Paraguay buscaba el error y presionaron a Vidal, el único que toma el riesgo de hacer una jugada de más. Nuevamente Romero hizo trabajar a Toselli y después, tras un error del Rey Arturo en la salida, Lezcano se perdió el tercero.

Otra vez, Chile demoró quince minutos en hacerse del control del partido y allí, Alexis Sánchez comenzó a hacer lo suyo, aunque su compañero en ofensiva, Eduardo Vargas poco hizo por ayudarlo. Pero el tocopillano encontró a otro socio, el iquiqueño Edson Puch que entró promediando el complemento y en una de las jugadas brillantes donde rompieron la línea alboroja, Alexis marcaba den posición de adelanto.

Pizzi sacó hombres de la zona defensiva como Mena y Silva e intentó con Felipe Gutiérrez y Mauricio Pinilla. La Roja era el protagonista y Paraguay se sentía cómodo con ese libreto. Lo del final fue un capítulo repetido de Chile en clasificatorias anteriores. En la última real de riesgo, Benítez poudo sentenciar para el equipo guaraní que se volvió a prender en la tabla de posiciones. Chile quedó relegado con los triunfos de Brasil y Argentina. La revancha será el martes, a las ocho y media de la noche en el Monumental ante Bolivia, equipo que también ganó en esta fecha. Y sin Gary Medel, un descontrolado capitán que quedó suspendido.

Lo de Pitana en el arbitraje nunca fue el factor determinante, por permisivo que haya sido su trabajo. Un aterrizaje forzoso más que necesario para volver a tomar el camino del rigor. Chile está lejos de ser el mejor equipo del mundo como muchos confiados en el medio nacional quisieron hacer creer. Aunque tiene fútbol para clasificar igual. Pero deberá volver a buscar su fórmula. Porque en el Defensores del Chaco, definitivamente la perdió…