Era tan seguro que ya han avanzado en infraestructura y planificación. Pero hoy se confirmó desde la asamblea del Comité Olímpico Internacional (COI) que ya se ha aprobado este miércoles en Lima la concesión de la sede de los Juegos Olímpicos de 2024 a París y la de 2028 a Los Ángeles. Incluso, el presupuesto comprometido por ambas megaciudades, sumado, es prácticamente la misma cifra a la que gastó Río de Janeiro para sacar adelante los JJOO de 2016.
París proyecta gastar 6.650 millones de euros, de los cuales el estado francés solo tendrá que aportar 1.000 millones, según había afirmado en julio pasado el mandatario galo Emmanuel Macron, en la sede del COI, en Lausana (Suiza). Según el dossier de la candidatura, 3.650 millones están destinados al Comité Organizador y los restantes 3.000 a las inversiones. Además, de los 1.000 que aporte la nación, habrá otros 500 millones que correrá por cuenta de la administración parisina de la alcaldesa Anne Hidalgo, a la que se ve muy activa aquí en Lima. «La Agenda Olímpica 2020 establecida por el COI simplificó las candidaturas, las ciudades necesitan saber cuáles serán los presupuestos y los ciudadanos también los necesitan», explicó.
La candidatura de Los Ángeles se basa en un principio muy interesante: cero construcciones nuevas para los Juegos, aprovechando la infraestructura ya existente en la ciudad. «No necesitamos construir ninguna Villa Olímpica, ni estadios, ni centro de prensa», subraya Casey Wasserman, presidente del Comité de la candidatura californiana.
Por eso sus cuentas se reducen especialmente: un costo de 5.300 millones de dólares, con un tope de 491 millones para gastos imprevistos. La última cita olímpica en Río arrojó un gasto de más de 11 mil millones de dólares, un 51 por ciento más de lo presupuestado, entre organización, inversión en infraestructura y legado.
El comité organizador de Tokio 2020 intenta podar, a instancias del COI, la cifra de 13.000 millones que calculó en diciembre de 2016 para sus Juegos. El máximo organismo olímpico trata de revertir la publicidad negativa que generan semejantes presupuestos: de la carrera por 2024 se bajaron Roma, Boston, Hamburgo y Budapest; todos desistieron de competir por la sede a causa de los costos que implicaba.
El pleno dio su visto bueno a mano alzada y por unanimidad al acuerdo alcanzado por la Ejecutiva del organismo con ambas ciudades. Es la primera vez que el COI concede dos sedes olímpicas a la vez, una de ellas con once años de anticipación.
Tanto París como Los Ángeles eran originalmente aspirantes a organizar los Juegos de 2024. Se quedaron solas tras las renuncias de Hamburgo, Roma y Budapest y el COI decidió repartir las dos siguientes ediciones entre las dos únicas supervivientes.