Coludidos con pan y micrófono: Panaderos industriales subieron precios y lo anunciaban por radio

La Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó un requerimiento ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) en contra de un grupo de panaderos industriales de la provincia de Iquique, Región de Tarapacá por haberse coludido en el mercado de elaboración y comercialización mayorista de pan que se entrega a almaceneros de la zona.

Según indicó el requerimiento, compartido por la FNE en su sitio oficial, los panaderos industriales coludidos acordaron mediante reuniones presenciales alzar de manera conjunta los precios mayoristas del pan, al menos entre noviembre de 2019 y agosto de 2022,  un periodo que coincidió cpn la alerta sanitaria decretada en el país por Covid-19

De acuerdo con el organismo fiscalizador, anunciaban y publicitaban estos incrementos a través de la radio y medios de comunicación locales.

La investigación de la FNE se inició a partir de diversas notas de prensa publicadas durante marzo de 2020 que informaban sobre alzas en el precio del pan,

A la par, la Dirección Regional de Tarapacá del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) en abril de 2020 y en abril 2022, en las que se advertía la existencia de anuncios de aumentos de precios de este alimento por parte de los panaderos industriales que se aplicarían en toda la provincia de Iquique.

En la denuncia de 2020, se hizo referencia a publicación del 3 de diciembre de 2019 del diario en el diario circulación regional La Estrella de Iquique que anunciaba un alza en el precio de la comercialización mayorista del pan, la cual según la nota de prensa habría tenido lugar a contar del 2 de diciembre de 2019 y estaba precedida de un documento que se habría “filtrado” por redes sociales, suscrito por un grupo de panaderías industriales de Alto Hospicio, en el que manifestaron: “(…) hemos acordado un alza en el precio del pan general. El cual se llevará a efecto el día lunes 2 de diciembre del presente año y su precio neto será de $900 el Kilo + IVA”.

EN la denuncia de 2022 Sernac informó que en otra publicación del diario La Estrella de Iquique, de fecha 18 de abril del mismo año, se anunciaba una nueva alza en el precio del pan, esta vez, de entre un 15% y un 20%, que afectaba a toda la provincia de Iquique. En este caso, los antecedentes revelaron que el alza de precios se encontraba precedida de un documento suscrito por quienes se autodenominaron como la “Federación de Industriales Panaderos de Iquique y Alto Hospicio”, mediante el cual informaban que dicho aumento comenzaría a regir a partir del lunes 18 de abril de 2022.

Ante este escenario, la FNE emprendió investigaciones para descartar o comprobar la existencia de posibles conductas contrarias a la libre competencia en el mercado de la producción y comercialización de pan en la provincia de Iquique.

Reuniones para subir los precios

A través de las indagatorias se constató que los panaderos industriales empezaron a coordinar alzas en sus precios hacia fines de 2019 y que esta práctica se extendió hasta el segundo semestre de 2022, con evidencia de publicaciones en redes sociales y en prensa de los detalles del acuerdo.

Para coordinarse, los panaderos industriales mantuvieron contactos y reuniones impulsadas por los dirigentes Samuel Campusano y Marlene Martínez, también requeridos por la FNE quienes se encargaban de publicitar a través de la prensa local los aumentos de precios.

Según el requerimiento en las reuniones se establecieron precios mínimos por encima de los cuales debían vender el pan, o porcentajes o magnitudes de incremento en el valor de este producto.

Los antecedentes recopilados por la Fiscalía revelan que en uno de los encuentros, los panaderos industriales de Alto Hospicio definieron alzar de manera coordinada los precios cobrados a sus almaceneros por el pan “general” o “corriente” −marraqueta y hallulla−, definiendo una fecha determinada para que aquello sucediera y estableciendo un precio sobre el cual debían vender. P

Para sellar dicho compromiso suscribieron un documento «donde consta la firma de las 19 panaderías y amasanderías adheridas al Acuerdo, y que tenía la vocación de ser un comunicado para ser entregado a sus clientes».

Según la FNE, el texto fue suscrito por Samuel Campusano (Panadería Flor del Norte), Guido Condori (Amasandería Benito), Lidia Flores (Panadería Asunción), así como por las parejas de Roxana Cáceres (Panadería Rody) y María López Mamani (Panadería Diana) −entre ponederos industriales− indicaba que el alza acordada se traducía en un aumento en el precio del pan general a $900 por kilo, más IVA, y comenzaría a operar el lunes 2 de diciembre de 2019.

Lidia Flores (Panadería Asunción) expuso el organismo fiscalizador las circunstancias en las que se realizó el encuentro que dio origen a este documento que prueba la colusión.

“Esta reunión duró unos 15 minutos ¿ya?. Simplemente era tocar el tema por decirte, ya, ‘usted está de acuerdo’, y ‘nosotros qué cosa vamos a colocar en la hojita a nuestra clientela’, decir que hemos subido de precio porque estamos de acuerdo todo, todos los socios de la panadería. Entonces también pedir a ellos también. Nosotros le informamos en ese papelito, que estamos de acuerdo todos para poder
subir de precio del (sic) pan”, relató.

Panaderos industriales anunciaron subida de precios por prensa y radio

La Investigación sacó a la luz que aquella primera alza conjunta del precio de venta mayorista en Alto Hospicio apuntaba derechamente a alinear sus precios con los niveles que eran cobrados en Iquique, estableciendo un mínimo sobre el cual cada panadero definiría su precio en base a diferentes factores.

“Se llegó a un acuerdo, se iba a subir… a $900 pesos, lo mismo que vendía Iquique, y de ahí cada uno según su calidad, iba a vender un poquito más, un poquito menos, pero $900 pesos era el tope de, de venta porque no se podía menos”, indicó Samuel Campusano a la FNE.

“El margen de donde se iba a vender se emparejó al mismo precio de Iquique. Solamente eso. Iquique vendía a $900 pesos el kilo y allá arriba [refiriéndose a Alto Hospicio] se vendía a $650. Entonces se emparejó con Iquique y de ahí para arriba, el que tuviera mejor calidad, iba a vender mejor”, acotó.

Conforme con los antecedentes recabados en la Investigación, los precios de Iquique antes del
acuerdo eran en promedio $200 pesos por kilo más caros que los que se cobraban en Alto Hospicio.

De acuerdo con las indagatorias, con el objetivo de implementar esta alza coordinada y evitar reclamos por parte de sus clientes, cada uno de los panaderos industriales debía informar a los almaceneros que
abastecía de la medida adoptada, haciendo entrega de una copia del acuerdo suscrito.

La FNE señaló que el alza de precios en el pan en la comuna de Alto Hospicio tuvo repercusiones en el resto de la provincia de Iquique, formando parte de las noticias e informaciones que circulaban en periódicos y radios de alcance regional.

Multas a los panaderos industriales acusados de colusión

En su requerimiento, la Fiscalía solicitó al TDLC imponer multas por cerca de $ 65 millones en total a los panaderos industriales acusados y a las personas identificadas como líderes de la agrupación en las comunas de Iquique y Alto Hospicio.

Adicionalmente, la FNE solicitó al Tribunal de Defensa de la Competencia (TDLC), que imponga como medida preventiva la exigencia de realizar capacitaciones en materia de libre competencia a todos los requeridos.

Ala par pidió al organismo que imponga como medida preventiva la exigencia de realizar capacitaciones en materia de libre competencia a todos los requeridos.

Tras el requerimiento al TDLC, el fiscal nacional económico, Jorge Grunberg, sostuvo que «para la FNE todos los carteles son inaceptables. Este caso da cuenta que estamos muy activos monitoreando las regiones de nuestro país, especialmente en mercados sensibles para la ciudadanía».

A continuación, el requerimiento presentado por la FNE ante el TDLC: