Rouseff «abre un nuevo capítulo» en las relaciones con México, «clave en la unidad latinoamericana»

La presidenta de Brasil Dilma Rousseff, que acaba de llegar a México para iniciar el lunes su primera visita de Estado a este país, ha anunciado en una entrevista al diario ‘La Jornada‘ que ha llegado la hora del acercamiento entre «los dos mayores mercados de América Latina». La aproximación se produce después de una cierta congelación de las relaciones debido al apoyo del expresidente mexicano Vicente Fox al tratado de libre comercio promovido por EE.UU. para toda América, la llamada Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA). El proyecto fue rechazado rotundamente en 2005 por el expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, así como por los expresidentes de Argentina y Venezuela, Néstor Kirchner y Hugo Chávez.

Según Rousseff, su visita a México «abre un nuevo capítulo» en las relaciones entre los dos países, acordado durante la visita del presidente Enrique Peña Nieto a Brasil en septiembre de 2012. Entonces ya se había acordado lo «fundamental» de la necesidad de una aproximación. «Es un momento histórico para estrechar las relaciones entre América del Sur y México, una de las naciones más ricas en lo cultural y lo económico; una gran nación latinoamericana ubicada en el hemisferio norte», recalcó Rouseff.

La presidenta brasileña agregó además que Brasil es consciente de la importancia de México, país que llamó «una gran nación latinoamericana ubicada en el hemisferio norte», para la unidad continental.

En particular, Roussef asegura que los dos países pueden cooperar en materia de hidrocarburos, ya que siempre existe la posibilidad de que la paraestatal Pemex pueda explotar el petróleo de Brasil. Además, asegura,  posible un acuerdo entre Pemex y la brasileña Petrobras. Además ambos países podrían aprovecharse de las inversiones mutuas: «Somos el segundo destino de las inversiones directas mexicanas, solo nos supera EE.UU.», afirmó la mandataria brasileña.

Asimismo Rousseff opinó también que el acercamiento entre Cuba y EE.UU. pone el fin a la guerra fría en América Latina y destacó el papel importantísimo que jugó el papa Francisco en este proceso.

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