Este lunes 20 de octubre, el abogado y director de la Revista De Frente, Nicolás Romero, dialogó en exclusiva con el programa La Mañanera conducido por Javier Pineda. En la instancia, Romero conversó sobre su postulación a diputado por el Distrito 11 y su tesis sobre la narco derecha en la política chilena.
En el último tiempo se ha instalado en el discurso internacional el concepto de “narcopolítica”, que — según la RAE— se refiere a una “actividad política en que las instituciones del Estado están muy influidas por el narcotráfico”. Para Romero, este concepto no está alejado de nuestro país y señaló que en Chile existe una narco derecha política.
El abogado señaló que ha estado trabajando en este concepto como respuesta a distintos acontecimientos que se han dado en la región, como, por ejemplo, la agresión militar de Estados Unidos contra Venezuela.
“Nos damos cuenta que la derecha y Estados Unidos utilizan el discurso de lo que ellos llaman el crimen organizado como una excusa para fortalecer la intervención occidental en nuestro país y en nuestro continente… ese es un poco el sentido que está detrás de lo que Estados Unidos ha llamado una estrategia de securitización hacia la región”, indicó.
Romero advirtió que hoy en día estamos rodeados de referencias sobre el Tren de Aragua y el crimen organizado en nuestro país. Sin embargo, él plantea que en Chile existió una narco dictadura que, “bajo la asesoría de Estados Unidos e Israel no solo mató, asesinó y violó gente, transgredió los Derechos Humanos y rompió la democracia, sino que se organizó institucionalmente para el desarrollo del crimen organizado”.
Para el abogado, es importante plantear esta idea en época de elecciones, ya que —según señala— existe un discurso instalado en torno al miedo, al caos y a la delincuencia, con énfasis en portonazos y asaltos, que posteriormente se asocian a las y los venezolanos. Esa narrativa, a su vez, se vincula con Maduro y con la izquierda, generando la percepción de que este sector político sería el responsable de dichos hechos.
Romero sostuvo que, al analizar quiénes están detrás del crimen organizado en nuestro país —como en los casos de la compra y venta de madera o de cables, por ejemplo—, no es el Tren de Aragua quien está detrás de esos delitos.
“Yo más bien lo que veo, es que hay que rastrear las pistas de cómo al interior, por ejemplo de las Fuerzas Armadas, de Carabineros de Chile, de instituciones armadas de nuestro país, se ha desarrollado —desde a lo menos la década de los 80— una política institucional de asesoría o derechamente de desarrollo de crimen organizado”, indicó el abogado.
Para el abogado, es importante destacar que durante la década de 1980 surgieron en Chile distintos personajes, como el químico Eugenio Berríos o el empresario Carlos Cardoen, quienes participaron en redes de crimen organizado a gran escala, vinculadas al desarrollo de armas químicas y bombas de racimo, que posteriormente eran vendidas ilegalmente a países bloqueados.
“En los 90 hay una gran operación, la izquierda ha hablado de los pactos de silencio que tienen que ver principalmente con asegurar la impunidad de Pinochet en torno a los Derechos Humanos, pero de los pactos de silencio que no se habla regularmente, es que acá los mismos civiles, la misma concertación colaboró directamente con poder esconder estos negocios ilegales. Chile sigue vendiendo armas —no el gobierno, sino el ejército chileno— sigue vendiendo ilegalmente armas después del 90”, señaló.
Romero agregó que, “entonces estos tipos tuvieron que hacer una ‘pataleta’ para evitar que el poder civil y que la sociedad rastreara como hasta el día de hoy siguen ocupando las instalaciones del ejército, los pinchazos como logística para el crimen organizado, yo creo que ahí hay que poner el foco, no en el Tren de Aragua”.
Para el candidato a diputado, existe un círculo virtuoso entre el crimen organizado, el dinero sucio y el dinero limpio, y estos últimos siempre van de la mano, ya que se necesita poder limpiar el dinero sucio. “Entonces el proceso mediante el cual estas formas de crimen organizado en cada país se van ensamblando se van se van insertando digamos, para poder entrar al circuito formal es algo que hay que saber investigar”, indicó.
En esa línea, el abogado declaró que dentro de la derecha chilena existen al menos dos grupos. Por un lado, las grandes fortunas —como los Luksic o los Matte—, que se enriquecieron durante la dictadura y operan en negocios oligopólicos legales, fuertemente subsidiados por el Estado, como la industria forestal.
Por el otro, Romero señaló que durante la dictadura de Pinochet surgieron redes de crimen organizado vinculadas a organismos de inteligencia, integradas por exmilitares y excarabineros, que generaron nuevas formas de acumulación de riqueza a través de actividades ilícitas. Según el abogado, ese tipo de estructuras se mantiene hoy en delitos como el robo de madera, donde existen vínculos entre pequeños empresarios forestales, carabineros y equipos de inteligencia.
Te invitamos a ver la entrevista completa emitida este lunes 20 de octubre: