Descubren otros 200 guerreros de terracota en la tumba del primer emperador de China

Nuevas excavaciones en el Mausoleo de Qin Shi Huang permitieron el desentierro de más de 200 guerreros del Ejército de Terracota de China, 12 caballos de arcilla, los restos de dos carros, espadas de bronce, arcos y escudos de colores.

Los Guerreros de terracota son un conjunto de más de 8.000 figuras de guerreros y caballos de terracota a tamaño real, que fueron enterradas cerca del autoproclamado primer emperador de China de la Dinastía Qin, Qin Shi Huang, en 210-209 a. C. Se encuentran dentro del Mausoleo de Qin Shi Huang.

Si bien las primeras estatuas fueron descubiertas durante unas obras para un abastecimiento de agua en marzo de 1974, cerca de Xi’an (provincia de Shaanxi, República Popular China), el nuevo hallazgo se realizó durante la última ronda de excavaciones del pozo número 1, en un área que abarca 400 metros cuadrados.

Desde el año 1987, estas piezas arqueológicas están consideradas como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

El Museo del Mausoleo del Emperador Qinshihuang confirmó esta semana que durante la tercera ronda de excavaciones, que se llevó a cabo entre 2009 y 2019, se sacó a la luz un área de 400 metros cuadrados en el pozo No.1.

El No.1 es el más grande de los tres pozos que rodean la tumba del primer emperador de la nación china, ubicada en la provincia de Shaanxi.

Suvenires de la guerra

Como se sabe, las figuras son a tamaño natural: miden 1,80 metros de altura y están equipados con armaduras fabricadas también con terracota. Cada una de estas figuras tiene rasgos y características diferentes: bigotes, peinados, jóvenes, viejos, rasgos de etnias diferentes.

Según la historia escrita, las cabezas y las manos de estos guerreros se moldeaban aparte y luego se añadían a los cuerpos. Los uniformes reflejan también los rangos militares a los que pertenecen. Cada soldado llevaba un arma: arcos, lanzas, espadas, etc.

Se cree que tras la caída de la dinastía Qin, los campesinos saquearon la tumba y robaron estas armas.

La tumba se extiende alrededor de 38 millas cuadradas y, junto con el Ejército de Terracota, contiene una fosa común de trabajadores y artesanos. Se presume que el complejo tardó alrededor de 30 años en construirse.

Las figuras son de colores vivos y brillantes, pero este color se pierde apenas a las cinco horas de exposición al aire, debido a la oxidación.

Ahora, Shen Maosheng, quien dirigió la excavación, dijo que la mayoría de los guerreros recién encontrados se pueden dividir en dos grupos. Un grupo lleva postes, mientras que el otro lleva arcos.

Excavación con nuevo curso

La nueva excavación en el pozo No.1 inició en 2009 como parte de un proyecto tenía como objetivo comprender mejor el sistema de servicio militar y el equipo utilizado por el ejército de la dinastía Qin. Sin embargo, la aparición de estos nuevos guerreros da un nuevo giro a la investigación.

El año pasado, los investigadores dirigidos por Marcos Martinon-Torres, del Departamento de Arqueología de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, anunciaron que las armas en el sitio habían sido notablemente bien conservadas debido a las condiciones naturales en los pozos donde fueron enterrados.

Anteriormente se había sugerido que habían sido recubiertos con algún tipo de tecnología avanzada y antioxidante.

Según Shen Maosheng, responsable de la excavación,  la mayoría de los soldados recién descubiertos se pueden dividir en dos categorías: Una corresponde a guerreros que llevan armas en forma de asta, con el brazo derecho doblado y el puño medio cerrado, y la otra agrupa guerreros con arcos, con su brazo derecho colgando al natural, amplió la agencia Xinhua.

A pesar de que la dinastía Qin duró solo 15 años,  fue la primera vez que China fue gobernada como un país unificado. Además del Ejército de Terracota, el emperador Qin Shi Huang también fue responsable de la construcción de la Gran Muralla de China.

La nueva excavación amplió el estudio sobre el sistema y el equipo militar de la dinastía Qin (221-206 a. C.), y también proporcionó nuevas ideas para la investigación del estilo artístico, las características y las técnicas de elaboración de las figuras en ese periodo, aseguró Maosheng.

Sigue leyendo: