En un contundente mensaje, el gobierno de la República Popular China, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, lanzó una crítica frontal contra Estados Unidos, acusándolo de operar con una «mentalidad hegemónica» y de intentar interferir en las relaciones soberanas entre el gigante asiático y los países de América Latina y el Caribe.
La declaración, emitida por el portavoz Guo Jiakun, surgió como respuesta directa a las recientes acusaciones de un oficial militar estadounidense que afirmó que China se está «infiltrando y saqueando recursos» en el hemisferio occidental.
Durante una conferencia de prensa regular, el funcionario desestimó las imputaciones de Washington calificándolas de infundadas y carentes de todo contacto con la realidad.
«Tales acusaciones de Estados Unidos no representan nada más que una narrativa desgastada y divorciada de la realidad, que una vez más expone la arraigada mentalidad confrontacional y de Guerra Fría de ciertos individuos dentro de Estados Unidos», afirmó Guo.
Frente a la narrativa de «saqueo» esbozada por el oficial estadounidense, Guo Jiakun presentó el modelo de cooperación chino como un paradigma de relaciones internacionales basado en la equidad y el beneficio mutuo.
El portavoz recordó que China siempre se ha adherido a los principios de respeto mutuo, igualdad, beneficios compartidos, apertura, inclusión y cooperación de beneficio mutuo en la cooperación práctica con los países de América Latina y el Caribe en diversos campos.
Guo argumentó que esta cooperación no es impuesta, sino que responde a una demanda genuina y ha sido beneficiosa para el desarrollo, tanto del país asiático como de las naciones latinoamericanas y caribeñas.
Al respecto, planteó que se alinea con las necesidades respectivas de cada parte, sirve a sus intereses comunes y ha promovido vigorosamente el desarrollo económico y social local, lo que le ha permitido a China ganarse una genuina bienvenida en los países y pueblos de la región, consignó Xinhua.

«EE.UU. no ha escatimado esfuerzos para interferir y controlar América Latina»
El momento más álgido de la intervención del portavoz chino llegó con una crítica histórica directa a la política exterior estadounidense hacia América Latina.
«A lo largo de los años, Estados Unidos no ha escatimado esfuerzos para interferir y controlar América Latina y el Caribe. Sus acciones hegemónicas y de intimidación son demasiado evidentes», indicó.
Acto seguido, el portavoz chino rescató un lema histórico de la diplomacia latinoamericana y antiimperialista para reafirmar la soberanía de la región, desafiando directamente la influencia e injerencia que tradicionalmente Washington ha reclamado.
«América Latina y el Caribe no son el patio trasero de nadie», afirmó de forma tajante, tras indicar que la cooperación entre China y América Latina no está dirigida contra terceras partes y no debe ser interrumpida por ningún tercero.
Recalcó que a través de la visión y postura de Pekín, los países de la región tienen derecho a elegir de forma independiente sus caminos y socios de desarrollo.
«Estados Unidos debería cesar sus intentos de sembrar discordia y crear problemas de la nada, y en su lugar centrarse en contribuir más al desarrollo de los países de América Latina y el Caribe», enfatizó Guo.