Ayotzinapa: Seis meses, 43 desaparecidos y ninguna respuesta

Seis meses después de que desaparecieran los 43 estudiantes de Ayotzinapa, los familiares de los jóvenes siguen exigiendo que no se detengan las investigaciones hasta que se encuentren pruebas concluyentes sobre el paradero de los 43 desaparecidos.

Por Marta Ubeda

27/03/2015

Publicado en

Justicia y DD.HH / Latinoamérica

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Este jueves se cumplieron seis meses desde que desaparecieran en Guerrero 43 estudiantes de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa. Desde aquella fatal madrugada del 26 al 27 de septiembre, más de cien personas han sido arrestadas por la Procuraduría General de México, entre las que se encuentran el ex alcalde de Iguala y su mujer, así como decenas de policías por su supuesta vinculación con el grupo criminal Guerreros Unidos, organización a la que se le atribuye la desaparición forzosa de los 43 jóvenes.

A finales del pasado mes de enero, las autoridades mexicanas decidieron dar por concluida la investigación y búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos tras las declaraciones en prisión de un sicario de Guerreros Unidos que reconoció que los jóvenes fueron secuestrados, asesinados e incinerados en el basurero de Cocula por miembros del grupo criminal. La versión del sicario se sostenía sobre una supuesta confusión de los estudiantes con integrantes del grupo «Los Rojos», rivales a Guerreros Unidos en el estado de Guerrero.

La Procuraduría General de México tomó esta única versión como verdadera y oficial, y sin necesidad de completarla con pruebas científicas y concluyentes, cerró el caso de los desaparecidos sentenciando que los jóvenes estaban muertos e incinerados. Esto causó, como es lógico, un enorme descontento tanto entre familiares como en el resto de la sociedad mexicana y de otros muchos países del mundo, que piden y exigen al gobierno de México que retome la investigación ante la falta de pruebas concluyentes.

Los familiares de los estudiantes han dado y siguen dando ejemplo de coraje, constancia y fuerza, pues desde que desaparecieran sus hijos, nietos, sobrinos, hermanos y primos, hace seis meses, no han cesado de luchar para que la investigación continuara y, una vez que la PGM la cerró, no dudaron en viajar a Europa buscando el apoyo y respaldo de las organizaciones internacionales de Derechos Humanos, y lo consiguieron. El lema bajo el que pelean de forma incansable es «Vivos se los llevaron, vivos los queremos».

Amnistía Internacional, Brigadas Internacionales de Paz y el Comité por la Justicia y el Derecho Internacional, son algunas de las organizaciones que alarmaron sobre la preocupante falta de respuestas en el caso de los desaparecidos de Ayoztinapa e instaron al gobierno de México a apoyar las labores de las investigaciones independientes sobre el paradero de los jóvenes que lleva a cabo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.