Cuba abre 13 tiendas minoristas para captar divisas y hacer frente al bloqueo de EE. UU.

El 10 de diciembre entrará en vigencia una nueva sanción de Washington que prohíbe los vuelos a la isla, excepto al aeropuerto de La Habana

Desde el año pasado, el Gobierno de Estados Unidos recrudeció el bloqueo que por décadas ha impuesto a Cuba.

La semana pasada, la administración de Donald Trump anunció una nueva medida con la que prohíbe los vuelos de las aerolíneas norteamericanas a los aeropuertos de la isla, excepto al de La Habana; una disposición que entrará en vigor el próximo 10 de diciembre.

Frente a esta arremetida, el Gobierno cubano busca alternativas y soluciones que le permitan hacer frente a todas estas restricciones y, de alguna manera, paliar los efectos que tienen sobre la población.

Desde este lunes se activaron 13 tiendas minoristas en la nación caribeña con el objetivo de captar divisas para contribuir con el crecimiento económico. En ellas los cubanos podrán adquirir televisores de última generación, refrigeradores, splits, freezers, lavadoras automáticas, hornos, sandwicheras y microondas, además de motos eléctricas, baterías, neumáticos y accesorios, unidades de moto y motores de combustión.

Del total de establecimientos comerciales, 12 están ubicados en la capital de la isla, La Habana, y 1 en Santiago de Cuba.

La meta es inaugurar 77 comercios que trabajen bajo la modalidad de divisas convertibles, facilitada gracias a la tramitación, en entidades bancarias con sede en Cuba, de cuentas bancarias con moneda extranjera y la posterior activación de tarjetas, reseñó Telesur.

El vicepresidente cubano, Salvador Valdés Mesa, afirmó que aspiran a ampliar la oferta de productos y ofrecer otros que tienen alta demanda como ciclomotores eléctricos y partes y piezas de autos.

Las nuevas sanciones impuestas por la Casa Blanca a la isla recibieron este lunes la condena de la entidad estadounidense Cooperación en Educación Médica con Cuba (Medicc, siglas en inglés).

William Keck, director ejecutivo de la organización, dijo que este paso constituye un asalto cada vez mayor a la libertad de movimiento, marca un nuevo nivel de crueldad en la política exterior de Estados Unidos y castiga a las familias.

Fuentes: Telesur, Prensa Latina.