El activista venezolano por los Derechos Humanos (DD.HH.), Gabriel Aguirre, cuestionó el otorgamiento del Premio Nobel de la Paz a la opositora de extrema derecha María Corina Machado, a pesar de que ha pedido la intervención del país caribeño.
En conversación con el programa La Mañanera, conducido por el Director de El Ciudadano, Javier Pineda Olcay, el organizador para América Latina del movimiento global “Un Mundo Más Allá de la Guerra” (WBW, World Beyond War en inglés), indicó este jueves que la decisión del Comité Noruego del Nobel «es una vergüenza realmente».
«El pueblo venezolano y el movimiento de paz en el mundo y en Venezuela particularmente, saben desde hace muchísimos años sobre el desprestigio del premio Nobel de la paz y recuerdan que el Nobel de la paz se ha entregado a personas como (el expresidente de Estados Unidos) Barack Obama, quien fue promotor de guerras y distintas intervenciones en el Medio Oriente y además fue el responsable de la aplicación de las medidas coercitivas unilaterales contra Venezuela», indicó.
Señaló que a lo largo de su carrera política, la dirigente de extrema derecha de 57 años, se ha caracterizado por ser la representante del ala más radicalizada de la oposición tanto al expresidente fallecido, Hugo Chávez, como al actual mandatario venezolano, Nicolás Maduro
«Entonces, por supuesto, esto es un hecho vergonzoso. Machado es una persona que en distintas oportunidades, en información pública, en los distintos medios de comunicación, solamente falta entrar en la web y darse cuenta de esto. Ha declarado de manera reiterada varias dimensiones, varias direcciones y una de ellas ha sido solicitar también una intervención militar extranjera contra Venezuela, una coalición militar internacional», cuestionó.
Recordó que en 2019, la ultraderechista solicitó la aplicación contra Venezuela del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, el TIAR, «una alianza militar, por supuesto, dependiente, como la OEA, que también está bastante desprestigiada».
«La señora María Corina Machado en ese momento exigió la aplicación de la conformación de una alianza militar regional para intervenir en Venezuela, también le solicitó apoyo al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu para ‘resolver ‘ el problema en Venezuela», planteó, al tiempo que mencionó «os reiterados llamados que ha hecho a las distintas fuerzas de Estados Unidos, demócratas, republicanos, por igual, a todos y cada uno, exigiendo que se intervenga en Venezuela».
El Premio Nobel de la Paz se entrega cada año a la persona que a juicio de los integrantes del comité fuel la que más ha hecho para cumplir los términos establecidos en el testamento de Alfred Nobel, el químico sueco cuya fortuna estableció los Premios Nobel.
Según los estatutos, el premio debe ser concedido “a la persona que haya realizado el mayor o mejor trabajo en favor de la fraternidad entre las naciones y la abolición o reducción de los ejércitos permanentes y la formación y difusión de congresos de paz”.
Al respecto, Aguirre planteó que lo «más irónico de esto es que una vez recibido el premio, Machado ha continuado sus reiterados llamados».
«Otro punto importante, es que la señora María Corina Machado, en el caso de la política interna de Venezuela, han sido innumerable las situaciones y los momentos en los cuales ha convocado al sector que le acompaña en su aventura, que es muy poco, pero que le acompaña dentro de su visión locura sobre cómo resolver el problema de lo que ellos consideran Venezuela, a la violencia, a la confrontación interna y al escalamiento de una guerra civil».
«Quienes hemos tenido la posibilidad de conocer también sobre otros países que han enfrentado guerras civiles, como en el caso de Colombia. Sabemos lo que significaría la fractura social en nuestro pueblo con una eventual confrontación civil, y la señora María Corina Machado en forma reiterada, lo ha hecho. Entonces, esto es un premio que realmente debemos nosotros cuestionar abiertamente y ha sido vergonzoso, porque además, uno de los premios más cuestionados internacionalmente es el de la señora María Corina Machado», enfatizó.
El activista venezolano también se refirió al hecho de que una vez que se anunció que se le otorgaría el premio a la dirigente de la extrema derecha, «el tema estuvo en boca de discusión como dos por tres días y luego nadie habló al respecto.
Intervenciones militares de EE.UU. están plagadas de falsas narrativas
«Es decir, ni siquiera quienes se atrevieron a otorgar el premio, quienes han sido partícipes de estas políticas, se atreven hoy a defender ante la gente esta desfachatez. Entonces, esto es una vergüenza», subrayó.
Durante la entrevista con La Mañanera, el organizador para América Latina del movimiento global “Un Mundo Más Allá de la Guerra” también se refirió al despliegue militar y agresiones perpetradas por Estados Unidos (EE.UU.) en las aguas del Mar Caribe, frente a Venezuela.
Como parte de esta ofensiva, Washington desplegó ocho buques y un submarino en las costas venezolanas, una medida que la administración del presidente de la nación norteamericana, Donald Trump, ha justificado bajo el argumento de la lucha contra el narcotráfico.
«Nosotros estamos inmensamente preocupados y hemos querido alzar nuestra voz y elevar la denuncia frente al más reciente despliegue militar que ha realizado Estados Unidos, específicamente en la zona del Caribe, donde han movilizado 10.000 tropas, entre fuerzas especiales, principalmente bajo el apoyo logístico y la operación del Comando Sur de las Fuerzas Armadas», planteó Aguirre.
Asimismo, cuestionó la decisión del magnate republicano de movilizar el portaviones más grandes del mundo, Gerald R. Ford, quien anunció con «bombos y platillos, que el portavión de guerra más impresionante se dirige a las costas de Venezuela del Caribe para, supuestamente, atender algo que lo hemos dicho también de forma reiterada, que está basado en una falsa narrativa, que es el supuesto combate al narcotráfico, a los carteles de la droga y, entre otras cosas, a los grupos transnacionales que Estados Unidos caracteriza como una supuesta amenaza a su seguridad nacional».
Recordó que la historia de Estados Unidos en lo que respecta a las intervenciones militares está plagada de falsas narrativas instaladas para agredir la soberanía de los países. «Lo hizo en el caso de Vietnam, con la supuesta guerra contra el opio, lo hizo en el caso de Iraq, bajo el supuesto contexto de armas de destrucción masiva que poseía Saddam Hussein; lo hizo en el caso de Afganistán, bajo el supuesto combate al terrorismo y a las fuerzas talibanes y Al-Qaeda. Es decir, lo que hemos visto ha sido una falsa narrativa instalada en la historia de Estados Unidos, que termina siendo una burda justificación, una excusa que, realmente, hoy en el mundo no se traga tan fácilmente, pero nosotros estamos en el deber de señalarlo», señaló.
¿Y por qué decimos que es una burda justificación y afirmación? Porque ha sido más que expresado y evidenciado que el 85% de las personas que van desde América Latina a Estados Unidos transitan por el Pacífico y no por el Caribe. Esto ha sido reconocido por los gobiernos de Colombia. Esto ha sido reconocido por gobiernos como el de Ecuador, el cual no es muy afín a la posición de defensa de los principios de la soberanía regional y, además, en el informe reciente de la Comisión de las Naciones Unidas del Deporte de Drogas, donde señala dos cosas importantes, el porcentaje del tránsito de la droga que va de este continente a Estados Unidos y, en segundo lugar, que declara a Venezuela como un país libre de drogas internas, del cultivo de la hoja de coca y, por supuesto, su procesamiento para convertirlo posteriormente en drogas ilícitas, como la cocaína y otras sustancias», destacó.»
«Entonces, nos damos cuenta que estamos frente a un grave hecho (…) se están cometiendo acciones que van en contravía y, por supuesto, violando las normas más elementales y fundamentales del derecho internacional. Las ejecuciones extrajudiciales que está cometiendo y sumariales que está realizando Estados Unidos en el Caribe bajo los bombardeos y los ataques cinéticos para neutralizar supuestas células del narcotráfico es un hecho de condena pública, es un hecho, por supuesto de flagrante de violación a los derechos humanos y Estados Unidos lo hace impunemente bajo la mirada complaciente de muchos países, inclusive de instancias regionales que deberían pronunciarse en torno y respecto a este tema porque, lo hemos dicho también en varios espacios, indistintamente de que se pueda comprobar o no de que estas personas son traficantes de droga, o están cometiendo alguna actividad ilícita, presuntamente ilícita, en las aguas del Caribe, nadie tiene ni puede abrogarse el derecho a realizar este tipo de ejecuciones, porque, además, existe un principio del derecho internacional que es el principio del derecho también de los países, que es el principio de proporcionalidad del uso de las fuerzas», argumentó.
No obstante, destacó la unidad y resiliencia que ha demostrado el pueblo venezolano frente a las constantes agresiones perpetradas por Washington.
«El pueblo venezolano ha estado durante muchísimos años siendo objeto de distintos tipos de agresiones políticas, económicas, diplomáticas, militares. Frente a cada una de estas agresiones que ha utilizado el imperialismo en sus planes contra Venezuela, la respuesta del pueblo ha sido la misma, y ha sido la unidad del pueblo venezolano, la reafirmación de su carácter dependiente de país soberano y de pueblo rebelde, que no se duplica antes de las distintas agresiones que ha sufrido en carne propia como pueblo, como sociedad, en distintas formas, en distintos niveles», expresó.

87% de los venezolanos rechazaría una intervención militar extranjera
Aguirre señaló que ante la operación psicológica ha activado la administración de Trump «para ensayar la respuesta social, medir la opinión pública internacional, medir los factores de política interna y cómo eso se reagrupa frente a distintos escenarios», el pueblo venezolano ha permanecido unido, a pesar de sus diferencias ideológicas, lo que en «términos políticos es algo muy importante».
«Hay una encuesta recientemente que señala que el 87% de los venezolanos rechazaría una intervención militar extranjera. Un 7-8% no sabe, no responde y un tanto 2% estaría de acuerdo con la idea o la idea alocada de aventurarse militarmente en Venezuela», mencionó.
Agresión contra Maduro generaría un «incendio en Venezuela»
Durante la conversación con La Mañanera, El director de El Ciudadano, Javier Pineda Olcay le consultó a Gabriel Aguirre sobre qué podría ocurrir en Venezuela en caso que se produjera un agresión o el asesinato del presidente Nicolás Maduro y si se evidenciaría un escenario de «normalidad» como plantea María Corina Machado y el sector de la extrema derecha venezolana que aboga por una intervención militar del país caribeño.
El activista por los DD.HH. respondió que habría que «preguntarle a los pueblos del Medio Oriente si con el asesinato de Saddam Hussein, la cuestión en Irak se terminó y se resolvió, habría que preguntar si con el asesinato en Libia de Muammar Gaddafi, la situación. se resolvió y habría que preguntar si con el asesinato de Osama Bin Laden, mejoró la situación en Afganistán».
Señaló que el impacto que tendría una acción de este tipo está muy claro en la historia e indicó que en «el pueblo venezolano solamente generaría un incendio generalizado en la región y en el país propiamente».
«El pueblo venezolano tiene la característica de ser un pueblo que es rebelde, que por supuesto defiende los principios de autodeterminación, que por supuesto tiene muy claro el camino de la existencia, e indudablemente en una eventual agresión de este tipo va a ser imposible que la cuestión pueda controlarse (…) ellos piensan que cualquier acción y operación militar va a ser una operación de extracción, además así lo han dicho también, pero está más que claro que en Venezuela el espíritu el espíritu de nuestro pueblo es indómito y rebelde (…) yo me remito a lo que ha sido la historia de nuestro país. En Venezuela jamás ha existido dominio alguno y esta no va a ser la primera oportunidad en la que esto ocurra. Estamos seguros que el pueblo venezolano siendo fiel a su principio y a lo que dice la primera estrofa de nuestro himno nacional «Gloria al bravo pueblo», esa sería la forma como se expresaría nuestro pueblo», enfatizó.
Sin embargo, dejó en claro que ni los dirigentes ni el pueblo del país caribeño han levantado la bandera de la guerra.
«Venezuela jamás ha levantado las banderas de guerra. Venezuela siempre ha levantado las banderas de paz. Inclusive en estos momentos tan difíciles Venezuela sigue convocando a la paz, al diálogo, a la negociación, a la posibilidad de resolver los problemas en solución política, pacífica, negociada, pero con profundo respeto de la soberanía nacional, respeto de los valores democráticos consagrados en la Carta Democrática de las Naciones Unidas. Esto es precisamente lo que ha aclamado nuestro pueblo. Ahora, quienes piden, quienes están tocando tambores de guerra, tendrán que responder frente a la historia, frente a lo que pueda suceder en nuestro país. Esa es la gran verdad», cerró.
A continuación, puedes ver la entrevista completa en la emisión de este jueves 30 de octubre de La Mañanera.

