Presidente mexicano cancela su visita a EEUU tras discutir por teléfono con Trump

El muro fronterizo con México, una de las más polémicas promesas de campaña de Donald Trump, parece ser el motivo principal de la cancelación de la visita del presidente Enrique Peña Nieto a Estados Unidos. Así lo dejaron entrever funcionarios gubernamentales que bajo condición de anonimato, revelaron al diario The Washington Post detalles de una tensa conversación entre ambos mandatarios el 20 de febrero, en la cual llegaron a un punto muerto mientras discutían de la barrera limítrofe.

Según las fuentes, Peña Nieto le pidió a Trump que afirmara públicamente la postura de México de que no pagaría por el muro, pero este último se negó a ceder. Uno de los funcionarios dijo al periódico que Trump «perdió los estribos» durante la llamada de 50 minutos, y agregó que el líder del Ejecutivo estadounidense estaba «exasperado y frustrado» porque pensaba que la expectativa de Peña Nieto era irracional.

En la víspera, la Casa Blanca confirmó la cancelación de los planes para recibir al jefe de Estado mexicano. Ambos dignatarios coinciden en que ahora no es el momento adecuado para la primera visita del presidente mexicano desde que Trump asumió el cargo hace más de un año, apuntó un empleado de la Casa Blanca que insistió en mantener el anonimato.

Peña Nieto ya canceló una reunión planificada con Trump en enero de 2017 por las diferencias sobre el muro fronterizo y la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que el gobernante estadounidense amenaza con abandonar si no logra un nuevo acuerdo favorable a Washington. Posteriormente, ambos se reunieron en el marco de la cumbre de líderes del G-20 en julio, en Alemania.

La barrera que el magnate inmobiliario insiste en levantar entre ambas naciones para, supuestamente, contener la emigración ilegal, es una de sus promesas de campaña más divisivas y fuente de disputa en la relación bilateral.

Desde que se lanzó a la carrera por la Casa Blanca, Trump repite que obligará al país vecino a pagar por la construcción del muro, algo considerado por México un insulto y lesivo a la dignidad nacional.

Recientemente, la administración republicana presentó un proyecto de ley sobre la reforma migratoria, en la cual solicitó 25 mil millones de dólares para del muro.

Agencias