AP revela complot de Guaidó y Trump para perpetrar golpe de Estado en Venezuela

El plan para perpetrar un golpe de Estado en Venezuela fue orquestado por el presidente  de la Asamblea Nacional (AN) en desacato, Juan Guaidó, junto con el gobierno de Estados Unidos  (EE.UU) y sus países aliados de América Latina, reveló un informe elaborado por The Associated Press (AP).

El documento titulado Diálogo secreto permitió coalición anti-Maduro, señala que el dirigente del partido de extrema derecha Voluntad Popular (VP) viajó «discretamente» a EE.UU., Colombia y Brasil para presentar la estrategia opositora de «convocar manifestaciones masivas» ante la juramentación del presidente Nicolás Maduro para el período 2019-2025, que se realizó el 10 de enero ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).

Esta información fue suministrada por el ex alcalde de Caracas y prófugo de la justicia venezolana Antonio Ledezma, mientras que otro dirigente opositor indicó que Guaidó salió de Venezuela por tierra hacia Colombia con la finalidad de “no atraer la atención” de funcionarios migratorios.

Según AP, “ la construcción de consenso” entre los sectores de la oposición venezolana “fue cuesta arriba”, lo que ameritó «sesiones prolongadas» de envío de mensajes de texto, así como el uso de intermediarios para transmitir mensajes a Leopoldo López, mentor de Guaidó.

López se encuentra bajo arresto domiciliario  por dirigir un plan desestabilizador, ejecutado en 2014 y que dejó un saldo 43 muertos y más de 800 heridos.

El 4 de enero, un día antes de que Guaidó saliera del anonimato político y asumiera la presidencia de la Asamblea Nacional controlada por la oposición, los cancilleres de 13 países del Grupo de Lima dijeron que no reconocerían el segundo sexenio de Maduro.

Este  anuncio «puso a la Casa Blanca a correr para no quedarse rezagada», revelaron a AP un exfuncionario estadounidense y un asistente legislativo que estuvo en contacto cercano con el equipo de asesores de seguridad nacional.

Posterioremente, durante una reunión celebrada en diciembre en Bogotá Guaidó reveló su plan de auto proclamarse presidente interino durante una manifestación  convocada para el 23 de enero, fecha en la que se conmemora en Venezuela el fin de la dictadura de Marco Pérez Jiménez.

Sin embargo, “el suspenso duró hasta horas antes de que se proclamara”, dijo un diplomático latinoamericano del Grupo de Lima que  solicitó el anonimato.

“Algunas facciones moderadas quedaron rezagadas o preferían moverse más despacio, temerosas de que una jugada audaz provocara un nuevo fracaso a la oposición. Al final, las diferencias se reconciliaron sin que surgieran a la luz pública” y finalmente el diputado Guaidó se auto proclamó «presidente encargado» ante la supuesta “ilegitimidad” de Maduro, durante un acto inconstitucional y de nulidad jurídica, celebrado el 23 de enero frente a un grupo de opositores.

Apoyo de Trump

La investigación va más allá y revela que la decisión de «confrontar directamente» a Nicolás Maduro solo fue posible gracias al sólido apoyo del gobierno de Donald Trump, que  instruyó a un grupo de gobiernos latinoamericanos de derecha al reconocer a Guaidó.

Sin embargo esto “no fue una tarea fácil, debido a la desconfianza que Estados Unidos despierta en América Latina tras las intervenciones militares estadounidenses durante la Guerra Fría”, recuerda la agencia de noticias.

Asimismo,entraron en juego  las amenazas del mandatario hacia Venezuela, ya que incluso llegó a afirmar que la «opción militar» estaba sobre la mesa para responder a la crisis venezolana.

Durante su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, el republicano criticó abiertamente a Maduro y consultó con los líderes latinoamericanos «sobre la posibilidad de una invasión militar”.

«Las naciones del hemisferio se percataron de que tenían en Estados Unidos un presidente dispuesto a encarar una crisis a la que gobiernos anteriores habían restado importancia debido a sus limitadas implicaciones para la seguridad nacional estadounidense», dijo Fernando Cutz, exasesor de seguridad nacional para los gobiernos del ex presidente Barack Obama y del propio Trump.

«Trump personalmente ha desatado buena parte de esto (…) En cada conversación que ha tenido con líderes de América Latina desde que asumió la presidencia, menciona Venezuela. Eso ha movido muchas opiniones «, dijo Cutz a AP.

En paralelo a EEUU, el gobierno de Canadá, mediante su Canciller Chrystia Freeland, también jugó un rol protagónico en la maniobra golpista contra el presidente  Nicolás Maduro. La diplomática habría conversado con Juan Guaidó previo a la juramentación del jefe de Estado ante el Tribunal Supremo de Justicia ,  y le ofreció apoyo para «confrontar al líder socialista».

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