Una lista de compras milenaria revela cuándo fue escrita la Biblia

“Tráeme aceite, harina o marcha para tal sitio”, estas son algunas de las escrituras que ha descubierto un grupo de investigadores en el desierto de Judea

Por B GS

12/04/2016

Publicado en

Literatura / Tendencias

0 0


“Tráeme aceite, harina o marcha para tal sitio”, estas son algunas de las escrituras que ha descubierto un grupo de investigadores en el desierto de Judea. Una “lista de la compra” escrita a mano que arroja luz sobre el alto nivel de alfabetización 600 años antes de Cristo y que contemplan la posibilidad de que algunos textos bíblicos se escribieran antes de la caída de Jerusalén en el 586 a.C.

Letras inscritas en la cerámica descubiertas en una excavación de una fortaleza en Arad, Israel y fechado alrededor del 600 a.C.

Letras inscritas en la cerámica descubiertas en una excavación de una fortaleza en Arad, Israel y fechado alrededor del 600 a.C. (Michael Cordonsky/Israel Antiquities Authority)

Así lo apunta un estudio elaborado por un equipo interdisciplinar de la Universidad de Tel Aviv y que publica este lunes la revista científica PNAS, que analizó los fragmentos de cerámica con inscripciones encontrados en la fortaleza de la antigua ciudad cananea de Arad, en el desierto del Neguev, en el sur de Israel.

Los investigadores y expertos en textos bíblicos se preguntan desde hace décadas cuál fue la extensión de la Biblia hebrea elaborada antes de la caída del reino de Judá -y con él de Jerusalén- en manos del monarca babilonio Nabocodonosor II en el 586 a.C.

11

“La Biblia no fue compuesta en tiempo real, peor probablemente fue escrita y editada más tarde. La pregunta es, ¿cuándo exactamente?”, comenta el matemático Arie Shaus a Gizmondo.

“Muchos estudios aseguran que en el período del Primer Templo (de Salomón, destruido por esa dinastía babilonia) había un nivel muy bajo de alfabetización, por lo que no hubo razón para transcribir textos bíblicos”, explica a Efe Arie Shaus, doctorando de la Universidad de Tel Aviv y uno de los principales autores de la investigación.

Sin embargo, a fin de contrastar esas teorías, el equipo analizó las inscripciones aparecidas en los fragmentos de cerámica conocidos en el argot arqueológico como ostracón, que habían sido hallados previamente en la fortaleza de Arad por la propia Universidad, en excavaciones que comenzaron en los años 60 del siglo pasado.

Dicha fortaleza, de pequeñas dimensiones, con apenas 2.000 metros cuadrados, y que según lo expertos albergaba en la antigüedad entre 20 y 40 soldados, estaba situada en los confines del reino de Judá con el reino de Edom, más al sur.

2222

Los investigadores la datan unos 600 años a.C., un turbulento período que precedió al Primer Exilio de los judíos en la entonces Babilonia. “Se trata de un período muy cercano a la destrucción del Templo de Jerusalén”, subrayó el investigador. Allí, en la fortaleza, se hallaron un centenar de estos fragmentos, probablemente escritos por escribas profesionales.

Las inscripciones reflejan normas y directrices cotidianas

El equipo elaboró un modelo basado en algoritmos que analizó 16 inscripciones bien conservadas y permitió deducir con un alto nivel de probabilidad que pertenecían a 18 textos diferentes, escritos al menos por seis autores.

Pero los escritos mostraban también instrucciones más sofisticadas para el movimiento de tropas y el registro de gastos de avituallamiento, lo que según los autores refleja que existía en ese período un alto nivel de escritura en toda la cadena de mando -desde los comandantes hasta los administradores del regimiento- y señalan la existencia de profesionales de la escritura.

“Si analizas los textos con detenimiento llegas a la conclusión de que todo el aparato del Ejército era ilustrado y podemos presumir que en el reino había un sistema educativo que permitió no sólo a los sacerdotes y escribas, sino a muchas otras personas poder leer y escribir”, subraya Shaus.

433

La existencia de un elevado nivel de alfabetización unos 600 años a.C. llevó a los autores a preguntarse si este hecho se puede relacionar con una posible primera versión escrita del Pentateuco e incluso de otros libros tempraneros de la Biblia.

“Tenemos razones para creer que esta habilidad implicó la existencia de textos bíblicos puesto que hubo un público que podía apreciar estos escritos”, argumenta.

Y sin adentrarse demasiado en el terreno de los expertos en la Biblia, concluye que por aquella época pudieron haberse escrito textos como el Libro de Josué, Jueces, Samuel o Reyes, algunas de las composiciones bíblicas que configuraron la piedra angular de la teología de este reino israelita.

Fuente: LaVanguardia

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones