Canal 13 y TVN: chiste repetido

La Tercera de esta tarde publica que Nicolás Acuña renunció a su cargo como director de programación de TVN y podría ser reemplazado por Pablo Morales. La Segunda en tanto cuenta que el ex gerente de programación de Chilevisión se iría al gobierno a hacerse cargo de la Secom.

Pues bien. Acuña no renunció por sus propios medios, sino que más bien llegó un acuerdo ad portas de ser auditado por sus últimas decisiones, el sobrevalor de los servicios contratados de sus amigos y familiares, especialmente a su esposa la actriz Daniela Ramírez, y la pésima gestión con un resultado de cero aciertos. Eso sin contar la camarilla de amigos que llevó a ocupar asesorías sin tener idea de televisión, cobrando jugosos cheques cada mes y sin conocer siquiera íconos de la pantalla como “La Dimensión Desconocida”.

Morales por su parte rechazó hace una semana el puesto de la Secom pues es un animal de tele y es ahí donde quiere estar. Y ojo que no es lo único que en este tiempo le han ofrecido a nivel estatal, pero él se guarda porque no le interesa ir a hacerle la pega a Carmen Gloria López quien, por cierto, está más sola que el Mamo Contreras en el Hospital Militar.

Morales podría mejorar la crisis que vive TVN pues tiene una estrategia para hacerlo y un currículo que lo avala pero sus cercanos le han hecho ver que ese barco se hunde a paso agigantado y con la cero autocrítica que es capaz de tener la señora López, trabajar con ella sería un suicidio mediático. Así al menos señala uno de ellos.

Pero la crisis de la televisión no termina ahí, esta tarde además se conocieron nuevos despidos en Canal 13, una cifra cercana a 40 personas que, en su mayoría provienen de prensa. Y en este punto quiero detenerme pues es cierto que muchas son las razones que han llevado a la televisión a vivir esta crisis a nivel macro, pero insisto sin temor a parecer majadera, más allá de los cambios mundiales de la industria o los vaivenes propios de la era digital, lo nuestro es más bien un pésimo manejo de gente inoperante que no ha sabido tomar decisiones acertadas a tiempo.

Vamos por parte, lo de TVN ya no resiste análisis y si bien es cierto que en los próximos días Michael Müller y Bonini también dejarían el canal estatal antes de correr el riesgo de pasar por auditorías vergonzosas y sin contar además con el respaldo de la señora López , quien simplemente no se lleva con el mandamás del área deportiva.

Y eso cierto, esos cambios podría reflejar una intención honesta de mejorar la señal pública como pareciera serlo también la salida de Acuña, pero mientras el señor Solari insista en mantener a Carmen Gloria López a la cabeza de la pantalla del siete no hay forma de que la situación decante positivamente. En los próximos días además se esperan nuevos despidos, una vergüenza. A todas luces.