Todo queda a la conciencia y a la capacidad de raciocinio

Informaciones falsas reciben 70% más retuits que las veraces

Atrás quedaron los mensajes de paz y armonía acompañados de bellos dibujitos de San Nicolás

Un mensaje mañanero despertó a los usuarios venezolanos de la red social Twiter este 23 de enero.

“Hoy es un día de mucha información y también de los fakes news. Humilde recomendación: no crea en todas las cadenas, no crea en todos los audios que le llegarán del hijo del primo, del cuñado, del sobrino que está en Miraflores muy cerca de Maduro o en la AN muy cerca de Guaidó”.

El tuit llegó desde @omairalabradorm, cuenta administrada por la periodista del mismo nombre, que cumple funciones como directora del diario venezolano La Nación y como docente de la Universidad de los Andes.

La comunicadora social ofrecía de esta manera una oportuna sugerencia a sus coterráneos, que desde hace muchos años y con mayor énfasis en los últimos quince días, se han visto silenciosamente atacados por una avalancha de noticias de dudosa veracidad que les llega a sus dispositivos móviles, computadoras o tabletas.

Exhortan a venezolanos a no creer en todo lo que les llegue por redes sociales, ante proliferación de Foto Web.

Y es que el 2019 se inició muy movido políticamente para los venezolanos. Atrás quedaron los mensajes de paz y armonía acompañados de bellos dibujitos de San Nicolás, el tierno Niño Jesús y los simpáticos muñequitos de nieve que saltaban de una cuenta a otra durante el mes de diciembre.

El ambiente y las corrientes de opinión comenzaron a cocinarse lentamente desde el último semestre de 2018 con dos fechas claves: el 10 de enero: toma de posesión del segundo mandato presidencial de Nicolás Maduro y 23 de enero: reimpulso de la lucha de calle de la oposición para derrocar al actual mandatario.

Ambos acontecimientos han sido decisivos para que las llamadas redes sociales se inunden de todo tipo de información en cualquier cantidad de formatos y estilos, sobre las cuales los usuarios desprevenidos no tienen manera de comprobar su veracidad.

Todo queda a la conciencia y a la capacidad de raciocinio e interpretación de quien las lee y las observa.

Este tipo de situaciones, con la alta influencia de las noticias falsas, se vive en todas partes del mundo.

Hoy afecta de manera especial a los venezolanos por la compleja situación política, social y económica que les ha tocado enfrentar.

Foto Web.

La periodista Luisana Colomine, en un reciente artículo de opinión,  aseguró que las noticias falsas que circulan por las redes ha llevado a muchos usuarios de la red whatsaap, a  separarse de los grupos en los que participan, alegando como único motivo “me retiro por salud mental”.

Es que son muchas las consecuencias que puede traer una noticia falsa: estrés, nerviosismo, mal humor, toma de decisiones apresuradas o equivocadas y hasta enfermedades físicas y mentales, según han advertido especialistas en el área de salud.

Y esto simplemente porque una noticia que recibimos en la mañana y que damos como cierta, minutos más tarde es desmentida o contrastada por otra que tal vez sea más falsa que la anterior.

Sobre este particular y para tratar de comprender la gravedad del asunto, por el alcance que tienen en la actualidad las noticias falsas o los llamados “bulos”, un grupo de investigadores del Massachusetts Institute of Technology (MIT) apoyados por la red social Twiter, realizó un estudio cuyos resultados dio a conocer la revista Science y que publica en su edición de este 23 de enero de manera resumida el diario El País de España.

Foto Web.

El bulo es una falsedad articulada de manera deliberada para que sea percibida como verdad. El término en inglés hoax, con el que también es conocido, se popularizó principalmente en castellano al referirse a engaños masivos por medios electrónicos, especialmente Internet.

Según esta investigación las informaciones falsas reciben un 70% más retuists que las veraces, es decir que los usuarios las comparten mucho más entre sus seguidores, ayudando a multiplicar las mentiras y la confusión.

Del análisis pormenorizado, de 126.000 afirmaciones difundidas en Twitter entre 2006 y 2017, los estudiosos del MIT descubrieron que las mentiras además triunfan porque suelen provocar respuestas de temor, indignación y sorpresa.

“Las informaciones falsas  se difunden significativamente más lejos, más rápido, más profunda y ampliamente que las verdaderas en todas las categorías de información y los efectos fueron más pronunciados para noticias políticas falsas”, dicen las conclusiones de la investigación.

“Las mentiras políticas no solo se comparten más, es que corren como pólvora: alcanzan más de 20.000 personas casi tres veces más rápido de lo que tarda el resto de las noticias falsas en llegar a 10.000 individuos”, según calcularon los autores del trabajo.

Los investigadores también hicieron un descubrimiento sorprendente: los usuarios que difunden noticias falsas, las que llegan más lejos, no tienen cuentas importantes o muy seguidas. Al contrario,  tienen menos seguidores, siguen a menos personas, son menos activos y llevan menos tiempo en Twitter que aquellos que difunden informaciones veraces.

Otras noticias de interés:

https://www.elciudadano.cl/ciencia-tecnologia/whatsapp-pone-a-funcionar-servicio-contra-noticias-falsas/07/11/

 

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones