Pico de la tercera ola

Regreso a clases, «en el peor momento»

El sector poblacional de menores de 18 años comienza a mostrar un alarmante incremento en el número de contagios y hospitalizaciones por COVID

Por APRO/El Ciudadano

El retorno a las clases presenciales este lunes 30 se da en el “peor momento”, porque se conjuntó con el pico más alto de la tercera ola del coronavirus.

Así, el amplio sector de menores de 18 años –millones de niños y adolescentes que no reciben todavía la vacuna contra el virus y que no están contemplados para recibirla–, comienza a mostrar un alarmante incremento tanto en el número de contagios como de hospitalizaciones, al extremo de que algunos hospitales pediátricos prenden sus focos rojos y lanzan llamados de alerta.

Inmunológicamente descalificados

Andrés Castañeda Prado, coordinador de las causas de Salud y Bienestar de Nosotrxs, comenta preocupado:

“Es el peor momento para regresar a clases presenciales. No estamos inmunológicamente preparados para hacerlo. Por un lado, estamos en el pico más alto de la tercera ola de la pandemia. Y por el otro, los niños y adolescentes que regresan a las aulas son una población particularmente muy vulnerable porque no ha tenido acceso a la vacuna«.

Claro que urge regresar a clases, de eso no hay ninguna duda, pero no justamente cuando se está incrementando el número de personas infectadas y además predomina la variante Delta, más contagiosa que las variantes previas y que incluso afecta a personas que ya se habían contagiado anteriormente”, expresa.

Remarca que “la positividad es más alta ahora entre los menores de edad. Y esto ocurre en México y en otros países. Estamos viendo más niños contagiados y más niños que están llegando a los hospitales. Esto se debe a que, repito, no están vacunados y a que en toda la población también se incrementaron los contagios”.

Cifras récord

Las cifras más altas de contagios, muertes y hospitalizaciones de los menores de edad ocurrieron a finales de julio pasado y principios de agosto, según datos de la Secretaría de Salud, actualizados al 15 de agosto y analizados por Serendipia, una iniciativa independiente de periodismo de datos.

Señala el más reciente reporte de Serendipia:

“Según las cifras de evolución de la pandemia en menores de edad, en el último mes se han contagiado miles de niñas, niños y adolescentes a diario, algo insólito hasta el momento. Los datos también indican que se están rompiendo los récords de hospitalizaciones y muertes de menores de edad desde julio de este año”.

El pasado 26 de julio, ejemplifica, fue el día en que más niños y adolescentes se contagiaron con COVID: hubo 451 contagios de niños entre seis y 11 años de edad; y mil 8 contagios de adolescentes entre 12 y 17 años.

“Esto quiere decir que el número de casos positivos en menores de 18 años se incrementó a niveles sin precedentes a finales de julio de este año”, asegura el reporte.

Puedes leer: Puebla, dispuesto a vacunar a los niños que ganen amparos

Hace también la suma del total de menores contagiados desde el inicio de la pandemia: 87 mil 378 adolescentes de 12 a 17 años; 36 mil 534 niños de seis a 11 años; y 22 mil 381 menores de seis años.

Y sobre el incremento en las hospitalizaciones de menores de edad, da las siguientes estadísticas: los días que más menores de seis años ingresaron a hospitalización fueron el 27 de julio y el 1 de agosto de 2021, fueron 23 niños de cero a cinco años de edad en cada día. Mientras tanto, el número más alto de hospitalizaciones en niños de seis a 11 años ocurrió el pasado 26 de julio, con 11 menores hospitalizados ese día.

Igualmente, las hospitalizaciones de personas entre 12 y 17 años “se incrementaron más que nunca a principios de agosto”, cuando las cifras oscilaron de 16 a 25 hospitalizados diarios.

El total de hospitalizaciones desde el inicio de la pandemia es el siguiente: 3 mil 601 menores de cinco años; mil 404 de seis a 11 años; y 2 mil 298 de 12 a 17 años.

Y respecto al incremento en la mortalidad, refiere que el pasado 26 de julio se registraron tres muertes de adolescentes de 12 a 17 años, cantidad que sólo se había visto en cinco días del año pasado y en dos días de comienzos de este año, cuando el segundo repunte pegaba más fuerte.

Te puede interesar: Puebla, Chiapas y Veracruz, en el sótano de cobertura de vacunación

En cambio, las cifras de muertes entre los menores de cinco años ahora son más bajas en comparación con las que hubo durante algunos días del invierno pasado, cuando se registraban entre tres y cinco muertes diarias.

En números totales, desde el inicio de la pandemia en México han muerto 731 menores de edad por causas relacionadas con el COVID. Y la tasa de letalidad en esa población no vacunada, de 0 a 17 años de edad, es de 0.5%, concluye el reporte de Serendipia.

Algunos hospitales pediátricos ya empiezan a resentir estos incrementos, como el Hospital del Niño Morelense, cuyo director, Fermín Morales Velazco, indicó que el contagio en esa población indefensa se incrementó 40% en la entidad, por lo que el nosocomio ya planea ampliar sus espacios para enfrentar la creciente demanda de hospitalizaciones por COVID.

Exclusión infantil

Por su parte, Castañeda Prado señala que aunque el virus demuestra ser “menos agresivo en los menores de edad que en los adultos”, esto no significa que no haya menores gravemente afectados.

“Esto es muy importante recalcarlo: hay niños y adolescentes con afectaciones muy graves. Debemos tenerlo en cuenta. No le restemos importancia por el hecho de que entre los adultos es mayor el número de contagios y muertes”, dice.

Luego advierte: “En otros países, como Estados Unidos, algunos hospitales ya empiezan a saturarse de menores de edad. Allá los médicos están preocupadísimos por la gran cantidad de niños que están llegando a las salas de urgencia”.

¿Esto puede ocurrir en México?

Sí, claro, ya hemos visto que lo que ocurre primero en otros países luego sucede en el nuestro. Incluso podemos verlos como una especie de bola de cristal que muestra nuestro futuro. Y si ese problema lo están teniendo ahorita en Estados Unidos, que ya tiene a 57% de su población completamente vacunada, pues con mayor razón puede ocurrir en México, donde sólo 35% de la población tiene el esquema completo.

También puedes leer: Niñas y niños: los impactos de un sector vulnerado por la pandemia

“Otro dato importante: en otros países ya se aprobó la aplicación de la vacuna Pfizer para los adolescentes de 12 a 17 años, en base a estudios que respaldan su seguridad. Y aparte están en proceso de aprobar el biológico para los menores de 12 años”.

¿Y aquí en México, para cuándo?

Aquí los menores de edad simplemente no están contemplados en la estrategia de vacunación del gobierno. A diferencia de lo que ocurre con la población adulta, a la que se le viene vacunando de acuerdo con un calendario por edades, a los niños y adolescentes mexicanos los dejaron fuera, no se les incluyó en ningún calendario. El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, dice que no hay ningún fundamento para vacunarlos.

¿No resulta contradictorio mandarlos a las aulas sin haberlos vacunado?

Es más bien una falta de consideración hacia los niños, tomando en cuenta que la vacuna no nos protege tanto contra la enfermedad, pero sí nos protege de morir o de caer gravemente enfermos en el hospital.

 FOTO: Alejandro Rodríguez/CUARTOSCURO.COM

Recuerda suscribirte a nuestro boletín

📲 bit.ly/2T7KNTl
📰 elciudadano.com

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones