La bancada demócrata se opone a su nombramiento

Protestan nominación de Kavanaugh como juez de la Corte Suprema de EE. UU.

Donald Trump nombró a Kavanaugh para ocupar una vacante vitalicia en el máximo tribunal estadounidense. Los críticos señalan que este es el candidato de "ensueño" para los sectores mas conservadores

Por Chevige González Marcó

10/07/2018

Publicado en

Estados Unidos

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Un “No rotundo” fue lo que este martes manifestaron activistas y líderes políticos de Nueva York ante la nominación que hizo el presidente Donald Trump del juez conservador Brett Kavanaugh, de 53 años, para ocupar la silla que dejará Anthony Kennedy en la Corte Suprema de Justicia.

Decenas de manifestantes tomaron la plaza de Foley Square, en Manhattan, para denunciar que la confirmación de Kavanaugh sería una seria amenaza contra los derechos reproductivos como el aborto y otras protecciones a trabajadores, inmigrantes y la comunidad LGBTI. El Máximo Tribunal del país, además de interpretar y hacer cumplir la Constitución, toma decisiones sobre el futuro de muchas protecciones de ley.

“No solo se trata de los derechos reproductivos. Con él no habrá justicia en Estados Unidos y tenemos que hacer lo que esté en nuestro poder para frenar este nombramiento”, comentó la defensora del pueblo Letitia James, quien criticó a Trump por promover sus intereses personales y su visión conservadora. “Es antiético y muy peligroso y no podemos permitir que Trump tome esta decisión cuando está siendo investigado”.

Letitia James, defensora del pueblo de Nueva York, rechaza la nominación del juez Kavanaugh. Foto: Web

Asimismo, la congresista Carolyn Malone hizo un llamado a los legisladores en Washington para que, al menos, eviten que se apruebe el nombramiento antes de las elecciones congresionales de noviembre, donde los demócratas esperan ganar la mayoría en las dos cámaras del Congreso.

“No podemos permitir que este presidente retroceda al país usando a la Corte. Necesitamos que el Congreso frene esta nominación, porque es importante que la Corte siga siendo un organismo independiente y no una extensión de la Casa Blanca”, dijo la líder política neoyorquina. “Ese es el tipo de tiranía que la democracia debe evitar”.

Heidi Sieck, cofundadora de la organización Vote Pro Choice, que vela por la libertad de los derechos reproductivos de las mujeres, calificó el intento de Trump como “un terrible nombramiento”, y advirtió que el Presidente no puede pasar por encima de las leyes que ya existen ni del sentir del pueblo.

El presidente del condado de Brooklyn, Eric Adams, le recordó al presidente Trump que alguien que está siendo investigado no tiene autoridad moral para elegir a un juez vitalicio que va a influir en decisiones que perdurarán por décadas.

Trump llevará la corte «a la edad de piedra»

La congresista Yvette Clark, presente en la actividad, pidió a las comunidades que se unan contra el nombramiento de Kavanaugh y hagan sentir sus voces. “Tenemos que movilizarnos, porque si no lo hacemos Trump va a llevar a esta Corte a la edad de piedra y se van a revertir todos los logros que hemos conquistado, no solo por nuestra generación sino por generaciones futuras”, dijo.

El gobernador Andrew Cuomo también se sumó a la protesta y puso en duda la imparcialidad con la que actúa el juez nominado por Trump. “Como miembro de la Corte Suprema, Brett Kavanaugh sería un golpe devastador a los valores estadounidenses. Kavanaugh es un conservador extremo con un claro historial partidista. Pondría en peligro nuestros derechos y prioridades democráticas, incluida la Ley de Asistencia Asequible, protecciones para el medio ambiente, organizaciones laborales, los derechos LGBTI y las protecciones de Roe v. Wade (decisión de la corte de 1973 sobre el derecho al aborto)”.

“En Nueva York estamos tomando medidas para defender nuestros valores progresistas, incluida la lucha por volver ley estatal las protecciones de Roe vs. Wade, tomar medidas para proteger los sindicatos, promover los derechos LGBTI y promulgar la política ambiental más fuerte de la nación”, agregó el Gobernador.

La fiscal estatal, Barbara Underwood, también manifestó su oposición con el nombramiento en el alto tribunal promovido por Trump, advirtiendo que la labor de esa institución es llevar el país a ser una sociedad más justa y equitativa.

“Parece que el candidato del presidente Trump ha sido elegido por su potencial para hacer retroceder décadas de protecciones para mujeres, minorías raciales, estadounidenses LGBTI, trabajadores y otros grupos marginados, así como el principio fundamental de igualdad de justicia ante la ley”, dijo la Fiscal.

La cuestionada Asociación nacional del Rifle alabó la nominación de Kavanaugh. Foto: Web

Kavanaugh fue al Senado a buscar apoyo

Posando sonriente ante las cámaras, el juez Brett Kavanaugh inició este martes la búsqueda de apoyo en el Senado para un puesto vitalicio ante el Tribunal Supremo. Su eventual voto se enmarcará en la creciente polarización del país y la acritud entre demócratas y republicanos

Acompañado del vicepresidente, Mike Pence, Kavanaugh se reunió con algunos de los principales líderes republicanos del Senado, incluyendo al líder de la mayoría, Mitch McConnell, y al presidente del Comité Judicial, Chuck Grassley.

Los demócratas opuestos a Kavanaugh están cortejando activamente a las senadoras republicanas Susan Collins, de Maine, y Lisa Murkowski, de Alaska, para debilitar el voto. Sin embargo, ambas senadoras enviaron hoy claras señales de que tomarán su tiempo para revisar su historial antes de decidir su eventual voto.

Tomando en cuenta que la presencia de Kavanaugh en el Tribunal Supremo inclinará a la corte más hacia la derecha en el espectro político –con grandes repercusiones en dictámenes que regirán la vida nacional por generaciones-, su historial jurídico será sometido a un extenso escrutinio.

El líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, afirmó durante una conferencia de prensa que su bancada escudriñará el historial de Kavanaugh, como los republicanos lo hicieron en el caso de la jueza Elena Kagan.

Los demócratas solicitarán en concreto los voluminosos archivos de Kavanaugh durante su paso entre 2001 y 2006 como uno de los principales asesores del entonces presidente George W. Bush, quien lo nombró como magistrado del Tribunal de Apelaciones del Distrito de Columbia, sede de la capital estadounidense.

Pero, salvo que surja alguna sorpresa que ponga trabas a su confirmación, es casi seguro que Kavanaugh jurará como próximo juez del Tribunal Supremo a tiempo de la sesión de otoño.

Los republicanos dominan el Senado con un total de 51 escaños, contra 49 de los demócratas y, debido a un cambio en 2017 en los reglamentos parlamentarios respecto a nombramientos judiciales, sólo necesitarán 51 votos para confirmar a Kavanaugh.

Aún si el senador republicano por Arizona, John McCain, se ausenta debido a su extenso tratamiento médico por cáncer, el partido podrá apoyarse en el voto de Pence para confirmar al juez en su nuevo cargo.

El juez soñado por los sectores mas reaccionarios

El nombramiento de Kavanaugh acerca cada vez más a los conservadores a su deseo de llenar las cortes con jueces afines, y en él han encontrado a un magistrado que defiende la tenencia de las armas consagrada en la Segunda Enmienda de la Constitución, entre otras causas conservadoras.

Chris W. Cox, director ejecutivo del Instituto de Acción Legislativa de la Asociación Nacional del Rifle (NRA-ILA, por su sigla en inglés), elogió el “impresionante historial” de Kavanaugh a favor de las armas y urgió su pronta confirmación.

El grupo “Judicial Crisis Network” lanzó una campaña publicitaria a favor de Kavanaugh y piensa invertir 10 millones de dólares en los próximos meses, en lo que será un voto definitorio para el Senado.

La Fundación Heritage, que lleva años luchando contra “Obamacare”,  elogió el nombramiento de Kavanaugh y ridiculizó los ataques y “obstruccionismo” de los demócratas.

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