El mandatario otomano aseguró tener «archivos y documentos» que prueban claramente que funcionarios franceses estuvieron involucrados en apoyar al régimen hutu contra los tutsis
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, acusó a Francia de cometer el genocidio de Ruanda, en el cual fueron asesinadas unas 800 mil personas en abril de 1994, en uno de los genocidios más alarmantes de la historia reciente de la humanidad y en la que los medios de comunicación también tuvieron un papel determinante.
Y es que Erdogan, durante un discurso televisado durante un acto realizado en Ankara, ha aseverado tener «archivos y documentos» que prueban claramente que funcionarios franceses estuvieron involucrados en apoyar al régimen hutu en la masacre contra los tutsis y los hutus moderados.
Desde el 2016, el gobierno de Ruanda aseguró que realizaría los esfuerzos necesarios para «investigar a fondo la responsabilidad de los funcionarios franceses respecto al genocidio».
A pesar que las acciones violentas iniciaron el 7 de abril de 1994, la violencia se extendió durante tres meses, donde casi un millón de personas perdían la vida a machetazos en el llamado país de las mil colinas.
En este hecho, los medios de comunicación jugaron un papel fundamental en la gestación del genocidio. Hubo periódicos que fomentaron la división, con meses de antelación y la Radio Televisión Libre de las Mil Colinas enviaba mensajes de odio para que se promovieran estos hechos.
“Hace 25 años 800 mil personas fueron asesinadas en el genocidio de Ruanda y los autores eran franceses. Y los franceses quieren darnos lecciones”, enfatizó Erdogan.
Uno cornología de lo ocurrido / Fuente: La Jornada
No sólo Francia sería uno de los implicados en el caso de la masacre en Ruanda, también la mala gestión de la crisis realizada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) y parte de la comunidad internacional, incluyendo a Estados Unidos, fue un escándalo a escala planetaria.
Vale recordar, además, que los colonos franceses y belgas, promotores el etnicismo y que apoyaban a los hutus, forzaron un éxodo masivo de ruandeses a países vecinos en la década de los 60 y 70.
Tensiones entre Francia y Turquía
Sin embargo, Francia ha acusado a Turquía de ser un Estado violador de Derechos Humanos debido a lo que han denominado como el «genocidio armenio», hecho ocurrido en 1915 y donde se estima que perdieron la vida entre 1,2 y 1,5 millones de personas.
Esto ocurrió durante el desarrollo de la Primera Guerra Mundial, en el que las tropas del entonces Imperio Otomano eran aliados de Alemania y Austria-Hungría.
París junto a otros países de occidente, así como algunos historiadores, han declarado el 24 de abril como un día de conmemoración a este suceso, lo que ha hecho que las relaciones entre estos dos países sea mucho más tensa.
«Al rendir homenaje a las víctimas del genocidio armenio, Francia es fiel a sus valores», señaló el miércoles el primer ministro francés, Édouard Philippe.
Sin embargo, Turquía, país que nació luego del desmantelamiento del imperio Otomano, ha rechazado la categorización de «genocidio» en este caso, alegando que se produjeron masacres recíprocas en un contexto de «guerra civil y hambre», dejando muertos en ambos bandos.
En este sentido, Erdogan recalcó, una vez más, su opinión de que nadie ha podido probar nada sobre ese «genocidio» y señaló que los archivos sobre los sucesos de 1915 son «totalmente accesibles».
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