El crimen del obrero, la impunidad del patrón


Una muerte humana a manos de la policía pagada por el Estado de Chile, defensor del imperio del empresario Anacleto Angelini, tiñó de sangre mayo. Angelini es el titular del grupo económico AntarChile, controlador y accionista -entre otros conglomerados- de Copec, Abastible, Celco, Pesquera Eperva, Corpesca y de Bosques Arauco. A pesar de ello aún no se pronuncia, tras una avara negociación laboral, que llevó a que Rodrigo Cisternas de 26 años, joven padre y obrero, terminara siendo acribillado en Curanilahue por disparos provenientes de las armas de Carabineros de Chile, luego de que más de 5.000 trabajadores de Bosques Arauco se movilizaran en busca de un trato y pago justo.


angelini

CISTERNAS PRESENTE

Los obreros tenían en mente parar la carretera por 10 minutos, pero las fuerzas de control social, violentas, esperaron sólo unos segundos para comenzar a cargar el ambiente de lacrimógenas, disparar y destruir los vehículos de los obreros que estaban en el lugar, abriendo fuego con sus armas y convirtiendo el escenario en una verdadera batalla campal, según los testigos oculares de la represión, que no se percataron hasta minutos más tarde de la muerte de su amigo y compañero de trabajo.

Sandra Trafilaf de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales (Anamuri), grafica las aspiraciones de Rodrigo: “Lo que él pedía era un sueldo que le alcanzara para tener una vivienda digna junto a su esposa y a su hijo de cinco años. Demandaba que se eliminara el falso concepto de subcontratación y que Angelini, amparado en sus empresas fantasmas, diera la cara”.

El hombre más acaudalado de Chile, explotador ambiental y laboral, a quien Frei saluda con un respetuoso “don Anacleto”, vive en Londres y obtuvo durante el año pasado 2 mil 850 millones de dólares en ventas sólo en el rubro de la celulosa, acumulando una ganancia neta de 619 millones de dólares, lo que equivale a casi 2 millones de dólares diarios en ingresos, según el equipo de Tribuna del Bío–Bío.

“Cisternas, uno de los tantos trabajadores humildes de este país, quiso cambiar el rumbo de una historia sembrada de denigración y represión, se subió a uno de los vehículos cargadores de la empresa y sin más ánimo que frenar la locura de balazos y bombas lacrimógenas en las que estaban envueltos, las emprendió contra quienes aún actúan con plena impunidad”, sentencia Trafilaf en Rebelion.org.

Mayo se teñía de sangre obrera y sindicalista, Curanilahue de banderas chilenas con cintas negras para ir a despedir a Rodrigo, mientras por la noche y junto a una velatón en su nombre, un lienzo recordaba la tarde del 3 de mayo la política de acción represiva estatal: “Para los ricos: perdonazo. Para los pobres: balazo”.

CELCO EL AVARO, EL TIRANO

La empresa de Angelini siempre se ha querido ahorrar plata, para con ella agasajar a su gerencia y al jefe en Inglaterra. Claros ejemplos son los gastos en los que no ha incurrido para dar solución a problemas ambientales, invirtiendo más en tecnologías para su autoabesticimiento energético y expansión forestal, despreocupándose así de sus trabajadores mediante las empresas contratistas para coronarse actualmente como industria top mundial en exportación de celulosa, estando entre sus principales devoradores de materia prima, China, Italia y Corea del Sur.

Las condiciones en que trabajan gran parte del sector obrero forestal son de carácter precario. Las lluvias y fríos del invierno y el pasar metido en la montaña helado hasta los huesos, son parte del relato de varios trabajadores que accedieron a hablar con El Ciudadano, hombres de diversas edades que sirven en las filas de Forestal Valdivia, una de las tantas empresas en el que está presente el poder de Anacleto.

“En las faenas que son bastante duras con mucha lluvia y frío casi no tenemos descanso. No hay mucha seguridad tampoco para trabajar, y lo malo es que incluso está habiendo trabajo infantil del que los contratistas de seguro no informan a Celco”, nos cuenta uno de los trabajadores mientras viajamos en un bus interurbano por la Provincia de Valdivia.

“No es que estemos exagerando hijito, pero uno está semanas en la montaña pasando hambre, muchas veces resfriado y sin un remedio, cortando pino tras pino, eucaliptus tras eucaliptus, desenganchando y deslomándose como animal y trabajando horas extras que después no se pagan, mientras ellos siguen ganando. Si no he renunciado es por mi nieto que cuida mi señora. No quiero que sea obrero”, nos cuenta con lágrimas en sus ojos otro de los explotados trabajadores de Arauco.

Y es que Celco hace llorar al sur de Chile, la depredación forestal no para: Los patios de pino de Angelini cruzan las regiones por la cordillera de la costa; montajes de las forestales para atribuir atentados al pueblo Mapuche; y un grupo empresarial ampliamente cuestionable que comienza a romper la paciencia de varios parlamentarios como Monsalve (PS), Aguiló (PS), Escobar (IND), Jiménez (IND), Enríquez-Ominami (PS), Sunico (PS) , Pacheco (PS), Rossi (PS), Robles (PRSD), De Urresti (PS) y Alinco (PPD), de quienes se esperan acciones tras su declaración pública en conjunto en que expresaron sin pelos en la lengua que:“La afirmación de que la empresa (Bosques Arauco) siempre ha estado y estuvo abierta
al diálogo es falsa. En los últimos 10 años no ha existido diálogo como iniciativa de la empresa, este sólo ha surgido como respuesta a las movilizaciones de los trabajadores. Fue la movilización de los trabajadores la que obligó a la empresa a dialogar después de años en que las condiciones laborales de los trabajadores son precarias e injustas”.

“Son 14 sumarios sanitarios enfrentados por Bosques Arauco y las empresas asociadas del rubro forestal durante el año 2006, no cuentan con comedores adecuados para su gente, existen malas condiciones sanitarias y los accidentes sufridos por los trabajadores son múltiples”, declaran los parlamentarios. Es decir, la inversión en la gente por parte de la empresa, siempre es postergada, hasta que hay una desgracia que lamentar. La avaricia gerencial de Angelini, es evidente.

GUARDIAS PRETORIANAS

No es la primera vez que el Estado de Chile presta sus fuerzas “defensoras del pueblo” a los intereses del empresariado. Aún está fresco en nuestra memoria el día de la batalla naval en Mehuín. Tenso momento en que la Armada escoltara a un remolcador de la empresa Ultramar destinado a hacer estudios para sacar el ducto celuloso de San José a la costa pesquera.
“Marineros a sus lanchas” Con esta arenga se inició el movimiento en la tranquila costa de Mariquina tras enterarse los pescadores del lugar que la latente amenaza tomaba forma .Los dirigentes del Comité de Defensa del Mar coordinaban por radio, otros pescadores combatientes se preparaba a recibir órdenes para abordar su frágiles embarcaciones; un tercer equipo proveía de combustibles y comida a aquellos que se encontraban en el mar; mientras las mujeres y los niños cumplieron roles importantes en este conflicto, preparando alimentos y oficiándolas de mensajeras que recorren las casas de la caleta para informar a los coordinadores lo que está ocurriendo. “Nos da pena que ocurra esto: los chicos salieron del mar con un frío que no podían sostener una cuchara. De ahí en adelante, las mujeres de los pescadores dejamos de lado los hijos y la casa, todo por apoyarlos a ellos”, señaló a El Ciudadano, Berta Rodríguez.

Tras el enfrentamiento marítimo, se difundió un video en el que claramente se puede ver cómo los marinos dispararon contra las embarcaciones y a la vez ocuparon un pistón con fuerte presión para tratar de dar vuelta las embarcaciones, mas todo quedaría en absoluto silencio.

El diputado Fernando Meza tras la contienda declaró que “la Comisión (de medio ambiente) está indignada por los hechos cometidos por la Armada. Aquí hay responsables que tienen que dar la cara. No es posible que la Armada de Chile esté haciendo esfuerzos por hundir pequeñas naves de madera con naves de fierro, como acabamos de ver en el video. No es posible ver a oficiales de la Armada realizando disparos en dirección a los pescadores artesanales”.

Debido al video difundido en Internet, la Comisión decidió citar dentro de 15 días a la ex ministra de Defensa, Vivianne Blanlot, y a la ex titular de la Secretaría General de la Presidencia, Paulina Veloso, para que expliquen de dónde provino la orden hacia la Armada, cuestionamiento para el que Eliab Viguera, vocero del Comité de Defensa del Mar, siempre tuvo una respuesta en relación al desconocimiento de lo que ocurría con los operativos policiales en la localidad a los que luego se sucedieron los navales: “Si el gobernador no los envía ¿quién los envía?”, preguntó irónico Viguera.

La presencia policial y de equipos entrenados “especialmente” para reprimir en favor de las metas empresariales, se ha vuelto común. La época en que generales romanos tenían la usanza de escoger entre las filas, una fuerza privada de soldados para que trabajaran como sus escoltas, es una realidad que golpea actualmente.

LA MONEDA SE LAVA LAS MANOS

“Yo quiero decirlo con mucha claridad, la muerte de Rodrigo Cisternas es la derrota de todos” expresó causando desazón entre los cercanos a Cisternas, la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, quien demoró varias horas en pronunciarse, para finalmente no identificar a los responsables de la ejecución.

Más dura resultó la declaración del ministro del Interior, Belisario Velasco, quien sentenció sin clemencia: “El actuar de Carabineros en Arauco ha sido en cumplimento de sus deberes. Ellos tienen la obligación de, frente un delito fragante, actuar de acuerdo de sus reglamentos», justificando así y dando un respaldo a la institución que nuevamente vuelve a manchar sus manos con sangre.

Como era de esperarse, la sociedad civil responsable junto a integrantes del Juntos Podemos Más, hicieron lo debido: presentaron una demanda el día 6 de mayo donde se acusa al Gobierno por la violación de los convenios 87 y 98 de la OIT, relativos a la libertad sindical y el resguardo del derecho a negociar colectivamente.

«Nuestra demanda va en vista de los siguientes actos violatorios sobre libertad sindical, protección del derecho de negociar colectivamente, y del derecho a huelga cometidos por el gobierno de Chile», reclama el recurso.
La coalición exige además la renuncia del Ministro del Interior, y del gobernador de Arauco, autoridades encargadas de mantener fluida relación con las fuerzas policiales.

Es así que los Poncio Pilatos tendrán que responder ante tribunales, claro está si se logra notificarlos, Velasco por ser el jefe de jefes y sus soeces declaraciones y el gobernador de Arauco, Álvaro Rivas, quien antes de que los dirigentes comunicaran a los obreros que la negociación había fracasado, se tomó el privilegio de anunciárselos, lo que “desencadenó la ira y por ello hay una responsabilidad política que debe investigarse”, precisó el dirigente de la zona Arauco, Juan Fonseca.

Finalmente, el Codepu (Corporación de Promoción y Defensa de los Derechos del Pueblo) también tomó una posición frente al trágico desenlace. El organismo precisó que la investigación judicial relacionada con el asesinato de Rodrigo Cisternas, en el contexto de la reivindicación por mejoras salariales, debe ser vista por la Justicia Ordinaria y no la justicia de fuero militar, la que no da garantías de imparcialidad e independencia, expresa el secretario de la organización, Federico Aguirre.

LOS MACUCOS

Tras los incidentes y como “coincidencia”, se produjo la renuncia del presidente del directorio de Celco, Alberto Etchegaray, hecho que salió de inmediato a ser aclarado por el gerente de asuntos corporativos de Celco Valdivia, Charles Kimber, quien aseguró a medios de prensa que “el cambio de directorio fue anunciado hace semanas, y no guarda relación con los incidentes en la Octava Región”.

Cabe preguntarse si Etchegaray ya vislumbraba lo que se venía al conocer la negativa posición a la negociación que mantenía la empresa, y simplemente decidió hacerse a un lado al no compartir posiciones. Celco ya tiene una imagen que invita a dudar tanto de sus palabras como de su actuar, es una realidad de la que sólo ellos son los responsables.

Según la revista Forbes, el patrimonio del empresario ítalo-chileno supera los 2 mil 500 millones de dólares. Y aunque hoy su fortuna no está cuantificada, su nombre integra la lista de los 25 latinoamericanos más ricos. Según el periódico mapuche Azkintuwe, Angelini ha tejido una extensa red de contactos que, a sus 91 años, incluye a personeros de todos los colores políticos, destacando sus vínculos con Andrés Zaldívar Larraín, accionista de Pesquera Eperva (Angelini) y principal promotor de la Ley de Pesca (“Ley Corta”) del año 2001, y ex empleado de Angelini; Eduardo Frei Ruiz-Tagle, senador por Valdivia (DC), accionista de Sigdo Koppers (SK), empresa contratista de Celco y promotor de proyecto Planta de Celulosa “Valdivia”, construído por SK; entre otros muchos personeros del mundo político nacional.

BATALLA EN MEHUÍN

Se podría decir así que el padrino Anacleto tiene los brazos más largos de Chile, contando con peones dentro de La Moneda, en el Senado y en distintos espacios de interés para sus maniobras.

Celco miente y como medio lo hemos desenmascarado continuamente. En Valdivia durante la construcción de la planta sufrieron un accidente radiactivo que no se informó en la prensa nacional, afectando a sus trabajadores, hecho que denunciamos oportunamente tras acuciosa investigación. En Nueva Aldea (Itata, VIII Región) otro trabajador fue gravemente herido por otro accidente radiactivo al que trataron de bajar el perfil. En Mehuín trataron de comprar la conciencia mediante sospechosas visitas domiciliarias realizadas por personal de carabineros de civil a casas de dirigentes mapuche y mails que revelan una millonaria negociación por más de 4 millones de dólares con el presidente de la Federación de Pescadores Artesanales de Valdivia (Fipasur), Marcos Ide. La lista de hechos de poca monta no termina aquí, llegando incluso hace poco tiempo a coartar la libertad de expresión de un grupo de comunicadores de la ciudad de Chillán, logrando cancelarles el programa informativo medioambiental que salía al aire por radio Diva, entre muchas otras maniobras desarrolladas.

ACUERDOS TRAS CISTERNAS

Con Rodrigo observando desde el cielo el futuro del desarrollo del sindicalismo en Chile, las partes negociantes llegaron a un acuerdo final que estableció un aumento de 65 mil pesos para cada trabajador en su sueldo base, reajuste que se hará efectivo de forma retroactiva a contar del 1 de mayo y es equivalente a un 12% para las remuneraciones más altas y del orden del 52% para las más bajas y en el caso de los conductores de camiones, se acordó fijar un sueldo base de 135 mil pesos y pago de horas extraordinarias.

La negociación en que intervino el arzobispo de Concepción, Ricardo Ezzati, fue calificada “como un triunfo de la racionalidad” y dio el visto bueno a 21 de los 23 puntos demandados por los trabajadores forestales, siendo los beneficiados unas 8.000 personas.

Según fuentes de Bosques Arauco el convenio equivale a unos 400 millones de pesos mensuales, que para sus ejecutivos es un “costo muy alto”, sin embargo el dinero que recibe Angelini por todas sus operaciones en Chile explotando clases sociales y medio ambiente, no merece comparación alguna.

Para el economista Marcel Claude, “en el caso de los beneficios sociales son casi inexistentes. Por ejemplo, el empleo generado por el sector forestal chileno “no ha sido suficiente para generar polos de desarrollo en las zonas donde se asienta la industria”.

Una prueba de ello, señala el economista, “es la relación entre el empleo y la producción, la que se ha reducido de manera importante en los últimos cinco años. Según cálculos propios dicho coeficiente para el caso de la producción de pulpa química se ha reducido visiblemente, pasando de 12,6 hombres por mil toneladas en el año 2000 a 10,8 hombres en el año 2004”.

Esto muestra que cada vez se utilizan menos trabajadores para realizar el proceso productivo, haciéndose intensivo en el uso del capital, lo que demuestra el escaso beneficio social que la comunidad puede esperar de este tipo de industrias.

Otro dato que entrega el especialista se vislumbra cuando se compara la evolución del empleo respecto a la producción de madera aserrada: “Mientras en el año 2000 4,9 hombres producían mil metros cúbicos, en el año 2004 sólo 3,8 hombres lo hacían”.

Cenda (Centro de Estudios Nacionales para el Desarrollo Alternativo) es claro en su visión respecto a la situación que viven muchos obreros: “Hoy los trabajadores chilenos se ven enfrentados a una ofensiva empresarial amplia, profunda, sistemática, que cuestiona los principios sobre los que se erige el derecho laboral mismo, que considera anacrónica la existencia de los sindicatos y que busca impedir la negociación colectiva”.
El histórico acuerdo que se consiguió y que costó una vida humana, abre la posibilidad a la negociación interempresas o por bloque productivo, algo a lo que el mundo empresarial teme enormemente y una idea que el sindicalismo chileno deberá llevar a la práctica sin establecer compromiso de amarre con el Gobierno de turno, los empresarios, ni con los partidos. “El sindicalismo debe saber defender con firmeza y claridad sus intereses uniendo los objetivos inmediatos con aquellos ineludibles del mañana, diferenciando a aquellas formaciones políticas que trabajan efectivamente por la emancipación de los trabajadores de aquellas que sólo persiguen servirse del movimiento sindical para satisfacer mezquinos intereses de grupos”, propone el Cenda.

Por Bruno Sommer

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones