La tensa espera del cónclave de la Nueva Mayoría

“Para pedir unidad y disciplina debe haber claridad y liderazgo”

Este 3 de agosto se llevará a cabo el encuentro de La Moneda con los partidos y parlamentarios de la Nueva Mayoría, donde se definirán los lineamientos del llamado segundo tiempo del gobierno de Bachelet. Mientras desde Palacio llaman a la “unidad”, desde el conglomerado piden claridad.

Por Jose Robredo

31/07/2015

Publicado en

Chile / Política / Portada

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“Estamos obligados todos a realizar un esfuerzo de cohesión, de unidad, de respeto mutuo, de fraternidad y de disciplina. Porque es un tarea exigente y requiere un sentido de mayorías, por eso somos una coalición”.

Con este mensaje la presidenta Bachelet llamaba al orden a la Nueva Mayoría en los días previos del mentado cónclave, que reunirá a la mandataria, su gabinete ministerial, las directivas de los partidos y sus parlamentarios con el fin de concretar la agenda y la hoja de ruta para mantener a firme el paso del gobierno en medio de las turbulencias económicas y políticas.

En el encuentro ampliado de la Nueva Mayoría, La Moneda se juega el control del conglomerado, de la agenda política y poder encausar la salida a la crisis política en la que se encuentra sumida, lo que se traduce en una desaprobación histórica en las diferentes encuestas de la plaza. O, al menos, poder usar este encuentro para fortalecer el diezmado diseño comunicacional del gobierno y, a partir de esto, sostener la conducción política del variopinto conglomerado oficialista.

A pesar de las intenciones del gobierno la cosa no será miel sobre hojuelas el próximo lunes, ya que desde los partidos y los parlamentarios se pide claridad respecto de la segunda etapa del gobierno de Bachelet.

En cuanto a las expectativas que genera este encuentro, éstas expresan el grado de tensión que existe en la Nueva Mayoría.

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“Esperamos es que haya un apoyo a la presidenta Bachelet, a su programa y a su proceso de priorización debido al momento económico, y además de mejorar los lazos de comunicación con entre el gobierno, los partidos y el parlamento. Hay un tema de definición política, donde lo lógico sería que los partidos cerremos filas tras el gobierno y el programa para que terminemos bien este período” señala a El Ciudadano el presidente del Partido Radical, Ernesto Velasco.

En este sentido, el presidente de la bancada PC-IC Daniel Núñez nos cuenta que “Tenemos la expectativa de que se pueda ratificar la necesidad de cumplir con todos los compromisos estructurales que hizo la Presidenta en su programa, y que básicamente comprenden la reforma educacional, laboral y la nueva constitución. Son estos los tres compromisos que le dan la razón de ser al gobierno y que, entendiendo las actuales dificultades, pensamos que se pueden hacer ajustes para que en el actual escenario podamos cumplir con las metas”.

El diputado DC, Fuad Chaín, es más incisivo respecto de lo que se busca en el cónclave y relata en conversación El Ciudadano que  “con claridad y liderazgo se puede ordenar la Nueva Mayoría en relación a los objetivos del programa. Hay cosas que no cuestan más plata, entendemos que hay una reducción presupuestaria pero que hay temas que deben implementarse, que son la impronta de este gobierno como es la agenda contra los abusos no requieren mayores recursos del Estado”.

“Espero que no sea un baile de mascaras, que no sean frases de buena crianza. Espero una autocrítica franca; a mi no me gusta la lógica del avanzar sin transar pero tampoco un transar sin parar, debemos encontrar un punto de equilibrio en este sentido” agrega el diputado DC.

Mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Marco Antonio Núñez (PPD) declara a El Ciudadano que “Esperamos que se acuerde el detalle de la agenda legislativa, la hoja de ruta del segundo tiempo del gobierno de la presidenta Bachelet”.

EL REALISMO

La sombra del críptico “realismo sin renuncia” de Bachelet aun hace mella en la Nueva Mayoría, principalmente en los defensores del “Programa”, lo que convierte al cónclave en el espacio donde se disputará, finalmente, el grado de morigeración de las reformas.

Al respecto Núñez, ante la posibilidad de que la “realidad” absorba a las promesas electorales, expresa que “no me pongo en ese escenario porque eso implicaría poner fin a este gobierno y serían años donde no habría ninguna gestión política relevante. Eso no es algo que está en la agenda del gobierno, entendemos que el debate está puesto en cual es la forma correcta de hacer las políticas públicas, como podemos impulsar las transformaciones estructurales y tener una dosis de realismo a partir de estos problemas que no estaban considerados en una primera etapa”.

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“Hay bases en los temas laborales y en la reforma educacional que se encuentran descritos en el programa, yo creo que no van a haber problemas en definir una agenda común para comprometer el capital político para sacar con éxito estas reformas” acota en este sentido el presidente de la Cámara, al ser consultado al respecto del futuro de las reformas emblemáticas de este gobierno.

Al mismo tiempo, el diputado PPD agrega que “El realismo sin renuncia significa asumir las limitaciones definidas por el panorama económico financiero internacional, el precio del cobre y los indicadores de crecimiento. Es no renunciar a las promesas programáticas donde se debe priorizar, con criterio, cuales serán aprobadas primero y cuales después”.

En este sentido,  Chaín es bastante directo que sus colegas y señala que “las definiciones políticas que se esperan es tener claro que nos vamos a comprometer hacer en el actual período, lo que no significa una renuncia a los objetivos. Tener claridad cuales son los objetivos del gobierno durante el presente año, cual será la gradualidad que impondrá el gobierno en el programa”.

UNIDAD Y DISCIPLINA

Esta semana, tal como se menciona al principio de esta nota, la presidenta Bachelet instó, casi como cuando una madre llama a terreno a sus hijos, a la unidad y la disciplina de la coalición con miras a este cónclave.  Pero la frase no dejo indiferente a nadie en la Nueva Mayoría.

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Marco Antonio Núñez busca darle un sentido práctico al llamado de atención presidencial y declara que “La unidad y la disciplina debe ser entendida como la búsqueda de acuerdos en una coalición tan amplia como la Nueva Mayoría son claves para el éxito del segundo tiempo del gobierno de la presidenta Bachelet”.

Sin embargo, el DC Chaín entiende que la relación debe ser recíproca, aprovechando de criticar el liderazgo del gobierno, con una especial referencia a la Presidenta, cuando señala que “yo creo que para pedir unidad y disciplina debe haber claridad y liderazgo. Es esto lo que ha faltado en la Nueva Mayoría. El ministro Burgos a generado algo de esto pero aun falta que el gobierno se ponga a tono con definiciones políticas nítidas en todos los ámbitos”.

Si bien menos directo en el mensaje, en el fondo el diputado comunista Daniel Núñez apunta al mismo punto señalando que “esperamos salir con una Nueva Mayoría unida y con una Presidenta encabezando un programa de transformaciones democrática que la ciudadanía anhela y que seamos capaces de responder a la ciudadanía. Será un minuto de ordenamiento y unidad”.

El lunes será el día de resoluciones y de la claridad en la Nueva Mayoría. Finalmente veremos hacia donde navega este buque en en medio de su tormenta.

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