Acuerdo unánime en la Cámara Baja para poner a raya acciones de violencia entre parlamentarios: Tras insultos transfóbicos de Gonzalo De la Carrera

Todos los comités parlamentarios de la Cámara Baja acordaron poner a raya las acciones de violencia en el hemiciclo, a raíz de las agresiones verbales y físicas hacia diputados realizadas por el exrepublicano Gonzalo de la Carrera, quien este miércoles emitió insultos transfóbicos en contra de su par de Comunes Emilia Schneider.

Schneider denunció a de la Carrera, por sus dichos transfóbicos en la sala de la Cámara de Diputadas y Diputados, en medio de una discusión en Sala sobre la inexpropiabilidad de los fondos de pensiones.

Durante el debate, el parlamentario de ultraderecha emplazó a Schneider, achacándole que «le he escuchado dos grandes mentiras diputada, respetando su condición, usted no puede exigir su derecho a abortar porque jamás podrá abortar y tampoco puede exigir su derecho a menstruar».

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El vicepresidente de la Corporación, Alexis Sepúlveda (Partido Radical) -quien justamente hace un mes fue golpeado por el legislador por Las Condes-, explicó que «los acuerdos de comité incorporaron la necesidad y el compromiso de poder avanzar en modificaciones reglamentarias y eventualmente constitucionales, que permitan abordar las reiteradas faltas al reglamento de parlamentarios o parlamentarias».

Cabe recordar que la Segpres se comprometió a darle urgencia a una reforma ingresada tras el incidente anterior, que incluye como causal de cesación del cargo parlamentario el cometer violencia contra sus pares en el ejercicio de sus funciones, pero hasta ahora no se ha precisado si se le pondrá urgencia simple o suma urgencia.

No obstante, ninguna reforma permitirá aplicar sanciones sobre hechos pasados, por lo que se estima que esta será una herramienta más bien disuasiva para evitar que estos se repitan en el futuro.

Antes de que ingrese formalmente la calificación de urgencia a ese proyecto de reforma constitucional, la Comisión de Ética de la Cámara también anunció que analizará cambios al reglamento interno para aumentar las sanciones aplicables en casos como el descrito.

 Cese de cargo a parlamentarios que agredan a otros

Cabe recordar que ayer miércoles, la ministra Secretaria General de la Presidencia, Ana Lya Uriarte, se refirió ese miércoles a los insultos transfóbicos del diputado Gonzalo de la Carrera contra la parlamentaria Emilia Scheneider.

En un punto de prensa, Uriarte señaló que «el diputado De la Carrera hace uso de expresiones totalmente fuera de lo que consideramos opiniones que pudieran acompañar fielmente la dignidad del cargo»

«Nos asombra que el diputado De La Carrera olvide que es un diputado de la República y que como tal debiese ser ejemplo de una buena ciudadanía, de una ciudadanía amable, acogedora y respetuosa“, añadió.

En este sentido, aseveró que – desde el Gobierno – acompañará la denuncia que presentará la parlamentaria, y calificó la actitud de Carrera como «totalmente inaceptable».

“Quisiéramos ser categóricos, nos parece que la conducta reiterada de agresión y maltrato con sus colegas del diputado De la Carrera, tiene que ser un llamado de atención para este Poder del Estado, el Poder Legislativo, pues desde el Ejecutivo nos parece que es una actitud totalmente inaceptable”, puntualizó.

Al respecto, aseveró que el Gobierno pretende colocar con carácter de urgencia el proyecto de reforma constitucional para establecer «el cese del cargo del parlamentario cuando este hubiera incurrido en acciones de violencia».

«Existe una iniciativa parlamentaria para incluir en la Constitución una norma que establezca el cese del cargo del parlamentario o parlamentaria cuando este hubiere incurrido en acciones de violencia y nosotros acompañaremos la tramitación de este. Además, creemos que se deberían activar todas las medidas reglamentarias que sean procedentes”, señaló.

«Quisiéramos ponerle urgencia, para que sea conocido este proyecto de reforma constitucional y con ello, dejar muy en claro que en el Gobierno no admitimos la discriminación, la violencia y en definitiva, el maltrato”, añadió la secretaria de Estado.