Confesión: Julio Borges, la CIA y el ejército colombiano detrás del plan golpista en venezuela

El  gobierno venezolano frustró un intento del golpe de Estado, orquestado por el coronel retirado Oswaldo Valentín García Palomo, con el apoyo de Estados Unidos y Colombia.

El ministro para la Comunicación e Información, Jorge Rodríguez,  mostró este jueves un vídeo con parte de  la confesión de García Palomo, sobre los planes no solo para ejecutar el  intento de magnicidio al presidente Nicolás Maduro el pasado 4 de agosto de 2018,  sino  también un golpe de Estado  planificado para finales de enero y principios de febrero de este año.

El ex coronel de la Fuerza Armada venezolana, que fue capturado el pasado 30 de enero por las autoridades de ese país, ofreció detalles sobre la colaboración que obtuvo de los gobiernos de los Estados Unidos y Colombia para llevar a cabo las acciones golpistas.

En su declaración voluntaria señaló que mantenía conversaciones con un agente de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, y con  un coronel de la Policía Nacional de Colombia alias «Alejandro».

«Hice un contacto en Colombia con una persona de la  CIA y le comenté lo que estaba haciendo en Colombia con Parsifal de Sola-  empresario y activista político de la derecha venezolana- y con un policía nacional de ese país,  y entonces me dieron apoyo«, relató en el vídeo.

Detalles del golpe

El ministro venezolano explicó que las acciones golpistas estaban previstas para  ejecutarse en el periodo comprendido entre los últimos días de enero y los primeros de febrero.

«García Palomo confesó que tenían tres días para dar el golpe militar», indicó.

También reveló que la operación necesitaba reunir un número suficiente de unidades militares, un hecho que no se concretó.

“Si lograban reunir las unidades para tomar el Fuerte Tiuna,  la base aérea La Carlota e interrumpir las comunicaciones en Caracas  y el Palacio de Miraflores, iban a dar el golpe el 27 de enero. Si no lo lograban, las otras fechas previstas eran el jueves 31 de enero o el 3 de febrero”, acotó en rueda de prensa.

Explicó que el golpe fue frustrado porque  los servicios de inteligencia venezolanos  estaban al tanto de las acciones del ex militar y sus nexos con los gobiernos de Estados Unidos y Colombia.

“Toda la operación de penetración de García Palomo a Venezuela fue una operación que veníamos siguiendo desde los servicios de inteligencia del país”, afirmó Rodríguez.

Detalló que los cuerpos de inteligencia y contrainteligencia del Estado venezolano engañaron a García Palomo haciéndole creer que una unidad militar iba a alzarse en Caracas.

“Ellos creían que habría un alzamiento militar (…) Cuando lo capturamos encontramos todos los equipos, brazaletes, armamentos, identificaciones falsas, entre otras cosas”, dijo.

Julio Borges, implicado en intento de magnicidio y planes golpistas

Implicación de la derecha venezolana

El ministro de Comunicación indicó que García Palomo reveló que mantuvo contactos con un empresario venezolano Parsifal de Sola y  el diputado derechista Julio Borges, quien se encuentra prófugo de la justicia por estar implicado en el magnicidio en grado de frustración contra el presidente Nicolás Maduro.

Ambos personajes se encuentran  implicados en el llamado “Golpe Azul”, que se efectuaría el 12 de febrero de 2015 y que contaría con la participación de algunos oficiales de la aviación militar venezolana.

“Queda establecida la relación de García Palomo y Parsifal de Sola en los intentos de golpes de Estado. El policía nacional de Colombia ya fue identificado, que es el enlace del terrorista con Juan Manuel Santos”, añadió.

Durante los testimonios recopilados, García Palomo confesó que el exministro de Petróleo, Rafael Ramírez, la exfiscal de la República, Luisa Ortega Díaz y su esposo, el ex diputado Germán Ferrer,  y el militar Hebert García Plaza– todos prófugos de la justicia- intentaron contactarlo días antes del intento de golpe de Estado.

Iván Duque, presidente de Colombia y Donald Trump

Complicidad de Trump y Duque

El ministro Rodríguez recordó que en varias oportunidades el presidente Nicolás Maduro planteó a  los organismos de seguridad de Estados Unidos y de Colombia la captura de Oswaldo Valentín García Palomo, sin obtener respuesta alguna.

“¿Por qué Estados Unidos ni Colombia atendieron esta solicitud?, porque estaba ocurriendo todo lo contrario, poderes fácticos y gubernamentales de Colombia y Estados Unidos soportaban las acciones del señor García Palomo. Y hubo una actividad intensa a finales del 2018 y principios del 2019. Sabemos las veces que el señor García Palomo entró a Colombia, sostuvo reuniones en Chile, Brasil, Tampas, Miami, Bogotá, por eso las locuras de algunos representantes de la ultraderecha venezolana entre estos días de enero y febrero diciendo que iba a ocurrir algo o que Nicolás Maduro iba a morir”, acotó.

Al respecto,  Rodríguez mostró un vídeo recopilatorio en el que los voceros de la derecha María Corina Machado y  Julio Borges, así como del presidente colombiano, Iván Duque y del periodista de CNN, Fernando del Rincón,  alertaban  sobre los actos violentos que pretendían perpetrarse a finales de enero en Venezuela.

“Iván Duque, Fernando del Rincón y Julio Borges sabían que Oswaldo Valentín García Palomo iba a entrar a Venezuela los últimos días de enero para que se perpetrara el golpe militar en contra del presidente Nicolás Maduro”, aseveró.

Espía en la Guardia presidencial 

Otra de las revelaciones es que el teniente coronel Ovidio Carrasco Mosqueda, quien se desempeñaba como jefe de comunicaciones de la Guardia de Honor Presidencial,  era el contacto de Borges para obtener datos sobre la ruta y horarios del mandatario Nicolás Maduro.

De hecho fue quien informó que el desfile militar se haría el 4 de agosto en la avenida Bolívar para que se produjera el atentado fallido contra Maduro.

Asesinatos selectivos

En su declaración, García Palomo precisó que decidió organizar un golpe contra el gobierno de Nicolás Maduro al conocer que Estados Unidos tenía planes de perpetrar un ataque militar sobre el país que generaría muertos y daños importantes.

Recientemente, había reconocido estar encausando insubordinaciones para retomar la fallida “Operación Constitución” con la que se pretendía cometer el asesinato selectivo de políticos y militares venezolanos para poder ejecutar un golpe de Estado.

También confirmó su relación con los grupos encargados de ejecutar el intento de magnicidio del mandatario venezolano durante el desfile militar del pasado 4 de agosto.

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