Entrevista con Mamdouh Habashi frente a la “Primavera Árabe”

Mamdouh Habashi es ingeniero civil, militante del Partido Socialista de Egipto y vicepresidente del Foro Mundial Alternativo y miembro del Equipo de Investigación Árabe-Africano en El Cairo

Por Cesarius

06/07/2011

Publicado en

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Mamdouh Habashi es ingeniero civil, militante del Partido Socialista de Egipto y vicepresidente del Foro Mundial Alternativo y miembro del Equipo de Investigación Árabe-Africano en El Cairo. Es además un importante compañero y colaborador de Samir Aminuno de los pensadores neomarxistas más destacados de su generación- y una figura clave en la re articulación de la izquierda egipcia. Pudimos conversar con él sobre la Primavera Árabe y cómo ésta va configurando un nuevo panorama global en el cual ya nadie puede ignorar a los movimientos sociales que se han venido convirtiendo en un actor estelar en los nuevos procesos políticos.

-La protesta se expandió como un reguero de pólvora en los países árabes. ¿Cuáles son los elementos comunes que permitieron que la Primavera Árabe se extendiera tan rápidamente en una zona tan extensa?

-Lo único que tienen en común estos distintos países árabes es que todos sufren de dictaduras. Eso es lo único que todos tienen en común, que todos, sin excepción, salvo quizás en el Líbano, han sufrido décadas de regímenes dictatoriales. Según la Organización de Naciones Unidas (ONU), esta es la región del mundo más rezagada en cuanto a la democracia. Aparte de esto, la mayoría de los países árabes tienen diferentes circunstancias, problemas, diferentes tipos de luchas. Diría que las dictaduras son lo único que les une.

Las dictaduras, por su parte, generaron una cultura de dependencia del Norte, principalmente de los Estados Unidos, de sus acuerdos y proyectos. Las dictaduras, además, implementaron completamente la agenda neoliberal, lo cual durante décadas trajo un enorme sufrimiento, empobrecimiento y marginalización del pueblo, más todos los problemas conectados al neoliberalismo.

-¿Qué sectores sociales fueron los que estuvieron detrás de las protestas?

-En un comienzo, las protestas fueron iniciadas por las clases medias, que reclamaban la dignidad propia de todo ser humano para los árabes, así como justicia social. Pero al poco andar, se sumaron al movimiento otras clases, particularmente las clases populares.

-La presencia de diversas clases y sectores sociales en las protestas ¿Significa que estos movimientos presentan contradicciones internas importantes?

-Si, existen contradicciones entre las clases. Tras alcanzar el primer objetivo, que era derrocar al régimen, tras ganar esta primera batalla, comenzaron a emerger grandes diferencias entre las clases sociales y los sectores sociales presentes, que tienen objetivos diferentes. Por ejemplo, en Egipto tenemos cuatro bloques ideológicos y políticos claros, que son la izquierda, los nacionalistas que se hacen llamar nasseristas, los islamistas y los liberales-conservadores. Entre estos sectores existen diferencias, pero también objetivos comunes. Por ejemplo, ante cuestiones sociales, se ve a la izquierda sola en el escenario político, pero cuando se trata de asuntos relativos al carácter civil del Estado se puede ver a la izquierda a la cabeza, pero también a liberales-conservadores y a nacionalistas agrupados en contra de los islamistas. Tampoco puedes dejar de lado al antiguo régimen que aún está en el Gobierno y está tratando de organizar la contrarrevolución.

-¿Cuáles son los objetivos principales de la izquierda egipcia?

-El primer objetivo es buscar la organización del pueblo, lo que significa organizarse para enfrentar las luchas que se vienen. Lo segundo es construir alianzas entre la izquierda, y con otras fuerzas sociales y conservadoras para garantizar el carácter secular de la sociedad y del Estado, lo cual no solamente implica la separación del Estado de la religión, sino también el carácter civil, no militar del Estado.

En estos momentos nos estamos concentrando en posponer las elecciones para así ganar tiempo y poder debatir bien la nueva Constitución que queremos… no podemos aceptar que el nuevo parlamento esté compuesto solamente por islamistas y representantes del antiguo régimen, que son los únicos con el poder financiero para copar las elecciones. Por lo mismo, todos los partidos nuevos y las organizaciones nacidas tras la revolución, requieren de tiempo para llegar a la gente y consolidarse en términos económicos también, porque son todas organizaciones pobres. El tiempo es un tema muy importante. El plan de los contrarrevolucionarios es apurar las elecciones lo máximo posible, para hacerlas en septiembre. Este nuevo parlamento comenzaría entonces a organizar la asamblea constituyente con el antiguo régimen y los islamistas. Este es el principal combate ahora en el período de transición.

-¿Cuál es el peso real de la izquierda en Egipto?

-La izquierda es pequeña, pero gana influencia a medida que pasan los días. No te olvides que los amos de la revolución, los jóvenes, son en su mayoría bastante izquierdistas, pero necesitan unirse a las organizaciones.

-¿Qué opinan de lo que ocurre en el resto de los países árabes ahora, principalmente con la intervención de la Otan en Libia?

Libia, Siria, Yemen, Bahréin, todas estas luchas tienen por objetivo la creación de un Nuevo mundo árabe, uno de sus pueblos. Este es el objetivo principal de todas ellas, pero todas estas luchas son muy diversas. Todos, no solamente la izquierda, están denunciando la intervención de la Otan, porque desconfían de sus supuestas buenas intenciones; no creemos que estén haciendo lo que están haciendo para proteger a los civiles, todos sabemos que persiguen sus intereses particulares y no la democratización de los países árabes.

-¿Cómo afecta a Israel este nuevo escenario?

-La presión sobre Israel va en aumento, están perdiendo a sus aliados principales. Los líderes de Israel declararon que la pérdida de Mubarak era la pérdida de un aliado estratégico. Ahora que está comenzando una nueva era para los pueblos árabes, a Israel no le van quedando más opciones que decidirse a vivir en paz, ya que la presión a su alrededor llevará al aumento de la presión en la sociedad israelí, que pronto demandará una nueva vida, sin la hegemonía de la ideología de EEUU o de la ideología sionista, una vida en paz.

-¿Cuál cree que es el escenario más probable en el mediano plazo para la Primavera Árabe?

-No puedo decir qué pasará. Lo que puedo decir es que un proceso nuevo ha comenzado, el cual ha convertido al pueblo en un factor en esta ecuación, pues el movimiento popular afectará e influenciará toda clase de decisiones que se pretendan tomar. En la ecuación política, este factor deberá ser considerado cuidadosamente en el futuro… creo que el proceso de democratización será largo, no será un asunto de semanas, tomará años luchar por la justicia, la paz y la democracia.

Por José Antonio Gutiérrez

El Ciudadano

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