Análisis de la edificación en altura

Francisco Sabatini, sociólogo y planificador urbano: «Las torres de Estación Central son una tragedia”

La Comisión de Vivienda y Urbanismo del Senado invitó a la ministra del ramo junto a investigadores, alcaldes y representantes de la Asociación de Municipalidades para referirse a la situación que salió a la palestra pública a raíz del problema que afecta a amplios sectores de las comunas más pobladas del país.

Por Gabriel Muñoz

03/05/2017

Publicado en

Chile / Política / Portada / Vivienda

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La ministra de Vivienda y Urbanismo, Paulina Saball, junto al profesor del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales, Francisco Sabatini; el alcalde de Estación Central, Rodrigo Delgado, y el presidente de la Asociación de Municipalidades, Felipe Delpin, asistieron a la sesión de la Comisión de Vivienda del Senado este 2 de mayo en Valparaíso para analizar la edificación en altura y la planificación urbana.

“Se liberalizaron los límites urbanos y no se desarrolló una política en el mercado de suelos. Por ello las torres de Estación Central son una tragedia”, señaló el investigador Sabatini, al tiempo que cuestionaba al alcalde de Estación Central por el retiro del proyecto de Plan Regulador, herramienta que hubiera evitado el problema que se hizo público en ésta y otras 11 comunas del país debido a la existencia de los denominados ‘guetos verticales’.

Según la Cámara Chilena de la Construcción, aún se necesitan 60 mil viviendas sólo en el Gran Santiago. Sin embargo, la nula ética con que actúan las empresas constructoras e inmobiliarias ha llevado al colapso de distintas zonas de la capital, tanto céntricas como de la periferia. “Por ejemplo, en El Volcań 1 se bajó un 40% de la densidad pero las condiciones de vida fueron iguales o peores”, señaló el senador Manuel José Ossandón (RN). “El mercado no es malo, lo malo es la falta de regulación”, remató el también precandidato presidencial.

$80 millones es el gasto promedio que conlleva un plan regulador. Si bien no todos los municipios tienen los recursos para el financiamiento de esta esencial herramienta para la planificación territorial- sólo 148 comunas de las 345 en el país lo tienen vigente- los serios problemas que acarrea el hacinamiento plantean la fuerte necesidad de que el Estado regule lo que el mercado no manda. “Es la demostración que algo no funciona bien, la gente busca vivir cerca del centro”, expresó el presidente de la Asociación de Municipalidades, Felipe Delpin.

Densificar o no

“Somos la comuna con la mayor conectividad de Chile. No estoy de acuerdo en que las personas no tengan espacio para vivir. Pero ellos optan por vivir aquí”, declaró el edil de Estación Central, Rodrigo Delgado, en una declaración que recuerda el tristemente célebre «¿te invité yo a vivir aquí?», expresado por el ex alcalde Jorge Castro frente a las quejas de un damnificado del incendio que asoló  cuatro cerros de Valparaíso en 2014.

A pocos días de celebrarse el Censo, ya se han filtrado ciertos datos que circulaban hace algún tiempo a baja voz y reflejan un problema social preocupante, confirmado por el alcalde Delgado: “La mayoría de los arrendatarios de las nuevas edificaciones de 25, 30 o 40 m2 son inmigrantes, gente que no puede acceder a subsidios y va a seguir buscando estas alternativas porque a pesar de las carencias, el costo sería mucho mayor si viviesen en otro lado”.

El problema es claro. A mayor demanda, se generan conductas poco éticas y absolutamente reprochables. “La especulación ha llevado al hacinamiento de inmigrantes. No es la densificación el problema, sino la precariedad que ésta provoca cuando no hay planificación urbana”, argumentó la ministra Saball .

Al respecto, el senador Carlos Montes (PS) fue enfático: «Hay un tema cultural que debemos asumir. Pero no entra en la agenda política de los presidenciables. Estamos atrasadísimos en velar por el bien común”, apuntó.

Por su parte, el senador Eugenio Tuma (PPD) señaló que “(los ministerios de) Medio Ambiente y Vivienda tienen la responsabilidad y el desafío de densificar con calidad de vida”.

Si bien existe consenso entre los asistentes a la Comisión que los costos, tiempos y trámites asociados a los Planes Reguladores dificultan la existencia de los mismos en la totalidad de las comunas del país, tomando en cuenta que el 87% de la población nacional vive en el hábitat urbano, urge una mayor participación de la ciudadanía en el desarrollo de las políticas que pretenden entregar los lineamientos de cómo solucionar el problema de la vivienda.

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