Pablo Longueira: Su estrecha relación con Patricio Contesse. Por Hugo Fazio

El informe efectuado por el estudio jurídico norteamericano Sherman & Sterling pone al desnudo las estrechos vínculos existentes entre el ‚coronel UDI Pablo Longueira y Patricio Contesse, el gestor de los recursos dirigidos al mundo político desde Soquimich, la empresa controlada por Julio Ponce Lerou. A la sociedad creada por Pablo Longueira receptora de parte de estos fondos, denominada Corporación de Asuntos Públicos, el informe la describe como una corporación usada por la UDI para recaudar fondos, que desde SQM –según su texto- sumaron $133,21 millones.

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El intercambio de correos muestra que Longueira mantenía informado a Contesse de hechos trascendentes para SQM. Uno de los divulgados por la revista Qué Pasa de fecha 10 de agosto de 2010 se refiere a las modificaciones que durante el gobierno de Sebastián Piñera se introdujeron al llamado royalty minero como mecanismo para generar recursos ante el 27F. Longueira remitió al exgerente general el texto que ingresó al Congreso, pidiéndole sus comentarios. En otro de ellos le hizo llegar las opiniones de Ricardo Lagos Weber sobre la materia‚ Pato –le dice Longueira a Contesse- en la reserva de nuestras conversaciones te envío el texto privado que me mandó Ricardo. Llámame después de leerlo para comentarlo. Un abrazo (29/01/16). Sin duda existió una relación entre los recursos proporcionados por SQM a Longueira e información de temas de su interés directo.
Pablo Longueira, en artículo publicado en El Mercurio, presentó su intercambio con Contesse como el acto legítimo de recibir comentarios sobre un tema importante, el royalty minero, de una persona conocedora del tema que trabaja en una empresa poco inclinada a tener que cancelarlo. SQM explota recursos naturales pertenecientes al país  y debería pagar la renta correspondiente por hacerlo. No es difícil entonces entender la preocupación de Contesse y la empresa minera por estar informada del tema y su disposición a recompensar por el servicio otorgado.

Pero hay más, los correos divulgados también se refieren a las tratativas de tramitación de la Reforma Tributaria y que finalizó modificando profundamente el texto original. Los textos revelan que Longueira desempeñó un papel activo en su modificación, cumpliendo una función mediadora entre el en ese entonces ministro de Hacienda, Alberto Arenas, y el senador de la UDI y miembro de la Comisión de Hacienda del Senado- instancia donde se ‚oficializo‛ el acuerdo- Juan Antonio Coloma.

El 7 de julio de 2014, Longueira cumpliendo su compromiso con SQM remitió a Contesse el texto del acuerdo dado a conocer al día siguiente y cuando aún no estaban asegurados las firmas que aparecieron finalmente, particularmente la de la UDI. Solo para ti –señaló el texto de la comunicación-, con la máxima reserva. Lo acabamos de terminar. Un abrazo, Pablo‛. Treinta días después, Longueira se dirige nuevamente a Contesse informándole de la redacción de las indicaciones que se presentaron de común acuerdo entre los participantes en la ‚cocina‛, según la expresión utilizada por el senador democratacristiano Andrés Zaldívar. Pato –le dice- te envío indicaciones a la RT que terminamos anoche con Alberto Arenas por si te son útiles. Un abrazo, Pablo‛ (04/02/16). Estos antecedentes dan nuevos elementos de cómo y quienes participaron en revivir la política de los consensos con la derecha. Coloma reconoció este papel desempeñado por el informante de Contesse y SQM. Dentro de esta reforma –constató Coloma- le pedí ayuda a mucha gente. Una de ella fue Pablo Longueira, me interesaba una opinión específica que él pudiera explorar (05/02/16). Esta, constatan los correos, era la de Patricio Contesse y, por ende, la de Julio Ponce.

El informe de Shearman & Sterling ubica a Longueira en la sección de su texto‚ Hallazgos. Evolución de Riesgo de Soborno, donde describe su trayectoria política. Detalla, un hecho transcendente, que fue ministro en febrero de 2012 cuando el ministerio de Economía anunció una iniciativa destinada a ‘Relanzar la Industria chilena del Litio’, incluida la licitación CEOL de 2012. Constata su comunicación frecuente con Contesse y otros en SQM respecto de las leyes y las propuestas que podrían afectar a SQM, incluido el texto propuesto de la Ley de Reconstrucción, Regalías, Cálculos fiscales para las rentas mineras, y las modificaciones propuestas al Código de Aguas.

Pero la historia de Longueira viene de mucho más atrás, la recordó Francisco José Covarrubias, decano de la Facultad de Artes Liberales de la Universidad Adolfo Ibáñez. Es, escribió, el mismo Longueira que fue presidente designado de la federación de estudiantes de la Universidad de Chile en la dictadura. El mismo Longueira que comandó, en 1986, una turba para atacar a Ted Kennedy cuando vino a Chile. El mismo que, dos años más tarde, comandó otra turba para amedrentar a los nuevos dirigentes elegidos en RN. El mismo al que se le apareció Jaime Guzmán. El mismo que como ministro de Piñera desactivó la agenda procompetividad que elaboró Fontaine. Ese Longueira. El político ‘al que no le gustaba la política’.
«El financiamiento ilegal de campañas –añadió Covarrubias- es una cosa. Si la transacción se cobra en el período de campaña puede ser antiestético, indebido e ilegal. Pero es distinto cuando las relaciones se mantienen en el tiempo. Ello es lo que ocurrió con Orpis, por ejemplo, que se terminó transformando en un empleado de Corpesca. Sueldo a cambio de información. Es lo mismo que ocurrió con Longueira. Ahora lo que le corresponde hacer a la UDI –concluyó- es condenar a Longueira. No hacerlo es volver a transformarse en cómplices pasivos. Transferir información reservada con una contraprestación en dinero es una práctica derechamente inmoral» (06/02/16).

Longueira también fue un receptor destacado de las ayudas reconocidas explícitamente por Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín en el ‚caso Penta‛. Dejaron constancia que se le entregó $100 millones en efectivo, seguramente pretendiendo así en ese momento que no quedara constancia. Longueira no recibió recursos únicamente de SQM y Penta. Su cuñada Ana Carolina Palacios, en sus declaraciones a la Fiscalía, consignó que a petición de Carmen Luz Valdivieso, exjefa de gabinete de Longueira, emitió boletas además a Cencosud, del grupo Paulmann, y al banco BCI, cuyo presidente Luis Enrique Yarur expresó, en su comparecencia ante los fiscales, su identificación plena con la UDI. A su turno, el abogado Nicolas Guiñez, ratificó en su testimonio la emisión de diez boletas «por servicios que no presté a las empresas SQM S.A., Copec S.A, Asociación Gremial de Industriales Pesqueros de la Región del Bíobio, Compañía de Inversiones Río Bueno S.A, Pesquera El Golfo S.A. y Centro de Estudios Nueva Minería Limitada». De acuerdo a su relato Copec, del grupo Angelini, le pagó, $7,5 millones en efectivo, los cuales fueron entregados en la Fundación Chile Justo, creada y presidida por Pablo Longueira (10/02/16) Los testimonios ratifican que las fuentes de dinero eran múltiples.
El informe de la oficina jurídica norteamericana cuantificó que fueron 21 las personas a través de las cuales percibió recursos desde SQM. En el listado figuran un hijo, una concuñada un ahijado, sobrinos, la exjefa de prensa de la UDI, la coordinadora de su campaña electoral, entre otros intermediarios.
El 5 de febrero de 2016, el fiscal regional de Valparaíso, Pablo Gómez, puso visto bueno a la solicitud del Consejo de Defensa del Estado de acceder a los tomos reservados del caso SQM, argumentando la existencia de antecedentes en la investigación que ‚eventualmente pueden configurar delitos respecto de los cuales esta parte tendría legitimación activa‛. ‚Esta legitimación activa‛ –explicitó La Tercera- tendría su origen en que al momento de ocurrido los hechos, Longueira tenía la calidad de senador en ejercicio‛ (09/02/16).
Hasta la divulgación de los correos con Contesse, Longueira en el caso SQM había sido citado a declarar solo por delitos tributarios, considerando las rectificaciones de declaraciones efectuadas por la minera no metálica. Por otra parte, el Ministerio Público lo tiene citado para contextualizar en calidad de testigo en los trámites legislativos propuestos por el gobierno de Sebastián Piñera a la Ley de Pesca. Pero, los correos establecen causales para que el Ministerio Público tome el caso, sin necesidad de contar con la decisión previa del SII que defiende su monopolio de iniciar querellas por delitos tributarios. Permite claramente iniciar querellas por cohecho. ‚Hasta que se hicieron públicos los correos entre el exsenador Pablo Longueira y su amigo el general Contesse, el Fiscal Nacional y su mano derecha en el caso SQM –como señaló El Mostrador-, caminaban lentos pero seguros dentro de la estrategia fijada por el mandamás del Ministerio Público, conocido como doctrina Abbott. Esto implicaba que el caso que indaga a la minera controlada por Julio Ponce Lerou se acotaba a delitos tributarios y que, por tanto, para avanzar en la persecución son condición sine qua non querellas del Servicio de Impuestos Internos‛ (10/02/16).