Políticas

Udicosas: Juan Antonio Coloma dijo que los resultados de las encuestas fueron un «tusunami para el gobierno»

El senador gremialista se refirió a los resultados de las encuestas Adimark y CEP como un golpe al gobierno y un empujón a la baja de respaldo para el gobierno. Pero, cabe preguntarse, si para el oficialismo es un tsunami ¿Qué analogía corresponde a las crifras de la alianza que los posicionaron por los últimos lugares?

Por Jimena Colombo

04/12/2014

Publicado en

Chile / Política

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 coloma

Para Juan Antonio Coloma las cifras de evaluación de las encuestas CEP y Adimark son un “Tsunami para el gobierno” de la Presidenta Michelle Bachelet. El senador hace esta delicada reflexión a partir del cambio en la agenda de la Mandataria ocurrido el día de ayer, cuando se trasladó a Santiago en plena visita a la región del Bío Bío. Hace la analogía recurriendo a aquel episodio tan recordado por algunos,  sólo con la intención de sumergir al gobierno en una situación que ellos mismos ven con más claridad. Porque al repasar las encuestas podemos apreciar que su otrora candidata presidencial, la amable y dulce Evelyn Matthei quedó como una de las peores evaluadas junto a la otra mujer símbolo del gremialismo, Ena Von Baer. Coloma dice que el capital político de Bachelet «se esfumó». Además hace un llamado a los ministros y el sector oficiliasta de no culpar  a las problemáticas del Metro ni las campañas del terror. Campañas que muchos ministros atribuyen a la derecha cuando comienzan con sus discursos anti-reformas.

El senador UDI dijo entender la sensación de pánico del gobierno por este supuesto tsunami provocado por las encuestas de opinión pública. Agregó que la baja en la aprobación ciudadana “no se puede atribuir a las fallas del metro o a la campaña del terror” que el oficialismo denuncia cada vez que desde la derecha opositora se ponen a disparar contra la gestión de Bachelet y sus ministros.

Coloma agregó que “es la ciudadanía la que está reaccionando de manera muy diferente”, y agregó que llegó “la hora de la verdad para el Gobierno”. Para luego rematar con la siguiente afirmación: “Si ante estos datos duros el Gobierno sigue igual y a lo más cambia algunos nombres, pero no cambia un rumbo con cordura, va a querer decir que el Gobierno eligió por oírse a sí mismo y no a la gente. Por el contrario, si genera un punto de inflexión, si deja para otra oportunidad  una mejor reflexión el conjunto de reformas que está haciendo, querría decir que el Gobierno está escuchando a la gente”.

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