“El CNCA, como parte del Gobierno, ha tomado el compromiso de respetar íntegramente los estándares nacionales e internacionales en esta materia. Por ello, estamos impulsando un proceso de consulta indígena, que procura incorporar las voces de todos los pueblos interesados, a lo largo de todo el país, actuando mediante sus instituciones representativas, a través de procedimientos de consulta adecuados a cada una de sus particularidades”, dijo la ministra de Cultura, Claudia Barattini.
A su vez, José Ancan, aseguró que “en el Consejo nos hemos jugado por aprovechar las fortalezas de nuestros equipos regionales, que tienen mucha cercanía con sus comunidades. La Consulta Indígena es un ejercicio de descentralización, un ejercicio democrático que debe traducirse en todas las etapas y que busca concluir con un Ministerio avalado por la ciudadanía”.
El asesor jurídico Jorge Contesse abordó, en este encuentro, las bases legales de la Consulta Indígena. Explicó que esta se regirá según las disposiciones del Convenio 169 de la OIT, documento que impone al Estado la obligatoriedad de este procedimiento para la creación del futuro Ministerio de Cultura. El abogado aseguró que este mecanismo de participación está regido por el concepto de buena fe y que “las regiones van a alimentar el proceso que se diseñó y que permitirá la adaptación a la realidad regional de este instrumento”.
Tras la entrega de estos primeros lineamientos, los encargados de desarrollar la Consulta Indígena en regiones participarán en una capacitación colectiva, que se realizará durante la segunda quincena de julio.
Proceso en marcha
La Consulta Indígena que lleva adelante el CNCA busca conocer e integrar la visión de los pueblos originarios en el proyecto de ley que crea el futuro Ministerio de Cultura. Este proceso está en marcha desde el 16 de junio pasado, cuando fue publicada la resolución que le da inicio en el Diario Oficial.
Luego de la capacitación de los funcionarios que representarán al Consejo, se iniciará la búsqueda de acuerdo pleno entre los pueblos convocados y los equipos regionales para la forma de implementación de cada proceso de consulta.
En esta etapa se debe convocar directa y abiertamente a los representantes de asociaciones y comunidades de los nueve pueblos indígenas reconocidos (aymara, quechua, atacameño o licanantay, kolla, diaguita, rapa nui, mapuche, yagán y kaweskar), además de las comunidades afrodescendientes de la Región de Arica y Parinacota. Los pueblos originarios adoptarán sus propias formas de representatividad y organización en este proceso. En esta fase se producirá un primer encuentro entre las comunidades representadas y las direcciones regionales del CNCA y ambas partes consensuarán el diseño de la consulta.
Posteriormente, comenzará un periodo de deliberación, con el objetivo de lograr compromisos entre el CNCA y los Pueblos Indígenas en lo que refiere al articulado del ante-proyecto de Ley que crea el Ministerio.