"Autonomía para Vivir" se reunió con intendente Orrego

Colectivo sobre discapacidad en Chile invita al Estado a articular una “mirada intersectorial”

Daniela Alburquerque, del Centro de Trastornos del Movimiento (CETRAM), y Solange Vallejos, director ejecutiva de la Fundación Crescendo, visitaron el estudio de El Ciudadano para aportar una mirada crítica sobre este tema casi invisible en torno a adultos discapacitados que carecen de garantías en lo más básico, como es contar con un tercero que los alimente.

Por Matías Rojas

27/05/2016

Publicado en

Chile / Portada / Salud

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Diversas organizaciones bajo el colectivo «Autonomía para Vivir», interiorizadas en la problemática de personas con discapacidad que requieren de una alta dependencia social, se reunieron ayer con el intendente metropolitano Claudio Orrego para abordar una propuesta común que una a diversos actores, tanto de gobierno como de la sociedad civil, en pos de resguardar los derechos de un segmento de la población vulnerable cuyas necesidades no están siendo cubiertas por el Estado.

Daniela Alburquerque, del Centro de Trastornos del Movimiento (CETRAM), y Solange Vallejos, directora ejecutiva de la Fundación Crescendo, visitaron el estudio de El Ciudadano para aportar una mirada crítica sobre este tema casi invisible en torno a adultos discapacitados que carecen de garantías en lo más básico, como es contar con un tercero que los alimente.

Vallejos valoró que exista la unión de múltiples organizaciones para «trabajar en conjunto» por un proyecto, esperando así que el Estado haga el mismo ejercicio y logre conformar una mesa con todos los actores involucrados, no sólo a través del Servicio Nacional de Discapacitados (Senadis) bajo el Ministerio de Desarrollo Social, sino sumando a los ministerios de Salud, Vivienda y Hacienda.

«España es uno de los ejemplos en términos de política sobre problemas de discapacidad y situación de dependencia», afirmó.

Alburquerque agregó que abordar el problema como un trato a «pacientes» acota el asunto a un solo ámbito de la vida humana, ya que más allá de un tema sanitario lo que se necesita es articular «acciones sociales». Y citó un ejemplo.

«A propósito del Plan Nacional de Salud Mental y Psiquiatría, nace la problemática y desde los hospitales psiquiátricos empiezan a cuestionarse la vulneración de derechos que surge dentro, y empieza a generarse todo un modelo, con mil pendientes, desde el campo de la salud, del Ministerio de Salud, pero no corresponde. La residencia, las casas, son un espacio vinculado a Vivienda… y eso, la posibilidad de articular una mirada intersectorial en Chile, ha sido muy difícil en el mundo de la discapacidad», señaló.

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