¿Comer papas fritas en exceso puede causar ceguera irreversible?

La peligrosidad de las papas fritas radica en los altos contenidos de calorías, sodio y grasas trans, un coctel considerado como el tipo de lípidos más dañino al organismo.

El ritmo acelerado de la nueva era ha llevado a cambiar los hábitos del ser humano, entre ellos el alimenticio, que en algunos casos pueden llegar a causar daños parciales o irreversibles por sus efectos progresivos en la salud.

Un ejemplo de estos riesgos fue sacado a la luz pública esta semana en Reino Unido, donde salió a la luz el caso de un joven que se quedó ciego por alimentarse única  y exclusivamente de papas fritas.

Por inocuo que pareciera, el niño británico fue diagnosticado por los especialistas con “pérdida de visión” después de pasar años alimentándose únicamente a base de papas fritas y, ocasionalmente, pan de molde, jamón y salchichas, al estilo americano.

La cadena británica BBC reportó que el chico, oriundo de Bristol, tiene 17 años, y su visión se ha deteriorado y fue diagnosticado con ceguera.

La doctora Denize Atan explicó que el joven “tiene zonas ciegas en su visión. Esto quiere decir que no puede conducir y que tendrá grandes dificultades para leer, ver la televisión o reconocer caras”.

La dieta que recibió su organismo durante un largo tiempo le ocasionó una grave falta de vitamina B12 y vitamina D en su organismo, además de otros minerales importantes.

Se trata de un paciente con neuropatía óptica nutricional, que es tratable si se diagnostica temprano, pero este caso es tan grave que las fibras del nervio óptico del joven han sufrido demasiado daño, por lo que su afectación es definitiva y considerable.

“Tiene puntos ciegos justo en el medio de su visión. Eso significa que no puede conducir y que le resultará muy difícil leer, mirar la televisión o distinguir rostros. Sin embargo, puede caminar por sus propios medios porque tiene visión periférica”, añadió.

Alimento peligroso

De acuerdo con un estudio realizado por la revista The American Journal of Clinical Nutrution, existen graves peligros al ingerir cotidianamente papas fritas, éstas pueden desencadenar varios problemas a la salud, e inclusive, ser letales para las personas.

Su peligrosidad radica en los altos contenidos de calorías, sodio y grasas trans, un coctel considerado como el tipo de lípidos más dañino al organismo.

Varios estudios han relacionado durante mucho tiempo el consumo de alimentos fritos, como papas fritas, pollo frito y snacks fritos, con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas.

Y es que los métodos de fritura convencionales crean grasas trans, un tipo de grasa que eleva el colesterol «malo» (LDL) y reduce el «bueno» (HDL) en el organismo.

A estos riesgos estuvo expuesto el joven británico por un largo tiempo, que según explica la Dra Atan, se debió a “una aversión a la textura de algunas comidas que no toleraba”.

Para el chico “las patatas fritas eran el único tipo de comida que sentía que podía comer” y su dieta se componía “esencialmente” de patatas fritas de un comercio local, aunque a veces también comía rebanadas de pan de molde, jamón y salchichas.

La madre del joven relató que desde los siete años su hijo se negaba a comer si no era lo que él quería.

Sobre este tema, sus maestros en la escuela primaria también alertaron a la familia, ya que el niño no probaba bocado a la hora del almuerzo, supuestamente porque no toleraba la textura de una buena cantidad de alimentos en su boca.

“Le hacía un sándwich o le daba fruta, pero no se la comía. Siempre ha sido muy delgado por lo que no nos preocupaba su peso. Uno escucha hablar todo el tiempo sobre la comida basura y la obesidad (…) pero de todos modos él estaba muy delgado”, dijo la madre del chico, ctada por la cadena Telemundo.

“Ahora el daño es irreversible. Empezó la universidad y tuvo que dejarla porque no podía ver ni oír. Es una pesadilla”, lamentó.

Nocivas y adictivas

Está más que demostrado que consumir patatas fritas es bastante adictivo, por lo que quienes están acostumbrados a estos alimentos no pueden dejarlos de la noche a la mañana.

A los 14 años de edad, el adolescente acudió al médico porque sentía cansancio y malestar general, tras lo que le recetaron varios suplementos para paliar la falta de vitaminas, pero no siguió el tratamiento ni cambió su dieta.

Más allá de conocer que provocan sobrepeso, el problema de este joven no se trató desde que fue detectado, por lo que el nervio óptico murió y el daño se ha vuelto permanente, señalaron los especialistas.

Según un grupo de científicos, en algunos estudios realizados se ha descubierto que el tipo de alimentos como las patatas fritas estimulan las áreas cerebrales que se relacionan con el placer, la adicción y la recompensa.

Además existen otros factores como el contenido de sal y lo crujiente de este producto que también pueden generar mucho placer.

Un estudio, publicado en la revista The American Journal of Clinical Nutrition asegura que “el consumo frecuente de patatas fritas parece estar asociado con un mayor riesgo de mortalidad”.

Sin embargo, aclara que se deben realizar estudios adicionales con grandes muestras para confirmar si también el consumo general de patata está asociado con un mayor riesgo de mortalidad en las personas.

Los especialistas consideran que, en el origen del problema del joven británico, podría encontrarse un trastorno alimentario llamado Arfid (trastorno de ingesta restrictiva de alimentos), por culpa del cual quienes lo padecen se vuelven sensibles al sabor, la textura, el olor y la apariencia de ciertos tipos de alimentos.

Actualmente, el adolescente toma suplementos multivitamínicos, pero los médicos tratantes no aseguran que su comportamiento alimentario haya cambiado mucho, a pesar de haber visto gastroenterólogos, dietistas , el equipo de salud mental infantil y especialistas en trastornos alimentarios.

Según la doctora Atan, alrededor de 2 mil millones de personas en todo el mundo se ven afectadas por deficiencias de micronutrientes. Pero hay poca conciencia entre los profesionales de la salud y el público sobre el daño que este tipo de alimentos pueden causar a la salud visual.

Sigue leyendo: