Meghan Linsey, participó del programa “The Voice“. La chica ya tiene cientos de fanáticos y una carrera consolida.
Pero, hubo algo que provocó que frenara todas sus actividades y que terminara en cama y bajo cuidados.
La joven un día despertó con una extraña sensación en el rostro. De pronto miró hacia un lado y vio una araña muerta.
Cuando fue a ver su rostro en el espejo, se encontró con que tenía la cara hinchada y rojiza ya que la araña la había mordido.
Ella tomó la araña, la puso dentro de una bolsa y fue al hospital. Una vez allí le dijeron que había sido mordida por una araña reclusa parda, una de las más venenosas de Estados Unidos.
El veneno de la araña provocó que se creara un agujero en su rostro, pero afortunadamente encontró un tratamiento que incluyó entre muchas cosas, entrar a una cámara hiperbárica para reconstruir el tejido.
Reveniu
