Es travieso, comelón y rebelde

El oso Goiat a punto de ser expulsado de los Pirineos (+VIDEO)

Después de la presión del sector ganadero, el Gobierno catalán propone su “captura y traslado”, aunque se deconoce a dónde podría ser llevado

Por Isailen Piñango

20/07/2018

Publicado en

Animales / Tendencias

0 0


El oso pardo de garras largas y afiliadas llamado Goiat (palabra que en la variante pallaresa del catalán significa mozo) se ha convertido en el terror de los Pirineos y, últimamente, le ha dado por comerse el ganado y otros animles de los pobladores del sector.

Las autoridades han contado al menos 15 ataques a la ganadería desde abril pasado. Entre sus recientes víctimas también se encuentran seis yeguas y cuatro potros, además de varias ovejas. Todos los ataques han sido en la cordillera montañosa situada al norte de la península ibérica, entre España, Andorra y Francia.

Después de la presión del sector ganadero, el Gobierno catalán propone su “captura y traslado”, según anunció el consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Damià Calvet.

Todavía se desconoce cuándo y dónde podría ser trasladado el desobediente Goiat. Según responsables de la Generalitat, esta decisión “no se puede tomar en caliente” y la medida, en cualquier caso, deberá contar con el beneplácito de Francia, que también participa en el programa europeo.

“Un solo ejemplar no puede poner en peligro un trabajo exitoso de 20 años”, explica Ferran Miralles, director general de Políticas Ambientales de la Generalitat de Cataluña.

Antecedentes de Goiat, el oso rebelde

Goiat es un oso de hocico chato, cráneo alargado que pesa unos 200 kilos. Este espécimen fue capturado en Eslovenia y liberado en 2016 en el Parque natural del Alt Pirineu en Isil (Lleida), en el marco del programa europeo de reintroducción del oso pardo Pyroslife, que se encarga de las sueltas de este mamífero omnívoro que en los ’90 estuvo a punto de desaparecer de los Pirineos.

Los expertos señalan que el oso fue traido a Pirineos para tratar de frenar la consanguinidad que el oso llamado Pyros extendía entre los ya 43 ejemplares que habitan la zona, que en 1996 solo eran tres.

En la actualidad, la mayoría de los osos que habitan los Pirineos son hijos, nietos y hasta bisnietos de Pyros, un ejemplar también de origen esloveno liberado en 1997 que copula hasta con sus nietas.

En la cordillera Cantábrica se estima que viven otros 300, según datos de la Fundación Oso Pardo. A continuación, un video de Goiat corrriendo por la coordillera:

Joan Caball, coordinador nacional del sindicato agrario mayoritario de Cataluña, expresó que “nosotros tenemos claro que antes de los animales están las personas. Goiat ha demostrado que la introducción del oso pardo ha traído problemas. Tenemos que plantearnos qué número de animales podemos albergar en el territorio. Hay mucho desconocimiento sobre las dificultades a las que nos enfrentamos en el campo”.

Los ecologistas no tardaron en pronunciarse a las palabras de Caball. “Tienen razón en quejarse de que los urbanitas a veces no sabemos del todo como viven allí. Pero entre todos, tenemos que ponernos de acuerdo por el interés general y conseguir que el oso pardo pueda subsistir”, rebatió Jaume Grau, de Ecologistas en Acción.

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones