Ahora la experiencia es con realidad aumentada

¡Nostálgico! El juego “la culebrita” o “serpiente” volvió para quedarse

En esta nueva presentación del juego también podrás compartir en red tus puntajes con otros usuarios de facebook

Por Isailen Piñango

03/08/2018

Publicado en

Diversidad / Tendencias

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Si eras uno de los que se quedaba hipnotizado, a principios de la década del 2000, jugando con un teléfono analógico Nokia y su respectiva «culebrita» o «serpiente», te contamos que ya salió una nueva versión de este juego, pero ahora con realidad aumentada y en una popular red social.

Parece un invento bastante creativo, pero la misma marca ahora ofrece a sus usuarios la posibilidad de utilizar la cámara de sus teléfonos para ver la culebra como si estuviera en el mundo real.

Imagínate una culebrita o serpiente en tu habitación, pasando por encima de un zapato o, peor, por encima de tu cama ¡De locos! Otra razón más, para no olvidar a una marca que sacó buenos teléfonos y los más resistentes.

¿De qué va la culebrita o serpiente?

La trama del juego se basa en una culebrita o serpiente que empieza pequeña y persigue frutas para comer para volverse más larga. El juego se hace complejo a medida que el animal se hace más largo y con su cola empieza a llenar la pantalla cual laberinto. La cabeza no de debe tocar la cola porque pierdes y tendrás que empezar de nuevo.

Por ahora, esta nueva edición del juego solo se puede disfrutar por medio de Facebook, factor que les da la posibilidad a sus usuarios de transmitir en vivo sus partidas.

Si creías que esto era todo, te equivocas, porque aquí te va lo mejor y es que se  podrá jugar en red y los jugadores podrán compartir sus puntajes con otros usuarios de facebook.

Cómo jugarlo

  1. Abre la aplicación de Facebook
  2. Haz clic en el ícono de la cámara, en la parte superior izquierda para abrir Facebook Camera.
  3. Busca Snake Mask.
  4. Ya puedes jugar.

Las aplicaciones de juegos son muy divertidas y educativas. Sin embargo, no hagas de un juego en una adicción, porque te puede convertir en un ser asocial e, incluso, te puede hacer descuidar tus responsabilidades.

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