«Juntábamos las monedas de cien para ir al supermercado y comprar las hamburguesas de noventa»: Álvaro Ballero y las confesiones de sus malos momentos

Unas impactantes y dolorosas declaraciones realizo esta mañana el polémico y vilipendiado ex Chico reality, Álvaro Ballero

Por Pato Lakes

26/10/2017

Publicado en

Tendencias

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Unas impactantes y dolorosas declaraciones realizo esta mañana el polémico y vilipendiado ex Chico reality, Álvaro Ballero. En una entrevista concedida al matinal de TVN «Muy Buenos Días», reveló un momento de triste decadencia y escasez económica que ha remecido los cimientos de los tabloides.

Recordemos que hace un par de días atrás se supo que el ganador del programa pionero de tele realidad «Protagonistas de la Fama» se había hecho merecedor del premio mayor del show debido a un criticado «arreglo», de acuerdo con lo declarado por el actor Vasco Moulian que se desempeñó como uno de los profesores en el extinto primer reality de la TV chilena.

Esta mañana Ballero volvió a irrumpir en el escenario de la farándula con un crudo relato de los duros momentos económicos que le tocó vivir junto con su pareja. «Juntábamos las monedas de cien, y hasta de diez, para ir al supermercado de la esquina y comprar las hamburguesas de noventa (pesos)», confidenció angustiado el ex rostro de TV.

Asimismo habló acerca de sus problemas psicológicos de personallidad: «Estoy seguro que si yo voy a un psicológo me van a decir que soy depresivo», aseguró Ballero. Con su declaraciones no hace más que recalcar el mal momento mediático, y tal vez económico, por el que se encuentra su ya obsoleta carrera televisiva.

En el mismo matinal de TVN fue donde Vasco Moulian, comentando acerca del fraude que resultó ser la final de Protagonistas de la Fama, declaró que Álvaro «no tenía ningún talento».

Ballero está claramente afectado con todo lo que la ha significado para su vida el cuestionado paso por la TV que la ha tocado vivir y dijo: «Y yo alguna fui el payaso del circo». También acusó que los productores lo vieron como una mercancía y lo trataron como una marioneta.

Sin embargo, sigue diciendo que le gusta la televisión. De hecho recalcó que «en un momento me sentí dueño del mundo. Sentí que el mundo estaba a mis pies».

Pese a todos los beneficios de los que gozaba por ser un rostro televisivo reveló que en esos momentos se sentía más solo que nunca y completamente vacío.

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